Estos días he tenido la suerte de jugar al último título de Bioware, Mass Effect Andromeda, un juego que arrastraba en su mochila una expectación enorme en su debut en la presente generación tras regalarnos tres entregas magníficas en la pasada, tres juegos que elevaron al estudio canadiense a la categoría de maestros, referentes del género rol occidental. En su día ya lo analizamos y le dimos un 8, un notable alto, que no está nada mal (sí amigos, un 8 es una gran nota, ya la quisiera para mi en los exámenes).

Fijaos ahora que digo “la suerte”, porque si atendemos a la feroz crítica a la que se ha visto sometido el juego desde su lanzamiento, más de uno podría pensar que se trata de una condena. Debo confesar que aún no lo he completado al 100%, pero con más de 30 horas jugadas tengo ya una opinión bastante formada de la calidad del juego, sus fortalezas y debilidades, y creo que las críticas a las que se ha visto sometido han sido desproporcionadas gracias, una vez más, a la moda hater.

¿Y qué es la moda hater? Una tendencia que va creciendo gracias a las redes sociales pero que viene de lejos. Hater, que podría traducirse como odiador, es una persona que muestra sistemáticamente actitudes negativas u hostiles ante cualquier asunto, gente que se dedica a criticar todo lo susceptible de ser criticado, y si no encuentra nada para criticar… se lo inventa. Haters ha habido siempre, pero en los últimos años la gente se ha dejado arrastrar por esta tendencia a criticarlo todo de forma despiadada, muchas veces porque todos lo hacen, por moda, convirtiendo en virales gifs y vídeos donde se explotan los puntos débiles de un juego para ridiculizarlo.

¿Tiene fallos Mass Effect Andromeda? Sí. Muchos, además. También los tenían las entregas anteriores, también juegos sobresalientes como Fallout o Skyrim los han tenido, es algo habitual cuando el juego es grande, presenta mundos abiertos y ofrece multitud de posibilidades. Programar todo eso es tan complejo que es normal que se escapen bugs, que algunas animaciones no sean tan brillantes como otras. Más de uno en Bioware se estará planteando que para la próxima entrega las caras de los protagonistas sean fijas y eliminar el editor, o hacer un juego más “pasillero” para que todo funcione como un reloj suizo. Aunque seguro que, si hacen eso, los haters atacarán por la pérdida de opciones y las limitaciones, porque los haters siempre tienen razones para odiar.

En el caso de Bioware y Mass Effect se han sobrepasado además límites que pocas veces se habían dado. Críticas personales a varios miembros del equipo de animación, insultos, incluso amenazas, que han hecho que la mayoría de nosotros sienta vergüenza ajena por la cantidad de energúmenos que aprovechan las redes sociales para soltar su bilis y quedar impunes. Todos nosotros debemos mirarnos el ombligo y darnos cuenta que, aunque es tentador hacer un retweet a un GIF gracioso donde un personaje anda como un pato, viralizar esos contenidos puede hacer daño al juego y al estudio, tirando por tierra un trabajo que decenas de personas, tal vez cientos, han dedicado durante varios años de duro trabajo.

Mass Effect Andromeda cuenta con un apartado técnico de gran nivel. Y lo digo así, sin ponerme colorado. Ya no solo a nivel visual, con unos mundos enormes, variados y un uso de la iluminación que deja algunas postales de gran belleza, como podéis ver en este artículo, también es destacable la cantidad de personajes, elementos, planetas, bases y secretos que guarda el título o lo bien que funciona su sistema de coberturas (que quizás en un par de ocasiones nos puede dejar vendido, pero serán miles las que nos faciliten las cosas). La IA es bastante competente, el sistema de decisiones es relevante - no como en otros juegos que está de adorno - y con el último parche, además, han conseguido que las caras de muchos personajes luzcan ahora mucho mejor, un trabajo enorme en un tiempo record.

Se puede hablar de los errores de un juego. No, mejor dicho se debe. Bioware debió retrasar el juego un mes - mínimo - para pulir las animaciones faciales de muchos NPC y corregir bugs, y no hacerlo ha sido un error que ha ensuciado su prestigio como estudio, y nosotros, como prensa y también como usuarios, debemos exigir a las compañías que abandonen la moda de lanzar juegos “beta” que luego corrijan con parches, en el mejor de los casos. Pero una cosa es eso y otra centrar todo el discurso en lo malo y obviar lo bueno, y Mass Effect Andromeda tiene tantas cosas positivas por encima de las negativas que rompe la balanza.

Pero oye, hablar bien de un juego que todo el mundo esperaba que fuese bueno no vende, no es “trend”, es más divertido reírse de un bug o una animación cutre, especialmente si no tienes pensado comprarte el juego, porque no te interesa, no tienes dinero o, sencillamente, no saldrá para tu consola.

Si os gustaron los anteriores no lo dudéis, darle una oportunidad, cuando estéis visitando planetas inexplorados, dudando si rescatar a un grupo de turianos en apuros o visitar la última reliquia de los relictos, entenderéis lo ridículo que resulta tirar por tierra el juego por tonterías como una cara rara o una animación fuera de lugar. Si no os gustan estos juegos simplemente no los juguéis. Pero no os dejéis arrastrar por la corriente hater.

Hacerme caso, disfrutar de los juegos es mucho más divertido.

NOTA: Todas las capturas de este artículo salvo la primera han sido tomadas con la opción "Share" y pertenecen a secuencias ingame.