En Sonyers hemos podido probar de primera mano la beta cerrada de uno de los juegos que más expectación está levantando desde su presentación el 26 de abril de este año.

Volviendo a sus orígenes, es muy notorio que Sledgehammer Games quiere hacer de su Call of Duty: WWII un título maduro, consolidado y de notable calidad. De momento, dado que es una beta, no hemos podido probar nada más que el modo multijugador (de una forma restringida), y aún así nos ha dejado con buen sabor de boca.

Como sabéis, y viendo el nombre que le han dado a esta entrega de la franquicia, nos moveremos en un ambiente de la Segunda Guerra Mundial y, empezamos a centrarnos en las impresiones, se ve genial. Le sienta muy bien un ambiente bélico clásico, el punto más criticado de la anterior entrega, Call of Dutty: Infinite Warfare. La gente ya reclamaba un cambio de registro, la vuelta a los orígenes de la saga, y por fin Activision ha contestado volviendo a situarnos en la última Gran Guerra, la que más shooters bélicos ha dado al mundo del videojuego.

Cabe destacar que en todos los modos de juego, que la mayoría son un denominador común a todos los títulos Call of Duty, se presenta una acción bastante más pausada de la que nos tienen acostumbrados, lo que será de agradecer por muchos jugadores que sean menos expertos. La reaparición es prácticamente inmediata y el ritmo de juego, aunque más lento, sigue siendo bastante acelerado comparado con la competencia.

A pesar de todo lo anterior, se da lugar a la estrategia: se ha encontrado un equilibrio que la anterior entrega rompía a favor de mayor frenetismo y mapas con más pasillos, salas pequeñas y esquinas. También podríamos destacar de los mapas una clara diferenciación entre distintas alturas, lo que hace que tengas que tener mil ojos puestos en la pantalla si no quieres que te eliminen rápidamente.

En la beta hemos podido probar las 5 divisiones: paracaidistas, la infantería, montañeros, acorazados y expedicionarios, que son las diferentes clases que estarán disponibles en el juego final. Quizá hemos echado de menos algo de personalización del jugador para la beta, pero eso son detalles menores y lo cierto es que las clases esta vez están muy diferenciadas y se potencia su uso en distintos momentos de las misiones, algo que siempre ayuda a buscar equipos equilibrados y a tener que trabajar juntos.

Los modos disponibles son los clásicos (duelo por equipos, capturar la bandera, todos contra todos...), pero podemos destacar por encima de todos a su gran novedad: el Modo Guerra. En este modo tendremos que conseguir ciertos objetivos que nos va marcando la partida en un tiempo determinado. Dependiendo del bando en el que te encuentres, lo verás desde una perspectiva u otra. Desde mi punto de vista, un soplo de aire fresco y bastante interesante donde será esencial la estrategia y el trabajo en equipo.

Además este modo cuenta con un pequeño vídeo introductorio a la hora de escoger escuadrón usando actores reales para el reclutamiento de cada clase, que nos mete mucho en el papel, así como breves secuencias de introducción y transición entre misiones, cierto hilo argumental para ir pasando de misión en misión y darle así más realismo y coherencia al conjunto de misiones que se nos presentan. Muy acertado.

En el mapa que hemos podido jugar durante este fin de semana, en primer lugar tendremos que defender una zona a corta distancia. Pasado este control, deberemos o construir un puente o bien impedir que lo construyan, y por último, los oponentes desplegarán tanques para cumplir sus objetivos. Sin duda, bastante adictivo, pero podríamos haber esperado más de este nuevo modo de juego, aunque insistimos en que es una beta cerrada y todo puede cambiar mucho en la versión definitiva del juego.

Todo en conjunto tiene como resultado un producto que ya hemos visto con anterioridad, no resulta tremendamente rompedor, pero tampoco es lo que se espera de un título de estas características. Es cierto que volver a la movilidad clásica (en nuestra humilde opinión se agradece, nos gusta más un punto de vista realista e histórico que uno futurista donde todo es saltar y deslizarse) le sienta bien y, muy probablemente, los fans más acérrimos de la saga lo agradezcan. Pero, ¿es realmente malo que la franquicia vuelva sobre sus propios pasos después de un intento de girar el rumbo que llevaba en la última entrega? Para nada, es una fórmula que funciona, frenética, divertida en compañía (e incluso en solitario) y que le queda mucha vida por delante, de eso estamos seguros.

El hecho de ser una beta ha provocado que en ciertas ocasiones tengamos algunos problemas de conexión y que las texturas, principalmente en el menú, no carguen como es debido, dando un aspecto de poca calidad gráfica. Afortunadamente, en los mapas esto no pasa, aunque suponemos que la calidad aumentará notablemente en al versión definitiva del juego. Lo que sí que nos ha sorprendido de una manera bastante notoria es en la calidad sonora, pues las armas y los efectos sonoros son bastante buenos.

También queremos destacar los tiempos cortos de reaparición y las zonas, que nos dejan realmente cerca de la batalla, de forma que aunque muramos muchas veces enseguida tendremos ocasión de vengarnos.

En Sonyers estamos deseando que llegue el lanzamiento de esta nueva entrega y desempolvar nuestros fusiles de la segunda guerra mundial de nuevo (de forma figurada, claro). Call of Duty: WWII está ante la ocasión perfecta de volver a recuperar terreno volviendo a sus raíces, y teniendo en cuenta que su gran rival Battlefield no lanzará nueva entrega y combatirá este año con un programa de DLCs es posible que CoD vuelva a arrasar. Lo tienen todo para hacerlo.