Este análisis ha sido realizado con una copia facilitada por Ziran. Juego disponible en NINTENDO SWITCH, PC, PLAYSTATION 4 (versión analizada) y XBOX ONE.

Introducción

El viejo Sonny regresa tras unas merecidas vacaciones para seguir contándoos batallitas, esta vez remontándonos nada menos que a 1996, fecha que vio nacer Quake de la mano de John Carmack, el padre de otros títulos de culto como Doom o Wolfenstein 3D.

Para los más jóvenes, viendo cómo a su alrededor empiezan a hablar de juegos legendarios tras 25 años, ¿qué es Quake? Posiblemente hayáis leído que es un juego de fantasía oscura inspirado en las obras de Lovecraft, pero, si bien existe esa influencia (de forma muy difusa todo hay que decirlo), esencialmente viene a ser un reboot de Doom, ni más ni menos.

Pero no adelantemos y pasemos a analizar este Quake Remastered, la versión vitaminada que nos trae Nightdive Studios tras un cuarto de siglo, que se dice pronto.

Quake Remastered 1

De vuelta al infierno

Cómo os decía, Quake bebe de las fuentes de Doom que da gusto, poniéndonos en la piel de una especie de marine que debe abrirse paso por los niveles a golpe de plomo.

En esta ocasión, además de los entornos cibernéticos y del mismo infierno, veremos una influencia de tipo gótico, que recuerda a otro célebre título como fue Heretic, con castillos, torres, criptas, etc.

El objetivo, como habréis adivinado, es no dejar bicho viviente a nuestro paso, hasta dar caza a Shub-Niggurath: una criatura de los Mitos de Cthulhu que hace las veces de malo maloso.

Quake Remastered 2

Aunque Quake intenta aportar algunos puzles, por lo general apenas se pueden considerar como tales al resolverse en cuestión de segundos. Por tanto tenemos un FPS de acción frenética, que nos invita a avanzar y descubrir cual sabueso, con esa particular sencillez tan adictiva de los juegos de antaño.

Quizás el toque más personal de Quake, a mi entender, lo representa el lanzagranadas: un arma que nos hace interactuar con el escenario, puesto que sus proyectiles rebotan antes de hacer explosión, y en cierto modo una revolución técnica de la época.

Contenido para aburrir

Quake Remastered no llega solo, no señor, sino junto a todas sus expansiones más una específicamente creada para la ocasión, sumando un total de cuatro.

De este modo, vamos a encontrar ante todo Scourge of Armagon y Dissolution of Eternity, que acompañaron al juego originalmente. Además se incluye Dimension of the Past, una expansión de 2016 lanzada con motivo del 20 aniversario.

Quake Remastered 3

Mención aparte para Dimension of the Machine, desarrollada por Machine Games específicamente para este Quake Remastered, con un aspecto fiel al juego pero a la vez mucho más fresco, incorporando nuevos elementos.

En algunas de estas expansiones podremos elegir la fase donde adentrarnos, como sucede con el juego principal, mientras que en otras seguiremos una progresión lineal. Todas en cualquier caso tienen varias fases a su vez divididas en distintos niveles, y es que no hablamos aquí de los típicos DLC actuales, concebidos como simples añadidos; en este caso las expansiones son prácticamente otros juegos.

Cabe además decir que en algunas de estas expansiones encontraremos armas inéditas, aunque debo confesar que, con permiso del lanzagranadas que ya he mencionado, no me parece que el arsenal de Quake destaque particularmente. Por supuesto también veremos nuevos enemigos, incluyendo algunos bosses.

Para cerrar este apartado, diré que el título del mismo no es una frase hecha. Quizás me he pegado una panzada demasiado intensa, y tiene su gracia que a estas alturas no sólo reviva Quake sino que juegue a sus expansiones. Sin embargo la experiencia peca de ser demasiado repetitiva, al menos desde un punto de vista actual.

Ensalada de mamporros

Quake Remastered incorpora toda una vertiente multijugador con la típica partida a muerte, que nos permite disfrutar de sesiones con hasta 8 jugadores online o 4 en local, aunque se pueden añadir bots controlados por la IA.

Lo mejor de todo es que se han añadido nuevos mapas, aparte de existir la opción de juego cruzado entre plataformas, ahora bien sólo para sesiones privadas.

¿Sabe a poco? ¿Qué os parece disfrutar de toda la campaña, incluidas sus expansiones, con hasta tres amigos? Dicho y hecho: podemos jugar en cooperativo, ya sea online o a pantalla partida, y sacarle el máximo jugo a la experiencia que ofrece Quake.

Quake Remastered 4

Lavado de cara

¿Cómo es eso de hacer un remaster, que no remake, de un título con 25 años a sus espaldas? Pues exactamente como lo ha hecho Nightdive Studios, manteniendo una esencia inevitablemente retro y al mismo tiempo potenciándola.

Quake Remastered me recuerda a la típica noticia de un juego actual corriendo a 8K con todo en ultra y no sé cuántos mods. Viene a ser en esencia eso, sólo que aplicado al año 1996.

Tengamos en cuenta que, a diferencia de Doom o Wolfenstein 3D, que combinaban polígonos con sprites, Quake tenía un motor completamente 3D, lo que ha permitido incorporar numerosas opciones en esta versión remasterizada, como antialiasing, suavizado de texturas, oclusión ambiental, alta resolución, sombras dinámicas, etc. Todas ellas se pueden desactivar para tener un calco del juego original, aunque la gracia a mi entender es disfrutarlo vitaminado.

Quake Remastered 5

Como ya he dicho, lo que veremos sigue estando completamente desfasado, pero a una tasa de 60fps y una resolución que va de 1080p a 4k dependiendo del sistema. Tiene su gracia pensar en la cara de incredulidad que hubiéramos puesto de contemplar estos gráficos en su momento, cuando ya Quake era puntero.

Sobre el sonido, la banda sonora fue muy celebrada al correr a cargo de Trent Reznor, líder del grupo estadounidense Nine Inch Nails. Sin embargo, lo cierto es que para el bueno de Trent esta colaboración (no cobró un duro) supuso una toma de contacto con la música ambiental, un experimento por así decirlo.

De este modo y contra la opinión generalizada, para mí Quake no tiene una música que acompañe adecuadamente la acción, aunque no dudo que debe de ser muy disfrutable escuchada desde un sofá. Concluyendo con mi particular herejía, prefiero con mucho las melodías de las expansiones, a cargo de otros artistas.

Quake Remastered 6

Los efectos son característicos, de esos que se graban en la sesera como el sonido de las puertas de Doom. Los enemigos, como era habitual entonces, siempre delatan su presencia con algún tipo de grito, rugido o graznido que llegan a hacerse entrañables. Los textos de todo el juego están en castellano.

Conclusión

¿Merece la pena volver a Quake? Os diría que si la palabra es volver, sí, sin duda lo merece. Vais a tirar de nostalgia que da gusto, encontraréis esa jugabilidad inmediata y accesible que tanto se echa de menos, y ya puestos podréis catar alguna de las expansiones que seguramente os dejasteis en el tintero, o por lo menos la nueva de Machine Games. ¡Y hasta con amigos!

Ahora bien, si un profano me preguntara por Quake Remastered, le diría que puede añadir a su videoteca una obra de culto por 10 euros. Pero honestamente, para lo que es jugar, sólo podría recomendárselo si es un amante de los títulos retro; en caso contrario, la experiencia que supone Quake ha sido superada en todos los sentidos.