La franquicia FlatOut llegó de la mano del estudio Bugbear Entertainment a Playstation 2 hace más de una década. Tras una tercera entrega en 2011 con cambio de estudio y muchas críticas negativas, los franceses Kylotonn (que han trabajado en los recientes WRC y colaborado en el futuro Syberia III) retoman la licencia con un nuevo título para Playstation 4, que mantiene las líneas generales de la saga con amplio contenido para un jugador y opciones online.

Mucho más que carreras

La base de FlatOut 4: Total Insanity reside en competir contra otros pilotos en alocadas carreras donde chocar contra ellos incrementa nuestra barra de nitro, algo que nos puede facilitar el camino a la victoria. También hay carreras del estilo Crash Team Racing, donde disponemos de cuatro armas con las que quitarse de en medio a los rivales como una onda de choque (ideal frente a los rivales cercanos) o una bomba que podemos lanzar hacia delante.

También hay un tipo de competición en el que todos los pilotos se enfrentan entre sí en una arena circular, tomando la esencia de Destruction Derby y llevándola a su propio terreno con armas y escudos: puntuamos por cada oponente abatido a la vez que esquivamos los ataques contrarios.

Para terminar, tenemos los retos en el Estadio: diversos minijuegos lanzando por los aires a nuestro piloto: desde hacerlo caer en unos vasos gigantes o utilizarlo para destruir el escenario a lo Angry Birds. Se trata de una modalidad con una jugabilidad asequible y alejada de las carreras convencionales, lo que da variedad a este título.

El apartado gráfico es correcto aunque algo tosco, sobre todo por el aspecto de los vehículos y de cada uno de los veinte circuitos de este juego. Los circuitos tienen un trazado con múltiples bifurcaciones y rutas alternativas, aunque acaban por hacerse algo repetitivos porque los escenarios son muy parecidos entre sí. En cuanto a la banda sonora, es muy adecuada para las frenéticas carreras en las que participamos, con temas rockeros y de ska.

Modo Carrera duradero, pero algo monótono

El modo de juego principal de FlatOut 4: Total Insanity es su modo Carrera. Debemos superar una serie de eventos como contrarrelojes, torneos de varias carreras o arenas de destrucción, lo que nos reportará dinero para comprar nuevos vehículos o mejorar los que ya tenemos, además de desbloquear nuevos coches. Los eventos están organizados en tres ligas diferentes, aunque inicialmente sólo tendremos acceso a la de dificultad más baja. Las carreras también nos premian si realizamos la vuelta más rápida o si hemos golpeado el mayor número de veces a los oponentes.

El número de competiciones de cada liga es bastante grande (cada una de ellas cuenta con sus propios vehículos), lo que garantiza muchas horas de juego para un solo jugador. Sin embargo, este modo se acaba haciendo bastante repetitivo por el tipo de carreras y los entornos de cada circuito, muy parecidos entre sí en cada liga. En este sentido, podrían haberse añadido carreras exclusivas para un tipo de vehículo u otro tipo de eventos para acabar con esa sensación de monotonía tras las primeras horas de juego. Tendremos en torno a una treintena de vehículos para elegir, aunque la sensación general es que es mucho mejor mejorar nuestra elección inicial en lugar de adquirir un nuevo coche.

Otro de los modos principales para un jugador es el modo FlatOut, donde debemos cumplir diversos retos como lograr una determinada puntuación en los minijuegos de estadio o alcanzar un tiempo determinado en una contrarreloj. Conforme acumulemos puntos en este modo de juego, iremos desbloqueando nuevos desafíos

Modos multijugador para todos los gustos

La vertiente multiplayer de FlatOut 4 es bastante amplia, especialmente en el modo online. Podemos crear partidas públicas o privadas, además de entrar en partidas ya existentes, para disputar carreras o combates de arena. La personalización de las partidas es muy amplia, pudiendo seleccionar el tipo de vehículo, el tipo de competición (atrapa la bandera, carreras convencionales o con armas, etc.) o el circuito.

El juego también dispone de un modo offline hasta ocho jugadores pero se centra exclusivamente en los distintos eventos en el Estadio. Jugaremos por turnos con el objetivo de conseguir la máxima puntuación en cada una de las pruebas seleccionadas. Se agradece la presencia de un modo offline, pero podría haberse potenciado con la posibilidad de disputar carreras a pantalla partida entre dos jugadores, algo bastante habitual en los títulos de conducción.

Físicas poco trabajadas

Éste es uno de los puntos débiles de FlatOut 4: Total Insanity: el manejo de los vehículos. Las físicas no están todo lo suficientemente pulidas tratándose de un juego de conducción, algo que se acentúa en un arcade como éste. Los vehículos parecen excesivamente ligeros y tienden a descontrolarse con facilidad cuando recurrimos al turbo o al tomar determinadas curvas, lo que nos llevará a colisionar contra un muro y perder valiosos segundos.

La inteligencia artificial de los rivales no es todo lo buena que podríamos esperar: nuestros competidores tienden a chocar contra nosotros para ganar, y en estas circunstancias da la impresión que el jugador siempre pierde (y en muchos casos, recurriremos a reiniciar la carrera porque la victoria se hace imposible).

Conclusiones

FlatOut 4: Total Insanity es un arcade divertido a corto plazo, pero su modo principal, a pesar de ser bastante largo, acaba haciéndose repetitivo debido a la similitud de los circuitos y al tipo de pruebas, además de una IA que parece dirigirse siempre contra nosotros.

Los minijuegos del modo Estadio ayudan a paliar esa sensación de linealidad, sin olvidarnos de las partidas online, que siempre aportan un mayor grado de diversión y estiran la durabilidad del título.

Sin duda, es un juego que disfrutarán los fans de la conducción más alocada y menos realista. Si sois de ese grupo, no lo dudéis.