Este análisis ha sido realizado gracias a una copia versión 1.0.2 facilitada por SOEDESCO, título ya disponible en PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series X/S, PC y Nintendo Switch (versión analizada).
La franquicia de The Legend of Zelda ha calado en tantos jugones como desarrolladores, al punto que muchos seguimos añorando los títulos nacidos en esta franquicia. Sin embargo, A Link to the Past al día de hoy es un juego que ha dejado una gran estela al inspirar a nuevos títulos con su singular estilo jugable y de arte.
Samuel North, fundador y desarrollador solitario detrás de Pixel Heart Studio, inició una aventura al desarrollar Airoheart que rápidamente logró el apoyo de 949 mecenas en Kickstarter, la editora SOEDESCO no perdió el tiempo y le dio el impulso internacional para que el proyecto floreciera hasta el día de hoy.
La historia
Airoheart está ambientado en la tierra fantástica de Engard, en donde dos grupos viven enemistados desde tiempos antiguos; los Elmerios y los Britones. Uno tan distinto del otro, los Elmerios son unos seres mágicos dedicados a la paz, mientras que los Britones son violentos y envidiosos ante la prosperidad de los Elmerios. Aquí es donde nuestro protagonista Airoheart es presentado como un joven mitad-Briton que vive tranquilo junto a su abuelo en el territorio Elmerio.
Con el progreso de la narrativa se nos revela que un grupo de Britones está reuniendo los fragmentos de la mística piedra Draoidhe, que con su poder puede inclinar la balanza en beneficio de los Britones. Nuestro protagonista es guiado por una misteriosa voz que lo impulsa a reunir todos los fragmentos antes que nadie.
A pesar de ser una historia un poco apresurada, es interesante el giro que toma al no seguir la típica de ‘salvar a la princesa’, tampoco nos volará la cabeza, mas, logra mantener la atención e incentivarnos a seguirla hasta su conclusión. Asimismo, me sorprendió que no se sigue la clásica fórmula de los malos son malos porque sí, ya que Airoheart recibe ayuda de ambos bandos en discordia que habitan Engard y que al final del día complementa muy bien nuestra aventura al darle una profundidad poco vista en este tipo de juegos.
La jugabilidad
Estamos ante un juego de aventura con perspectiva cenital con un pequeño toque RPG, aquellos jugones de la vieja escuela rápidamente identificarán esa clara inspiración de Zelda: A Link to the Past. La premisa es sencilla, golpeamos con nuestra espada, tenemos escudo, podemos rodar, bombas, flechas, viajaremos por las distintas mazmorras, recolectaremos habilidades, ítems y descubriremos los secretos ocultos de Engard.
A diferencia del Zelda tradicional, el juego nos presenta el uso de runas que nos permitirán invocar distintas magias con nuestro maná, tales como mover bloques pesados o curarnos. Lo sabroso del juego es la exploración y la libertad que tenemos para ir de aquí a allá en su mundo abierto, con el uso de nuestros artilugios nos abriremos camino por pasadizos secretos o cuevas misteriosas, de igual modo, nuestros corazones de vida se pueden incrementar al reunir tres calabazas corazón.
El mundo de Engard nos ofrece mucho por explorar y con facilidad nos encontraremos con puntos de interés que nos harán desviarnos de la aventura. Las mazmorras son el punto principal de la aventura, repletos de acertijos con un moderado nivel de desafío y enemigos con patrones de movimiento variados que nos harán gozar el reto.
Un punto negativo a destacar es la ausencia de un mapa dedicado que nos ayude a dar seguimiento a la exploración. Por fortuna, las mazmorras tienen un diseño sencillo de recordar y difícilmente nos perderemos.
No tenemos vidas, aunque perdamos todos los corazones, el juego nos manda al inicio de la mazmorra respetando el progreso que hayamos realizado. Los enfrentamientos contra los jefes son satisfactorios y variados, sin embargo, al final del día la experiencia general se siente como un juego con grandes ideas que no termina de desarrollarlas por seguir el patrón de A Link to the Past.
Los gráficos y banda sonora
El estilo de arte pixelado hecho a mano es hermoso y nostálgico que sabe encantar a primera vista, se nota rápidamente que es un juego con mucha vida y color, los movimientos de los enemigos y de Airoheart están muy bien conseguidos, asimismo, las mazmorras tienen un diseño de laberinto que da gusto explorar en busca de ese secreto que nos permita desbloquear la puerta o la llave de acceso.
En cuanto a su rendimiento el juego corre a 30 fotogramas por segundo a una resolución de 1080p en la Nintendo Switch en modo TV, mientras que en modo portátil va a 720p. Todo el tiempo es estable, a pesar de la acción en pantalla no sufrí problemas. Aunque si tuve unos cierres inesperados y algunos bugs menores, mas, el desarrollador ha detallado que con el parche de día uno se solucionarán los problemas en su rendimiento, así que esto no debería de ser un problema significativo.
En lo musical cumple con tonos de 16-bits para acompañarnos en la aventura, además de variaciones con un toque de intriga en las mazmorras. Aunque, en mi opinión no logran destacarse e igualar el buen curro conseguido en la jugabilidad.
Una pega que me encontré en los efectos de sonido, es un estruendoso y molesto sonido que se escucha cuando somos golpeados y en otras situaciones incomprensibles. Llega un punto que os acostumbraréis, pero, no deja de ser molesto y hasta provoca sobresaltos por el susto inesperado.
Por su naturaleza estilo retro no cuenta con actuaciones de voz, para nuestra alegría nos ofrece textos y diálogos localizados en castellano. Tienen un tamaño bueno, incluso jugando en modo portátil se pueden leer sin problema y no perderemos hilo de la narrativa.
Conclusión
Airoheart es un juego de aventura bastante ameno que sigue fielmente la fórmula de los Zelda 2D, con una narrativa entretenida que se sale del molde establecido. Su nivel de desafío es disfrutable y su estilo de arte es un verdadero deleite.
A pesar de sus pequeños fallos como ese sonido molesto de escopeta al recibir daño, es un título recomendado para aquellos que han jugado A Link to the Past y buscan una experiencia parecida con un muy ligero cambio, pero satisfactorio. Además, cuenta con textos en castellano.
