Ayer mismo os contábamos que Ubisoft había decidido tapar con conchas los pechos y genitales de las estatuas, así como modificar ciertas obras de arte cubriéndolas de distintas formas en su recién estrenado modo Discovery Tour para Assassin's Creed Origins.

Una medida de censura que ha levantado mucha polémica en la comunidad, y sobre la que en Sonyers nos hicimos eco con un artículo de opinión que no hablaba precisamente bien de la medida.

Pues bien, la compañía francesa ha querido salir al paso defendiendo su medida con unas declaraciones que abogan por el sentido educativo del modo y la protección a los menores de este tipo de... arte.

Las declaraciones de Ubisoft

Desde el principio en la creación del Discovery Tour, nos planteamos que fuera una forma de permitir al máximo número de personas posible disfrutar y aprender sobre el Antiguo Egipto. Lo que significa que queríamos que el Discovery Tour pudiera ser utilizado por los niños con sus padres y por adolescentes, ya fuera en casa o en el colegio, en todos los países.

Es una versión adecuada para todo tipo de público, incluidos los más jóvenes, teniendo también en cuenta las sensibilidades culturales. Así que decidimos utilizar una versión adecuada para todo tipo de público, incluidos los más jóvenes, teniendo también en cuenta las sensibilidades culturales que pueden variar de un país a otro.

El modo Discovery Tour

Este añadido, que ha llegado junto a otras mejoras como la Partida +, ofrece un total de 75 visitas guiadas de entre 5 y 20 minutos de duración que nos muestran algunos aspectos sobre la vida de Egipto en la época en la que está representado el juego.

En él podemos descubrir la vida cotidiana del Egipto de los Faraones, detalles como sus templos, sus murallas, los principales emblemas de ciudades como Alejandría, las motivaciones de Alejandro Magno para construirla, la relación de Egipto con el Imperio Romano...

Se trata de un modo de lo más interesante, aunque por desgracia se ha visto empañado por esta censura tan impropia del pensamiento del mundo libre en el que, por suerte, la mayoría vivimos.