Ya tenemos con nosotros las cifras del prestigioso organismo NPD americano que se encarga de medir las cifras de venta de software y hardware en las tierras presididas por Donald Trump.

Una vez más PlayStation 4 ha conseguido repetir como consola más vendida en EEUU. No han trascendido las cifras, pero sí sabemos que juntando PS4 y Xbox One el número de consolas base instaladas superan en un 29% al conseguido por PS3 y Xbox 360 en el mismo periodo, lo cual indica un gran interés por esta generación y buenas noticias para ambas.

Además los gastos en hardware se han incrementado un 7% respecto a mayo de 2016, lo que suponen $127 millones, y como no, la culpable de este incremento ha sido la llegada de Nintendo Switch.

Fuente | Neogaf