Hemos sido invitados por Sony a disfrutar de su PlayStation VR Resort en Madrid, en el Gran Teatro Príncipe Pío, un lugar donde escapar de la plana y gris realidad para adentrarse en mundos virtuales de ensueño. No todo el mundo tiene la suerte de poder viajar estos días a la playa, o a la montaña, pero lo que nos propone la compañía es mucho más... ¿qué tal sumergirse en el profundo océano, convertirnos en astronautas por un día o limpiar el desierto de zombies?

Nada más entrar en el recinto, nos han hecho esperar en una simulación del interior de un avión de pasajeros, con los asientos perfectamente recreados. Una amable azafata nos ha preguntado si queríamos irnos de vacaciones a lugares mágicos y exóticos, tras lo cual hemos podido entrar por fin al santuario del vicio electrónico que es este VR Resort.

Lo primero que me ha llamado la atención es el contraste entre la luminosidad del exterior, en pleno mes de junio, y el interior del pabellón, ambientado con luz indirecta y bastante tenue, sin duda para que las pantallas donde se mostraban todos los juegos lucieran correctamente. Sin embargo, es justo decir que al poco tiempo mis ojos se han adaptado a este ambiente tan peculiar, a medio camino entre un balneario, un chiringuito de playa y una vieja sala arcade.

Hablando de los juegos, éstos eran los elegidos para hacernos vivir esta particular escapada virtual:

  • Carnival Games
  • Mindtaker
  • Windlands
  • Robinson the Journey
  • Dick Wilde
  • PlayStation VR Worlds
  • Waddle Home
  • Gran Turismo Sport
  • Mortal Blitz
  • Farpoint
  • Arizona Sunshine
  • Ancient Emuletor
  • CoolPaint VR
  • Flipy's Tesla

No hace falta decir que Gran Turismo Sport, que se podía probar por primera vez en España, lucía en un puesto de honor, con un par de sofisticados asientos para acercar aún más, si cabe, la experiencia de jugar a la realidad.

PlayStation VR Resort ha tenido lugar del 30 de junio al 2 de julio, unas 1.500 personas han podido acercarse durante el fin de semana para disfrutar de la experiencia de PSVR en sus 16 puestos habilitados, y es que como ya hemos apuntado en varias ocasiones la tecnología de la realidad virtual es algo que uno debe probar para convencerse y seguro que más de uno salió de allí directo a la tienda a por un casco, aprovechando la oferta de financiación de 20 euros en 20 meses sin intereses.

Por lo demás, el ambiente era distendido y tranquilo, y hasta nos invitaron a unas bebidas y algo de picar. La gente hacía colas bastante razonables para poder vivir estas escapadas virtuales. No se puede decir que los juegos fueran una colección de imprescindibles precisamente, pero tengo la esperanza de que en el futuro vuelva a un evento de estas características donde la gente se agolpe para jugar a verdaderos must have de la realidad virtual.

Nos ha gustado la experiencia, creo que incluso hemos cogido colorcillo y todo.