Este análisis ha sido realizado con una copia facilitada por ININ Games. Juego disponible en NINTENDO SWITCH, PC y PLAYSTATION 4 (versión analizada).

Introducción

Con Wonder Boy: Asha in Moster World son ya tres las viejas glorias del pasado que recupero, una detrás de otra, para traeros su análisis. En este caso tenemos una puesta al día de Monster World IV, título de Mega Drive que si no me equivoco nunca salió oficialmente en tierras europeas.

Puesto que todos estos juegos tiran de nostalgia, en sus reseñas me está pareciendo correcto hacer lo propio y contaros alguna batallita. En mi caso, el primer contacto con esta saga fue en el ordenador Amiga 500, a un juego que se llamaba Wonder Boy in Monster Land y que, si no me equivoco, fue el primer spin off del primer Wonder Boy que tanto éxito había cosechado en las recreativas.

Wonder Boy in Monster Land cambiaba radicalmente la propuesta del original y añadía buenas dosis de aventura e incluso elementos roleros sin dejar de ser un plataformas. En aquella época, acostumbrado a juegos más breves, recuerdo que me pareció un título interminable en el buen sentido. Una experiencia que sin duda me marcó.

Wonder Boy in Monster Land

No tuve más contactos con la saga, la verdad, salvo por Viking Child: un clon que pude disfrutar en mi vetusta Atari Lynx. En cualquier caso nunca llegué a probar otras entregas, porque entonces era difícil conocer el catálogo exacto de cada sistema, pero además en la serie Monster World se añadía el desfase entre los títulos japoneses y occidentales; por ejemplo, el primer Wonder Boy in Monster World por estas tierras era Wonder Boy V: Monsterland III en Japón.

Aclarados los antecedentes, centrémonos en el presente y veamos qué tal le ha sentado el lavado de cara a Asha y sus amigos.

¿Por qué Monster World IV?

Sinceramente no sé por qué se ha escogido Monster World IV para su puesta al día. Posiblemente porque fuera el último juego de esta saga y el más pulido.

En el título original de Mega Drive controlábamos a Asha, una niña con ínfulas de heroína que abandonaba su pueblo natal para viajar a la capital. En el transcurso descubriría que un gran mal se cernía sobre el mundo y, adivina adivinanza, de todo el reino sería ella la llamada a solucionar el percal.

Monster World IV

Monster World IV mantenía las características de sus antecesores, esto es un juego de desplazamiento lateral donde teníamos una vida en forma de corazones, y contábamos con pociones, objetos y armas cada vez más potentes. Ahora bien, esta entrega se molestaba algo más en añadir una carga narrativa.

Además, Monster World IV presentaba a los pepelogoos y más concretamente a uno de color azul que nos acompañaba e iba evolucionando, adelantándose así a lo que sería Pokémon. La criaturilla nos permitía hacer nuevos movimientos y era indispensable para la resolución de algunos puzles.

Puesta al día

Wonder Boy: Asha in Monster World es un fiel remake donde se preserva todo lo dicho, dando como resultado un videojuego que inevitablemente se siente un poco antiguo. Es decir, esta entrega no tiene nada que ver con los últimos juegos de Wonder Boy que han sido completamente reimaginados.

Wonder Boy: Asha in Monster World 3

En la labor de remozado, por mucha fidelidad que se haya preservado, han caído en ese mal tan actual de rebajar la dificultad. Por ejemplo, podemos recoger unas gotas de vida que nos otorgan un corazón adicional al reunir diez y que aquí son más abundantes.

Por lo demás la historia es calcada, pero hace algunos guiños al juego de Mega Drive. Por ejemplo, el sabio que nos permitía guardar la partida en determinados puntos nos cuenta cómo ahora se puede salvar en cualquier momento desde el menú de pausa. Tienen gracia estos detalles.

Salvar el mundo

Wonder Boy: Asha in Monster World se desarrolla a través de cuatro fases, divididas a su vez en varias zonas, al final de las cuales debemos rescatar a uno de los cuatro espíritus elementales que han sido capturados. A esto hay que añadir el viaje desde el pueblo a la capital, a modo de tutorial, y un último nivel en busca del malo maloso donde volveremos a enfrentarnos a casi todos los enemigos que hemos encontrado.

Wonder Boy: Asha in Monster World 4

Nuestro periplo empieza siendo muy simplón, casi infantil, y esto no cambia durante la incursión en el primer mundo. Por suerte, cuando resoplaba pensando en lo que me quedaba por delante, empecé a divertirme de forma natural.

Las tres fases restantes están mucho más inspiradas e incorporan puzles muy bien medidos, que no llegan a frustrar pero despiertan nuestro interés.

Por desgracia, como he mencionado antes, el remake es sensiblemente más fácil que la experiencia original, un error importante a mi parecer, ya que desaparece cualquier atisbo de reto "físico". Es muy posible que os paséis todo el juego del tirón sin morir una sola vez; ahora bien, para el que quiera entretenerse sin sudar lo más mínimo es perfecto.

Wonder Boy: Asha in Monster World 5

Apartado técnico

De momento hemos hablado de esta saga, de su estilo, de sus dinámicas, y hemos mencionado que Wonder Boy: Asha in Monster World es muy fiel a Monster World IV.

Vaya por delante que el juego ha sido completamente rehecho desde cero y técnicamente es algo completamente distinto, con unos personajes de estilo anime carismáticos y bien animados, y unos entornos que sin duda entran por los ojos, no demasiado complejos pero sí resultones.

Lo mismo puede decirse del sonido, totalmente actualizado. Las melodías no destacan especialmente, pero acompañan, y los personajes hablan en su japonés natal, eso sí con subtítulos en español.

Conclusión

Es posible que este análisis te haya dejado un poco igual, en cuyo caso he cumplido mi objetivo: así es como te hará sentir Wonder Boy: Asha in Monster World.

Entendedme. El juego tiene mucho mérito al preservar casi intacta una esencia de otro tiempo mientras presenta un completo lavado de cara, consiguiendo entrar por los ojos y ser bonito de ver hoy en día.

Además, Wonder Boy: Asha in Monster World despega de lo que es un inicio demasiado apático, llegando a ser agradable de jugar y, qué carajo, incluso en cierto modo se agradece su sencillez.

Wonder Boy: Asha in Monster World 6

No vienen mal unos cuantos personajes simplones y adorables, unas dinámicas inocentes y facilonas, y una historia entrañable y previsible que puede irse a las diez horas. Ahora bien, no esperéis mucho más.

Una última cosa: podéis encontrar Wonder Boy: Asha in Monster World en formato digital publicado por Studio Artdink, pero si os lanzáis a por la versión física conseguiréis también el Monster World IV original publicado por ININ Games.