Este análisis se ha realizado basándonos en la versión para PC y gracias a un código cedido por Playstation España.
The Last of Us Parte I se ha convertido en uno de los títulos más influyentes de los últimos años en lo que a la industria de los videojuegos se refiere. La historia, la manera de explicarla, el desarrollo de los personajes, las situaciones en las que se van encontrando, el nivel de detalle gráfico, el cómo están montadas las escenas de acción. Habría mucho de que hablar en este sentido, y todo bueno.
Es por eso que, cuando se anunció por parte de Sony que la primera entrega remasterizada llegaría a PC, todos aplaudimos a cuatro manos deseando disfrutar de TLOU en nuestros PC de sobremesa.
Lo que nadie se esperaba es que el port a este sistema fallara de la manera que lo ha hecho. Así es, ya lo decimos de entrada, estamos ante un port fallido, más cercano a Horizon Zero Dawn que a Days Gone o el excelente Uncharted Colección de los Ladrones, por no hablar de los dos Spiderman.
De dónde venimos, a dónde vamos
The Last of Us revolucionó en Playstation 3, se disfrutó en PS4 y volvió a destacar en PlayStation 5. Su secuela elevó el techo técnico de PlayStation 4 al máximo, demostrando que la anterior generación de videoconsolas PlayStation todavía tenía mucho que ofrecer. Y este 2023 se estrenó en HBO la serie dirigida, entre otros, por el mismo Neil Druckmann.
Desde hace poco más de dos años, Sony decidió llevar algunas de sus sagas más emblemáticas a PC, lo que nos trajo grandes alegrías y alguna decepción. Aún y con todo, poder disfrutar de estos grandes títulos en un ecosistema distinto al de PlayStation es una experiencia muy interesante.
Así que sí, había ganas de jugar con Joel y Ellie una vez más, de sobrevivir en medio de la catástrofe más terrible sufrida por la humanidad hasta la fecha y de volvernos a emocionar buscando una cura que seguramente nunca llegará a encontrarse (o quizás sí).
Descubriendo la versión de PC
Lo primero, estamos ante una conversión del título lanzado para PlayStation 5 el año pasado. Eso significa que, de entrada, todo el apartado gráfico, incluyendo la iluminación, reflejos y texturas, ha sido retocado respecto a su versión original de PS3 y a la remasterización de PlayStation 4, actualizándolo todo a los tiempos que corren. Y sí, ahora todo luce mucho mejor.
Lo primero que llama la atención cuando arrancas el juego en tu PC de sobremesa es la cantidad abrumadora de opciones de configuración de todo tipo que se nos muestra en pantalla. Podremos tocar todo lo que queramos para adaptar el título a nuestro equipo.
Evidentemente podremos jugar con teclado y ratón, aunque recomiendo sí o sí jugarlo con mando. Si tienes Dual Sense disfrutarás de todo el tema háptico del mando de Sony, así que vale la pena jugarlo de esta manera. El sonido también dispone de diversas opciones de configuración, aunque el apartado más interesante tiene que ver con el gráfico.
Aquí comienza el festival de opciones a configurar, dándonos libertad total en este sentido. Podremos seleccionar el número de FPS, los HZ de nuestro monitor, el nivel de calidad general del juego, el tipo de escalado y renderizado que queremos ejecutar, el desenfoque de movimiento, el campo de visión, la calidad de las animaciones, la distancia de dibujado, la calidad de las texturas en diferentes entornos y un conjunto inacabable de opciones personalizables. Y sí, podremos hacer uso de DLSS 2 y FSR 2.1, dependiendo de si tienes una tarjeta gráfica de Nvidia o de AMD.
El desastre que no esperábamos.
En el mundo de The Lasto f Us nadie se esperaba una hecatombe como la que tuvo lugar. Y, con este port a PC compatibles, nadie se esperaba que saliese la cosa tan mal, sobre todo teniendo en cuenta el fenomenal trabajo mostrado con Spiderman o Uncharted. ¿El motivo? Quizás el no haber invertido un par de meses más en la optimización.
De entrada, no importa mucho el PC que tengas; si te ha de fallar, te fallará. Puedes utilizar un i9 de última generación y una RTX 4090, o un Ryzen 7 5800X con una RTX 4080 y 32 GB de ram en el equipo. En cualquier momento te fallará.
Me he encontrado en situaciones en el que la carga de la CPU se disparaba, subiendo la temperatura de la gráfica por encima de los 90 grados y acabando produciendo un “crasheo”, con lo cual ha tocado reiniciar el equipo.
En otras ocasiones (esto sucede bastante) el número de FPS ha bajado hasta los 5 o 6 durante varios segundo, para luego dispararse hasta los 40. No depende de zonas concretas ni de cargas en segundo plano, es algo totalmente aleatorio. Con lo cual se hace poco recomendable jugar a esta versión del título en PC, al menos a día de hoy.
A todo estoy hay que añadir carga tardía de texturas en algunos momentos de la aventura, algún cuelgue aleatorio sin motivo alguno que lo justifique, una precarga de sombreadores que se hace eterna (entre 45 minutos y más de una hora, dependiendo el parche en el que juegues, antes de poder iniciar por primera vez The Last of US Parte I) y algunos chasquidos en el sonido totalmente injustificables a día de hoy.
En Steam Deck, emociones encontradas
Siempre he querido disfrutar de las grandes franquicias de Sony y PlayStation en un modo portátil. Desde que Sony asesinó a PSVita, esto se hacía del todo imposible. Pero ahora se puede gracias al sistema portátil lanzado por Valve hace poco más de un año. Y sí, al tratarse de un PC, esta versión arrastra todos los problemas de los equipos de sobremesa.
En mi caso, la experiencia ha sido agridulce. Por un lado está el hecho de poder jugar un título tan potente e influyente en un sistema portátil, lo cual es una auténtica locura. Pero el tema de los sombreadores (siempre está cargando sombreadores), los diferentes parches y actualizaciones, y los cuelgues que se producen mientras juegas, convierten la experiencia en algo un tanto decepcionante.
He probado todo tipo de configuraciones posibles y he sido incapaz de mejorar la experiencia de juego de una manera satisfactoria. Incluso tengo activado el FSR del propio juego y el de Steam Deck a la vez, con lo que consigo rascar unos insuficientes 6 FPS más respecto a utilizar solamente uno de los dos sistemas. He podido jugar con oscilaciones que van desde los 20 FPS hasta los 40 FPS, un rendimiento demasiado inestable para que la experiencia sea mínimamente agradable.
Conclusiones
Es cierto que Iron Galaxy y Naughty Dog están trabajando duro para solucionar todos estos problemas, pero todo apunta a que sucederá lo mismo que con Horizon Zero Dawn: no acabará de ir fino en PC, independientemente de la configuración que tengas.
Esto me lleva a puntuar The Last of US Parte I en su versión para PC a la baja, ya que la experiencia de juego se ve claramente afectada por los problemas que arrastra. Seguro que con parches, se acabarán solucionando algunas cosas, pero hay que darle tiempo al equipo que hay detrás para que pueda realizar los arreglos necesarios.
¿Recomendaría TLOU Parte I para PC? Pues sí y no. Sí porque es un título que se ha de jugar sí o sí, pero no en el estado en el que se encuentra en estos momentos. Así que tocará ir probando todas las actualizaciones que vayan apareciendo y tendremos que armarnos de mucha paciencia. Esperemos que la espera valga la pena.
