Este análisis ha sido realizado gracias a una copia facilitada por Raw Fury, título cuya salida esta prevista para PC (versión analizada), y más adelane en Playstation 4, Xbox One y Nintendo Switch.

Los juegos de rol por turnos siempre despiertan la curiosidad de muchos jugadores y jugadoras, desde aquellos Final Fantasy de la NES hasta los Persona, pasando por miles de título de alto calibre. Hoy os traemos un duro competidor mediante el análisis de Star Renegades, juego de rol táctico por tunos con mundos generados proceduralmente.

El estudio Massive Damage Games, desarrolladores de Halcyon 6: Starbase Commander, han invertido dedicación y esfuerzo en traer un juego que proporciona horas y horas de entretenimiento, pero a su vez resulta ser de una dificultad muy elevada, pues un pequeño fallo puede costarte la partida, y no, no es que termine por completo y se borre, pero vuelves a empezar en una vorágine de dimensiones paralelas.

Pero mejor os lo explico detalladamente que hay mucho que contar y universos que salvar, que no es poca cosa y seguramente sacie vuestras ansias de conocimiento sobre esta nueva oferta de rol por turnos, ¡Calentando motores, que despegamos!

La rebelión ha comenzado: La historia y lo procedural

No hay que romperse la cabeza con la historia, al comienzo vemos cómo se estrella una nave de cuyo interior aparece Wynn Syphex, guerrera enfundada en un exoesqueleto, que será la primera de los personajes que controlamos en esta epopeya, con la cual iremos avanzando en solitario por uno de los primeros escenarios que funciona a modo de tutorial y nos explica los conceptos básicos e importantes del combate, al final del mismo presenciaremos como el Imperium (los malos de turno en forma de ejercito parecido al lado oscuro de Star Wars, es decir al Imperio…) rapta a nuestro hermano, sumando a la misión una buena parte de vendetta.

Terminado este momento dramático se nos explica la trama principal, en donde este eje del mal avanza universo por universo conquistando todo a su paso y es nuestro deber pararle los pies a través de la lucha encarnizada contra sus comandantes jefes, enemigos desafiantes y que nos obligan a estudiar bien nuestras posibilidades, pues son en su mayoría quienes nos echarán al inicio de la partida.

Toda esta información nos llega a través de un simpático droide volador que guiará a nuestro grupo por cada zona de juego, y saltará hacia la siguiente realidad en caso de perecer en nuestro cometido.

Cuando digo esto, lo digo de forma literal, pues cada vez que muera nuestro grupo entero, dicho universo será conquistado y pasaremos al siguiente con intención de salvarlo, pero todo nuestro equipamiento y niveles se reiniciarán, sí que permanecerán diferentes adquisiciones que realicemos en la base, ya sean nuevos rebeldes, tecnologías o bonificaciones iniciales de grupo, además de darnos la posibilidad de desbloquear los arquetipos de cada personaje que cambian el color de sus ropajes o armaduras dependiendo de nuestra elección.

Cada planeta que visitemos, en cada realidad, será diferente al anterior pues se generan de forma procedural, al igual que los comandantes asignados a cada planeta, algunos permanecen intactos e incluso aumentan de poder al fulminarte, ascendiendo de puestos hasta llegar a uno de importancia vital para ellos, pues cada comentario (con bastante toque de humor) denota el fanatismo que estos seguidores profesan por el Imperium y por la llamada “MADRE”.

Y pego un tiro porque me toca: Combates y jugabilidad

¿Por qué nombro directamente los combates? Porque son el eje clave de la jugabilidad de Star Renegades, siendo determinista en su inicio, pues conocemos las acciones de los enemigos antes de que las lleven a cabo, lo cual permite aplicarles defensa, crítico, vacilación o interrupción.

Cada una de las acciones aparecen en el cronograma de la interfaz de combate en función del momento en que se vayan a realizar en el asalto, excepto salvedades como las acciones instantáneas, que ocurren de inmediato, cada asalto tiene una duración de 60 segundos.

Y es que este aprendizaje inicial es fundamental, pues nos permite hacer combinaciones devastadoras si uno de nuestros personajes interrumpe la acción del rival, le lloverán críticos por parte del resto de miembros del grupo, saber defenderse de forma correcta en el asalto pertinente o aplicar desplazamiento al enemigo para que pase su acción al turno siguiente y regenerar escudos como locos, toda habilidad y todo personaje tienen una función concreta y la combinación de estos puede llegar a determinar el desarrollo de cada partida.

Nos manejamos con diferentes barras de estado, entre las cuales nos encontramos con los escudos, la vida y el blindaje, los primeros se regeneran al finalizar el combate, pero el resto debemos regenerarlos en el campamento o con cajas repartidas por los mundos.

Los críticos se producen cuando una unidad (amiga o enemiga) recibe un ataque antes de llevar a cabo su acción, cada ataque consta de una bonificación a crítico que se aplica al realizar uno, pueden hacer daño adicional, interrumpir ataques, atravesar escudos o blindajes o dañarlos.

Es importante estudiar y observar la barra de tiempo, ya que cada ataque conlleva un tiempo determinado de preparación y debemos estar atentos a si ocurre antes o después de la acción del contrincante, aún así, es posible jugar con las habilidades de los compañeros y compañeras capaces de retrasar el movimiento del enemigo provocando vacilación antes de que realices tu ataque, salvándote así de recibir un crítico y pudiendo aplicarlo tú, este dato de vacilación medido en segundos aparece en verde al lado del icono de tiempo.

Se pueden encadenar varias vacilaciones a un enemigo hasta llevarlo al siguiente asalto, pero tienen un límite de vacilaciones (si son dos, pues solo se pueden aplicar dos ataques de vacilación) una vez que el dato que aparezca sea 0 ya será inamovible y realizará la acción previamente establecida.

Otro concepto importante es el tipo de daño esencial, que consta de ataques ligeros, pesados, en área, ráfaga, de combo, etc., y nuestros adversarios pueden tener debilidad a alguno de ellos lo que provoca daño y retraso adicional, pero también pueden tener resistencia o inmunidad a dicho tipo de daño. Podemos inspeccionar a nuestros enemigos para saber cuales son sus debilidades y fortalezas y de esta forma trazar una estrategia óptima.

El daño elemental es capaz de atravesar el blindaje, ultimo bastión antes de verse afectada la barra de vida, lo que provoca incidir directamente en la vitalidad del enemigo. Cuando vayamos a realizar un ataque letal, aparecerá un indicador, pero tanto la predicción de daño que realicemos o este ataque fulminante pueden variar dependiendo de factores como la curación o la defensa de compañeros enemigos, entre otras.

La barra de furia nos permite realizar combos devastadores de dos personajes o habilidades especiales, dicha barra aumenta con los críticos y las interrupciones, pero solo es posible realizar combos entre compañeros y compañeras con buena relación, la cual se mejora en los campamentos.

Nos ofrecen la opción de posicionar a nuestros miembros del escuadrón en diferentes cuadrantes dentro de la vanguardia o la retaguardia, dependiendo de quien queramos que reciba los primeros envites y quien queda menos expuesto, los enemigos también tienen esta capacidad y para llegar a los más rezagados debemos pasar por encima de los primeros, salvo si utilizamos ataques que ignoran esta distribución y nos permiten atacar de forma directa al contrincante diana que queramos.

Todo esto se aprende con la práctica y con el aumento de conocimiento sobre los personajes, la curva de dificultad es elevada, puede llevarnos un tiempo adaptarnos a cada rebelde, y sobre todo, en cómo combina con el resto del equipo, un dato que me ha resultado la mar de interesante porque el desarrollo de cada partida ha sido determinada dependiendo de a qué personajes seleccionaba en mi equipo, y eso, da que pensar y mucho, por lo que suma interés al título.

Se trata de un juego exigente que te obliga a estudiar tus posibilidades para no tener que volver al principio y pincha al jugador o jugadora para continuar, pues se ha perdido una realidad entera y no podemos permitir que le ocurra a la siguiente, por lo que debemos perfilar nuestra pericia si queremos que eso no ocurra.

Acometidas planetarias: Exploración, campamentos y sistema de "Némesis"

Cada planeta está representado por un mapa único distribuido en forma de mazmorra, desde el principio seremos capaces de ver su disposición y nos brinda la oportunidad de estudiar las posibles vías hasta el cristal central si queremos llamar al Behemoth (líderes supremos de cada planeta y muy poderosos) antes de tiempo y cuya derrota supone la liberación del planeta. Tenemos tres días con 3 núcleos de energía para avanzar de sección a sección del mapa, y debemos elegir sabiamente y acorde a nuestros intereses (si queremos llegar a cofres de vida, o de equipo, si nos interesa eliminar a algún comandante o no, entre otras opciones) debido a que cada paso de una sección a otra consume un núcleo, y al terminar los tres que portamos, debemos pasar la noche en el campamento para recuperar energías hasta el día siguiente.

El sistema de campamentos resulta interesante pero podría haberse explotado de mejor manera, los personajes solo se relacionan a través de cartas únicas de cada rebelde que dotan de beneficios o daños extras al resto de acompañantes de forma individual o grupal, tenemos un número finito de acciones disponibles, y al aplicar dichas cartas aumenta la relación entre los personajes, pudiendo entablar relaciones de compañerismo, amistad cercana o incluso de carácter sentimental, lo cual puede generar hijos que se traducen en nuevos rebeldes para la misión.

En algunos de los planetas podemos encontrarnos con minimazmorras que no están sujetas al uso de los puntos de exploración, por lo que avanzaremos hasta el final donde normalmente hay un enemigo poderoso y una recompensa, sin gastar ni uno de ellos. Habrá momentos de conversación entre personajes o de comentarios sueltos cuando encontramos el símbolo de interrogación en el mapeado, con diálogos cargados de humor y haciendo uso de lenguaje cercano y conocido, en perfecto castellano.

Han incluido sistema de niveles como buen representante del género, iremos adquiriendo "ADN" al matar enemigos, o nos lo encontraremos a lo largo de los mundos, es nuestra la elección de qué manera distribuir estos puntos de experiencia para subir de nivel a cada personaje, pues no aumentan al unísono, este punto determina las habilidades especiales que adquiere cada integrante del grupo, y al igual que el equipo, perdemos todos los niveles al ser derrotados por completo.

La jerarquía de enemigos únicos y jefes evoluciona al igual que evoluciona tu grupo de rebeldes, mientras más horas juegas, más equipo descubres y más armas, estos también aumentarán su poder, en tus manos esta el camino hacia la victoria, esto es parecido al sistema que vimos en La Tierra Media: Sombras de Mordor, este sistema de “Némesis” hará que los enemigos aumenten su rango y por consiguiente, su poder.

Encontramos equipamiento en cofres, o los podemos comprar a mercaderes que nos venden accesorios, armas o chips tecnológicos, incluso algunas investigaciones de la base aumentan los beneficios iniciales, el equipamiento y armas se distribuye por rangos y rareza, pero, de nuevo, aviso para navegantes, todo esto se pierde al morir todo el escuadrón.

El Pixel Art y su magia: Gráficos, sonido y ambientación

Se agradecen títulos de rol por turnos de ciencia ficción, ya que son un acierto entre la gran mayoría de corte medieval y fantasía, no disgustan ni mucho menos, pero este tipo de ambientación supone un soplo de aire fresco y reconfortante, los gráficos Pixel Art le sientan de maravilla al título, que muestra una fluidez y dinamismo en los combates con ningún bug a sus espaldas o impedimento en su jugabilidad, sumando unos efectos de alta calidad que aumentan la espectacularidad de este título.

Los mundos y escenarios son muy coloristas, transportando al jugador a entornos que no tienen nada que ver con el planeta tierra, con colores vivos y de acertada combinación incrementan la inmersión en terrenos desconocidos y mazmorras a descubrir. Estamos ante un excelente acabado artístico que llama la atención desde el principio y mantiene su nivel a lo largo de toda la historia.

En el apartado sonoro destaca su calidad y su acierto, aunque alguna que otra música peca de repetitiva y fácilmente reconoceremos las melodías en cuanto comienzan. Los personajes, tanto los componentes del escuadrón como los NPC carecen de voz, toda comunicación se realiza a través de textos, punto que no es relevante para su desarrollo y no se echa en falta.

Final de la cruzada: Conclusiones finales

No os vamos a mentir, hemos disfrutado mucho las horas invertidas en este videojuego, se respira vieja escuela en los combates por turnos, con altos niveles de dinamismo y acción fluida si tenemos claras nuestras decisiones, recordando a Battle Chasers: Nightwar en diversión y puro rol. Se echa en falta la inclusión de entornos más abiertos y de diferentes mapeados dentro de cada planeta en una misma partida, pues habrían sumado un mayor nivel de exploración que tanto gusta en el género.

La generación procedural se queda algo pobre con el paso del tiempo, es positiva la sensación en su ejecución, pero los planetas acaban siendo parecidos en cada partida y se va notando a la larga, al igual que los enemigos de la pestaña Imperium, aunque venzamos a uno determinado, puede aparecer otro exactamente igual la siguiente vez, imaginamos que pueden pulir esta parte de cara al futuro con nuevos parches y con la salida del título en consolas este otoño.

Pero hay pocas fisuras en este título, si bien es cierto que su dificultad puede llegar a abrumar a más de una persona que busca una experiencia más light, pero sabe recompensar el esfuerzo del jugador a través de las habilidades en el manejor de los personajes, y la sensación de avance se magnifica con la derrota de cada Behemoth, aportando mucha satisfacción y motivación para continuar.

Demuestra altas cotas de humor en los comentarios y conversaciones, lo cual se agradece en un mundo de tanta incertidumbre y se agradece que en ocasiones el juego se ría de sí mismo, pues te da la impresión que tu grupo de rebeldes es la última esperanza del universo, y lo mejor de todo, es que es así, con cada muerte permanente volvemos a la base, pero iremos aprendiendo patrones de los enemigos y movimientos que nos harán plantearnos de nuevo la estrategia a seguir.

En definitiva se trata de un juego muy interesante si eres de las personas que buscan juegos de rol tácticos, con el clásico sistema de turnos pero reinventado para mayor dinamismo y aumento del nivel de estrategia, mientras luchamos por la libertad en un mundo de ciencia ficción bajo la amenaza de una facción llena de tirania y fanatismo, los combates son espectaculares y saben enganchar de principio a fin.

Sale a la venta hoy 8 de septiembre en PC a un coste de 24,99€ en la plataforma Steam, pero se ha confirmado su salida en consolas en otoño, por ese precio, y si te ha gustado el análisis, no dudes en adquirirlo, te dará muchas horas de diversión.