riveUn buscador de tesoros solo en el espacio y con poco combustible. Jamás pensé que un tema tan utilizado diera lugar a nuevas historias... pero no, aún así, este juego me ha sorprendido. La historia no da para una novela, pero desde luego que no es el objetivo de Two Tribes, el estudio encargado de traer el título a nuestras PS4.

¿Qué es lo que pretenden con este juego? ¿Divertir? Pues de forma más que brillante lo han conseguido. Acompáñanos en este análisis y te contamos cómo lo han hecho.

Entramos donde no nos llaman

En el comienzo del juego, nuestro personaje principal Roughshot entra en una nave espacial que aparentemente está abandonada para tomar prestadas algunas cosas con la firme intención de no devolverlas, pues parece que esa es su forma de ganarse la vida. Pero en ese momento se encontrará con un robot con inteligencia artificial que le pondrá a prueba durante 12 niveles para su propia diversión.

Y ya. En ese momento empieza todo. Justo después estaremos envueltos en luchas, balas, misiles, robots con inteligencia artificial que querrán destruirnos y sistemas que deberemos piratear para conseguir nuestros objetivos, que pasarán desde controlar un tren a conseguir achicar agua de una sala.

La mecánica del juego es simple, es una mezcla perfecta entre un juego de plataformas y un juego de naves espaciales de toda la vida, de esos en los que disparabas para todos lados en las recreativas. Antes de entrar en detalles, os dejamos un gameplay de las dos primeras misiones que os hemos preparado para que veáis las mecánicas del juego.

En ciertos momentos soltarás alguna que otra carcajada con los diálogos entre nuestro personaje y el robot que intenta hacerle la vida imposible. Él intentará escapar y el robot no se lo permitirá, creando situaciones de lo más ridículas y entretenidas. El juego está claramente construido en clave de humor, haciendo referencia a multitud de tópicos sobre los videojuegos y brindando pequeños guiños a grandes clásicos del mundo del videojuego.

Una jugabilidad muy lograda

En este juego nada está puesto al azar. En el momento en el que tomas el control de la pequeña nave espacial con forma de araña donde llevamos a nuestro personaje, te das cuenta de que los controles son cómodos. Eso sí, tienes que darte un tiempo para acostumbrarte a ellos, pues al principio no los verás muy precisos, pero cuando te hagas a ellos...que tiemblen todos los robots de esa dichosa nave. Te sorprenderás de la precisión que tendrás sobre la nave y del mimo con el que han hecho los controles.

Me ha sorprendido muy gratamente que este juego no sea muy repetitivo. Es lo que esperas, no puede dar mucho de sí un juego de disparos en 360º, pero el estudio ha sido capaz de aprovechar de una forma muy brillante todas las herramientas que tenían a su disposición para hacer de cada nivel un juego único. No se repiten las mismas mecánicas en ninguno de sus 12 niveles.

En cuanto a los enemigos, no podemos decir lo mismo. Tiene muy poca variedad. Los jefes finales son impresionantes... pero hay muy pocos. Podrían haber incluido muchísimos más, y el juego ganaría puntos, pues son bastante impresionantes.

Apartado técnico

Los gráficos no son nada del otro mundo, está claro. Es más, podría ser perfectamente un juego de un smartphone o una tablet de hoy en día. Pero te puedo asegurar que no importa, no es algo que le vayas a exigir al juego en ningún momento. No hay escenas cinematográficas ni nada por el estilo, solo diálogo, y no demasiado. Al menos, el juego se mueve fluido, sin cosas raras ni tirones, ni siquiera cuando hay cientos de robots volando alrededor tuya intentando destruirte, lanzándote misiles o inmolándose contra ti. En este sentido, el juego cumple con lo que podríamos esperar de él.

rive_20161010110804

La banda sonora me ha gustado bastante, pero no es algo en lo que te centres demasiado mientras estás jugando, la verdad. Pero quizá eso sea bueno en este tipo de juegos, pues es que está haciendo que te metas en el papel, proporciona la tensión y locura necesaria para que te introduzcas de lleno en el juego.

Me recuerda bastante a esos audios de los juegos antiguos, pero en este caso no son tan repetitivos y estridentes. El sonido se adapta a la acción de cada momento a la perfección.

Mejoras de la nave y sistemas pirateados

Este aspecto me ha llamado verdaderamente la atención, y es que seremos capaces de piratear ordenadores con el fin de abrir compuertas, drenar agua, detener el flujo de lava, desactivar sistemas de seguridad o incluso "poseer" enemigos con el fin de que se pongan de nuestro bando. Esto último lo iremos desbloqueando conforme avanzamos en la campaña principal.

Además, la nave podrá equiparse con armas secundarias como misiles, escopetas y descargas eléctricas, sin contar con la mejora de la coraza para aumentar la vida de la nave que llevamos o con el aumento del radio de acción para recoger objetos. Esto lo haremos con un intercambio de chapas que irán soltando los enemigos cuando los eliminemos y que tendremos que recoger del suelo.

Difícil, bastante difícil

De verdad...ha habido varias partes que me han costado sudor y lágrimas. El propio juego te va avisando nada más comenzar, pues el único modo de dificultad disponible que hay es el difícil. Si en algún momento te ves muy apurado y mueres muchas veces seguidas, el juego te propondrá automáticamente activar el modo fácil para esa parte, pero no parece ser muy necesario. Podrás superarlas después de varios intentos y algo de paciencia.

Y es que hay partes en las que el juego es una verdadera locura, tendrás que saltar por el sitio exacto mientras disparas para otro lado y tendrás que estar pendiente tanto de los enemigos como del escenario, pues también querrá matarte.

Una de las cosas que más me ha gustado es que, siendo conscientes de su dificultad, los desarrolladores han decidido incorporar numerosos puntos de control, por lo que cada pequeño avance será guardado y, si te aniquilan, volverás a empezar prácticamente desde donde moriste. Este es el aspecto que hace que sea difícil pero justo, algo equilibrado y que no sea frustrante para el jugador.

rive_20161010103802

 

Se hace corto y falta un buen multijugador

Quizá ese sea su mayor defecto, el juego se hace muy corto. La duración de la campaña principal rondará las 5 horas (y tirando a lo alto), y te deja con ganas de más. Cuando llegas al final del juego se desbloquean dos modos de juego nuevos: un modo contrarreloj y un modo en el que solo tendrás una vida, pero no aportan un gran motivo para volver a jugar el título. Quizá te invite a repetir aquellas partes que más te gustaron, pues se puede elegir por separado a qué misión quieres jugar, pero no jugar el juego de nuevo.

rive_20161010103431

Quizá este juego sería muchísimo más divertido si hubiera contado con algún modo multijugador. Eso le habría dado algún punto más para ser un imprescindible, pues sería un juego perfecto para pasarte con algún amigo en una tarde que no tengas nada que hacer. Además, el juego, cuando lo probéis, estaréis de acuerdo conmigo: en algunos momentos parece que está preparado para jugarlo con alguien.

Conclusión

El juego es muy divertido, entretenido y te hace pasar un buen rato. El problema es ese, te lo pasas en un rato. No obstante,  premiamos la originalidad y las ganas de hacer bien las cosas, y este juego cumple perfectamente lo que promete y supera tus expectativas de lo que te vas a encontrar.

Este es el último título de la compañía Two Tribes antes de su cierre, por no ser capaces de adaptarse a los grandes cambios que el mercado de los videojuegos ha sufrido en la última década (según sus propias palabras). Bajo ese contexto, nos ha parecido un detalle bastante bonito despedirse con un título especial y con buen humor de todos los que nos gustan los videojuegos, un regalo para nosotros en el que queda impregnada su firma y su esencia.

¿Qué te parece? ¿Lo vas a probar?

rive_20161010104040