Este análisis ha sido realizado gracias a una copia digital facilitada por THQ Nordic, título disponible a partir del 15 de marzo en PlayStation 5, Xbox Series X|S, y PC (versión analizada).

Volvemos al mundo de Adelpha para adentrarnos en una historia de ciencia ficción que se siente como los clásicos de antaño del género, en el análisis de Outcast - A new beginning os contaré todos los entresijos que esconde su planeta, sin desvelar el contenido de sus historias, que no son pocas.

Para quien no lo recuerde, Outcast es todo un clásico dentro de los videojuegos de mundo abierto en tercera persona, allá por 1999 deslumbró por mostrarnos una buena construcción de mundo, una cultura alienígena interesante, que puso énfasis en las relaciones existentes entre los habitantes de los diferentes poblados.

El equipo creativo del original ha vuelto para moldear de nuevo este mundo, y todo lo que ello implica, por lo que se nota el cariño puesto en esta nueva entrega, la gente de Appeal Studios quiere darnos su homenaje a la primera parte dotando a la secuela de varios puntos interesantes a tener en cuenta.

No pueden faltar a la cita las habilidades futuristas, como nuestra mochila propulsora, un escudo de energía, así como armas modificables que amplían las posibilidades dentro de su gunplay, todo ello dentro de un planeta bello, que cuenta con su propia fauna y flora.

Pueblos con historia

En esta nueva entrega de la saga volvemos a ponernos en la piel de Cutter Slade, un humano que despierta en una tierra desconocida, pero que no recuerda nada de su pasado, por lo que la historia principal toma una doble vía, la de descubrir el mundo que nos rodea, y recuperar nuestros recuerdos para poder volver a donde pertenecemos.

Se trata de una continuación directa de la primera entrega, la cual tuvo un remake bajo el nombre de Outcast - Second Contact por si queréis saber sobre su historia de forma más reciente, con diferentes guiños a la misma en algunos aspectos. Al despertar pronto descubriremos a la primera habitante Talan, la raza que ocupa este mundo, y se nos mostrarán mensajes de los Yods, los dioses de esta cultura.

Podemos elegir nuestras preguntas y cuestiones, pero no las respuestas

Estas supuestas deidades nos piden que salvemos a su pueblo de la extinción, y debemos demostrar que somos el verdadero Ulukaï para ello, una especie de mesías que luchará contra los invasores, y salvará a toda la raza de la extinción. Pero estos invasores no son otros que los mismos humanos, que han llegado a Adelpha para extraer todos los recursos posibles, y someter a la población.

Nuestro protagonista se encuentra en una encrucijada, pero pronto elegirá bando, y trataremos de salvar a los Talan completando diferentes misiones a lo largo y ancho del mapa. En cada poblado podemos descubrir varias peticiones de sus habitantes para ganarnos su favor, en pro de cumplir la historia principal, que es la preservación de la especie, pero hay otra vía posible, el contraataque.

Podemos elegir en qué orden completar las diferentes misiones, porque opera bajo un prisma no lineal, aunque algunas son más apremiantes que otras, y podemos jugar con esa dualidad presente, si queremos completar el juego desde vías de paz y diplomacia, o con auténtica destrucción. Pero, para ello, los combates serán inevitables, tanto contra robots, como contra las criaturas que se encuentran en el planeta.

La variedad de paisajes es otro de los puntos a tener en cuenta

El mundo de Adelpha

Uno de los puntos que más me ha sorprendido de esta propuesta es su solida construcción de mundo, visitaremos diferentes poblados, así como parajes variopintos, aunque predomina el color verde y la vegetación frondosa.

En cada población encontraremos modos de vida diferentes pero conectados entre sí, ya que cada emplazamiento cuenta con una característica determinada, uno es un poblado de pescadores, otra de recolectores, los hay más combativos, u otros que se dedican al estudio, y la ética.

La naturalidad con la que los habitantes se relacionan con nuestro protagonista esta realmente conseguida y es coherente con el mundo que plantea, ya que nosotros somos los visitantes, debemos aprender de la cultura que vive y palpita en Adelpha, puesto que los invasores se aprovechan de su tecnología y su fuerza de ataque para intentar dominar a todos los pueblos.

Deslizarse, planear, o teletransportarse, todo vale para explorar Adelpha

Además de esto, podemos preguntar a cada personaje su opinión sobre los demás, lo cual suma mayor interés a cómo esta construida la sociedad del planeta, e irá añadiendo datos a nuestro glosario. No desesperes si al principio no te quedas con los nombres de los personajes, los animales y criaturas, o los emplazamientos, el glosario será nuestro gran aliado que podemos activar en tiempo real en las conversaciones si aparecen nombres resaltados y a otro color.

Para movernos por el mundo podemos usar nuestra mochila propulsora, planear, desplazarnos a lomos de algunos animales, y teletransportarnos a través de los Daokas, portales de viaje instantáneo que conectan todo el mundo, pero que debemos activar con antelación para poder utilizarlos. Repartidos por el mundo hay diferentes iconos en el mapa, que representan diferentes desafíos que nos aportan unos beneficios determinados, como gemas azules, o núcleos de tecnología, que usaremos para adquirir mejoras en los árboles de habilidades.

Ya sean pruebas contrarreloj, templos escondidos, plantas que contienen gork, un recurso muy valioso, o bases militares de los invasores, podemos tirarnos un buen puñado de horas limpiando cada zona del mapa, aunque, como suele pasar en el género, cae en la repetición, porque estaremos realizando las mismas mecánicas una y otra vez.

Los Talan se dividen en varios poblados, ¿Lograremos unirlos?

Aún así el juego nos da la suficiente libertad como para visitar todo el mapa desde el principio, y eso nos da la opción de transitar por el terreno a nuestro gusto, y más de una vez nos quedaremos embelesados de su belleza, y buscaremos algún que otro secreto presente en su mundo.

Un tipo corriente, pero habilidoso

Lo que más me gusta del protagonista, además de su sentido del humor en varias ocasiones, es la sinceridad y naturalidad con la que se desenvuelve en este nuevo planeta, puede parecer un héroe, pero se trata de un tipo corriente que tiene que hacer frente a las adversidades que le planea este nuevo planeta, y eso subraya el buen hacer de la compañía.

Para hacer frente a los combates disponemos solamente de dos armas, pero que el número no os engañe, a cada una de ellas podemos añadirle módulos que cambian completamente la forma de disparar, o de crear estrategias en combate, ya que hay alrededor de 30 módulos disponibles para crear armas variadas, a cada cual más curiosa que la anterior.

Las mecánicas de disparo son divertidas y variadas gracias a los módulos

Podemos realizar combinaciones increíbles, como disponer de un modo de disparo triple, acoplar el módulo de proyectiles guiados, y que los disparos sean minas que se pegan al enemigo, y ya tenemos un arma completamente diferente a la planteada en su inicio, y así con varias combinaciones de módulos.

Debemos medir la munición, los cristales verdes para la pistola, y los rojos para el rifle, que son los que activan estos módulos, y al agotarse, la cadencia de disparo será mucho menor, y el arma perderá sus habilidades. No podemos hacer uso de coberturas de forma automática, es decir, podemos agacharnos para cubrirnos pero el personaje no lo detecta como una cobertura, porque al disparar permanece de pie, y eso habría sido de agradecer.

Para defendernos disponemos de un escudo de energía, que se puede mejorar para realizar ataques cuerpo a cuerpo más poderosos, o devolver proyectiles enemigos, además, podemos realizar esquivas con la propulsión, o embestidas si tenemos la habilidad adecuada, todo ello hace que sea más divertido combatir, y que no se base solo en disparar a todo lo que se mueve.

La personalización de las armas se modifica a nivel visual dependiendo del módulo equipado

Aunque a los combates le faltan algo de gancho, al avanzar en el árbol de habilidades de combate se nos abren mayor cantidad de opciones para superar los diferentes retos, entre los que nos encontramos a robots que atacan a distancia, o cuerpo a cuerpo, drones, y la fauna salvaje de Adelpha, como pájaros que caen en picado hacia nosotros, una especie de perros rabiosos, o gusanos gigantes, entre otras lindeces del planeta.

Si nos ganamos el favor de un pueblo de los Talan, nos aportarán habilidades especiales que resultan muy útiles en combate, como congelar a los enemigos durante unos segundos, o invocar a ciertas criaturas para que nos ayuden, y no contaré más sobre ello porque siempre viene bien que sean una sorpresa para el jugador o jugadora.

La belleza visual

Outcast - A new beginning apuesta mucho en la parte visual, veremos grandes extensiones de campos verdes, vegetación que se mece con el viento, partes desérticas, montañas elevadas, y la sensación de estar rodeados de vida constantemente, es todo un acierto cuando pretenden mostrar un mundo de ciencia ficción vibrante, y que atrape al jugador o jugadora.

El nivel de detalle de escenarios y personajes es muy elevado, así como de la fauna local

En ocasiones me he sentido como en la película de Avatar, pero con su propia personalidad, siempre dando buenos resultados a nivel de texturas, y una distancia de dibujado que quita el hipo, y solo he encontrado pequeños momentos de bajada de frames por segundo en escenas donde había mayor carga de trabajo, y una gran cantidad de enemigos en pantalla.

La iluminación, el nivel de partículas, así como el diseño de los personajes están muy cuidados, aunque he notado que se repetían varios modelos de los Talan a lo largo de todo el mapeado. Además, la IA no funciona del todo correcto en según qué situaciones, sobre todo cuando nos posamos en un sitio elevado, algunos enemigos se bloquean y no saben qué hacer. Varios de estos errores se pretenden solucionar con el parche de día uno, pero hay algunas cuestiones que aún deben pulirse en futuras actualizaciones.

A nivel sonoro es todo un despliegue auditivo, gracias al regreso del compositor de la primera entrega Lennie Moore, con piezas musicales de alta calidad que saben acompañar perfectamente en los momentos de exploración, y de acción. Como punto fuerte, cuenta con traducción y doblaje al castellano, así que disfrutaremos de un gran trabajo de voces en nuestro idioma, un hecho a aplaudir dada la envergadura de las producciones de este tipo, y de mundos tan grandes.

Los interiores también están bien cuidados, se nota el cariño puesto en su creación

A nivel de accesibilidad faltan varias cuestiones importantes, como la opción de alto contraste, de notificaciones visuales o auditivas, el modo copiloto, así como varias básicas como la modificación del tamaño de los textos, cambio del tamaño del HUD, pero si hay filtros de color, o la posibilidad de cambiar la sensibilidad de la cámara.

Conclusiones

Estamos ante un gran juego de ciencia ficción y mundo abierto, aunque el mapa general no es extremadamente grande, cosa que se agradece, porque busca concentrar mayor calidad, tanto en el diseño de las misiones, como en la creación de un mundo alienígena, rico en cultura, y valioso en cuanto a las conversaciones que podemos tener con los lugareños y las lugareñas.

Lo definiría como un mundo abierto arcade, que mantiene parte de la jugabilidad de aquellos juegos de los 90 del género de acción en tercera persona, pero incorpora una buena cantidad de añadidos que nos mantiene pegados a los mandos para seguir descubriendo parajes, librando batallas llenas de láseres, y que nos invita a parar para conocer a cada Talan que nos topamos en el camino.

¿Creíais que no había bosses? Pues los hay, de nada

Quizás no es un juego para todo el mundo, pero es un juego que debería conocer todo el mundo, ya que enseña muchos valores sobre el cuidado de la naturaleza, la empatía hacia el grupo de iguales, hacia los y las demás, y el sentimiento de comunidad, donde la unión hace la fuerza. Si os gusta la ciencia ficción, los héroes cotidianos, y explorar un mundo bello y bien construido, dadle una buena oportunidad a Outcast - A new beginning.

Reseña
Nota final
8.5
Artículo anteriorDos clásicos que vuelven con "fuerza": Ya a la venta STAR WARS: Battlefront Classic Collection
Artículo siguientePS5 recibe una nueva actualización del sistema: Mejoras de sonido, compartir pantalla...
analisis-outcast-a-new-beginning-toda-una-carta-de-amor-a-la-ciencia-ficcionLa ciencia ficción nunca pasa de moda, y Outcast - A new beginning sabe dar su propio toque personal al género, mostrando un mundo rico en contenido, en belleza, y con un buen puñado de misiones por hacer con una orientación más arcade. Algunos fallos en la IA pueden empañar la experiencia de juego, así como varios elementos genéricos y repetitivos dentro del mapeado, pero su carga de acción y exploración te tendrán varias horas pegados a los mandos.