A la hora de plantear este artículo me surgió la duda de titularlo algo como “la vejez en los videojuegos” para hablar sobre las voces de la experiencia a través de algunos títulos o simplemente incluir el papel de las personas mayores en los videojuegos y lo que nos enseñan o como se diferencian de los héroes o heroínas clásicos que normalmente empiezan siendo inexpertos para convertiste en mejores combatientes o más capaces.

Pero me daba cuenta que dejaba de lado a otras mentes que aún sin ser personas mayores o “personajes mayores” si que cuentan con unas características determinadas que los hacen más sabios y expertos, aunque guardan interrelación con edades más distantes y diferenciadas con respecto a personajes jóvenes.

Simplemente quería reflexionar en alto sobre el papel secundario o quizás protagonista que cobran estas figuras y qué podemos aprender de ellos y ellas para plantear juegos más maduros y más avanzados a nivel de razonamiento desde un inicio. Así que, mentes expertas dentro de los videojuegos me parecía más correcto y aún así engloba demasiado, pero ya está bajo vuestra responsabilidad seguir leyendo las divagaciones que salgan de mi teclado.

Dos variantes de la experiencia

Aquí es importante ver dos aspectos, aquellos personajes que ya hemos conocido directamente como personas adultas y más experimentadas, y otros que, a lo largo del mismo juego, o quizás a lo largo de varios títulos, han crecido a nivel emocional y a nivel de experiencia.

Me viene a la mente en el primer caso a Auron de Final Fantasy X, que debía guiar a un Tidus joven e inexperto que conocía más la fama y el deporte del Blitzball, este personaje comprendía muchas cuestiones que el resto de personajes no, me explico, ante situaciones de peligro o ante la impulsividad de personakes como Wakka, Auron siempre ponía el punto de prudencia o de cautela, pues conocía muchas más situaciones y tenía muchos más combates a sus espaldas, convirtiéndole en un personaje más rico en contenido.

Y es que la relación que se guarda entre las situaciones vividas y las situaciones novedosas, crean un debate interno sobre cómo debemos reaccionar ante acontecimientos que se nos presentan. Esta premisa dentro de los videojuegos tiene lugar solo en contadas ocasiones que nos ha dado la capacidad de elegir, ¿Debo huir del combate? ¿Enfrentarlo? ¿Uso el sigilo? Como desconocemos la experiencia de vida que han tenido los personajes “más mayores”, transmiten su opinión en aras de que aprendas de su voz o decidas tomar tu propio camino, pero ellos en su mente ya han tomado una decisión al respecto, pero la elección es tuya.

Personajes como Sully de la saga Uncharted, directamente son mentores de aquellos que podemos manejar, aunque su vertiente sea más juerguista, no quita que en cualquier momento suelta una frase trascendental e interesante a Nathan para que aprenda a ver sus propios errores o determine una forma de tomar una decisión concreta, pues no hay que olvidar que detrás de toda esa faceta dicharachera se esconde un personaje que ha vivido mil situaciones y se ha encontrado en momentos muy parecidos a los que se ha encontrado nuestro protagonista.

Todas estas historias nos hacen ver la forma en la que los videojuegos nos enseñan con ciertas técnicas pedagógicas y que no está de más escuchar varios de sus consejos y cuestiones, pues encierran más conocimientos de lo que podemos pensar, que pueden llegar a condicionar nuestra forma de vivir ciertas situaciones del día a día y actuar en consecuencia. Pero ¿Es posible educar a través de los videojuegos? Hay debate sobre el sí y sobre el no, que trataremos en otra ocasión.

La vivencia de las historias

El estado madurativo de un personaje se conoce en mayor o menor medida en tanto nos han enseñado las desarrolladoras sobre su historia, entenderemos mejor a Kratos, Marcus Fénix si hemos seguido su trayectoria y cuando llegamos al punto de ver sus barbas con ciertas canas, entendemos el por qué y, sobre todo, el significado de su mirada, al igual que ocurre con Lara a lo largo de toda la saga Tomb Raider. Con esto último me refiero a los hechos que han experimentado y a los escenarios que han vivido, hemos sido partícipes de ellos y hemos estado a “su lado” en la medida que hemos tomado los mandos para que avancen en sus respectivas historias.

Dentro del mismo juego puede darse esta situación, Aloy no sale igual en Horizon Zero Dawn de como ha entrado, las personas que conoce, los consejos que recibe, lo que aprende y vive, hacen que ella crezca de alguan forma y muestre otras formas de pensar y otras perspectivas más maduras y nuevas. Lo mismo se puede apreciar en Arthur Morgan cuando se pasea por el lejano oeste y conoce a muchas personas con sus propias historias personales y sus propios sueños e inquietudes, aprende al escuchar y al entender tantas historias diferentes.

Toda esta sabiduría y experiencia se llegan a transmitir en hechos o en los propios diálogos, un buen juego de rol siempre va a brindar a personajes que han experimentado varias situaciones de vida y a quienes puedes preguntar para hacer madurar más al tuyo. Pero a todo se llega con mayor recompensa si el esfuerzo ha salido de ti, y eso mismo pasa en los videojuegos, me viene a la mente Dark Souls, ya que puedes ver 200 vídeos sobre como superar una zona o acabar con un boss concreto, pero la victoria sabe mejor si lo has enfrentado por primera vez y has llegado a tus propias conclusiones.

Mentes expertas

Pero, ¿Adónde quiero llegar con todo esto? A que las voces de la experiencia, ya sean de forma hablada o escrita, ya sean mostradas en escenas determinadas en un videojuego, nos transportan a reflexiones que es mejor atender, cada uno y cada una puede mirar un hecho que ocurre ante nuestros ojos y darle importancia o dejarlo pasar, pero invitaros a la reflexión sobre el mismo no es más que un consejo de sabios. Esos sabios nos los hemos encontrado en muchas ocasiones en títulos como Zelda, algún que otro personaje en Red Dead Redemption 2 que conocer Arthur Morgan, e incluso figuras de “maestros” que en tantos títulos nos enseñan nuevas habilidades o técnicas.

¿De dónde han salido todas estas nuevas y poderosas habilidades? De la práctica y la excelencia, de la vivencia que nos puede contar el lore de ese personaje en concreto y quizás sea importante apreciar una vez que hayamos aprendido esa técnica que tanto le ha costado a ese NPC. Me remito a los Jedi de la saga Star Wars, los maestros y maestras Jedi siempre son personas que conocen más sobre la vida y sobre el mundo que les rodea, cada proceso de aprendizaje es un camino en sí, que se lo digan a Cal Kestis en Fallen Order, pues sus propias experiencias y su propia aventura le hacen crecer, pero son los recuerdos de su maestro y su mentora aquellos que les siguen dando fuerza y más habilidad.

¿Somos lo que aprendemos?

Todos estos párrafos me surgen de mi experiencia con Chronos: Before the Ashes, un título en el cada año de vida cuenta, pues cada vez que matan a nuestro personaje, perdemos un año de vida, comenzando con 19 años y pudiendo superar los 70 años dependiendo de cómo nos vaya en la partida. Al principio cuentan más y destacan las aptitudes físicas, y a medida que vamos entrando en años adquirimos mejores habilidades mágicas, pero en detrimento de la agilidad y la fuerza.

¿Todo se debe reducir a eso? ¿Pierdo masa muscular, pero gano cerebro? Si algo observé en mi vivencia en este título fue mi forma de aferrarme a la juventud del personaje, suelo seleccionar guerreros y los magos no son mi primera elección, por eso quería que fuera joven, para golpear más fuerte y moverme más ágil. Una vez terminado el juego me di cuenta de que quizás había perdido una buena parte de la experiencia por el miedo a que mi personaje envejeciera, por lo que no utilicé todo el poder mágico y toda la sabiduría del protagonista.

Lo que nos lleva a pensar ¿Es bueno ser joven? ¿Es malo ser mayor? Prefiero quedarme en el intermedio de las preguntas, la agilidad mental es importante, aprender de aquellas personas que saben más que nosotros y nosotras es también una buena parte de sabiduría personal y es importante escuchar a nuestros mayores fuera y dentro de los videojuegos, pero recordad, no es lo mismo oír que escuchar. Quien sabe, quizás te ayuden en más de una situación en cualquiera de los dos mundos, sabemos que como todo ser humano o personaje se pueden equivocar, pero ahí ya entra en juego tu capacidad para decidir, ¿Qué camino escoges?