La popular compañía francesa Ubisoft publicó sus resultados fiscales con motivo del último trimestre, y como siempre han arrojado unos resultados interesantes y que conviene analizar, pues son una buena muestra del estado de salud de las consolas en la actualidad.

Además de superar los 200 millones de beneficios gracias a las excelentes ventas de Tom Clancy's Ghost Recon: Wildlands, lo que ha supuesto una cifra un 45% mejor que la del mismo periodo de 2016 y eso a pesar de los discretos resultados de For Honor.

Pero tal vez lo más llamativo es que de todos los juegos vendidos un 44% corresponden a PlayStation 4, mientras que en Xbox One han supuesto el 22% y en PC del 21%, así que la suma de ambos quedaría por debajo de lo que han vendido en la sobremesa de Sony. También llama la atención que los juegos vendidos de PS3, Xbox 360, Wii y Wii U han quedado reducidos a un 2%, una cifra ya bastante residual.

Respecto a las ventas por región más del 49% vienen de EEUU, de Europa un 32% y un 18% para el resto del mundo. Próximos previsibles superventas como Assassin's Creed Origins o Far Cry 5 hacen pensar que las arcas de Ubisoft seguirán llenas en 2017.