Fue un 15 de noviembre de hace 10 años cuando Ubisoft decidió lanzar una de sus apuestas más ambiciosas, uno de esos proyectos clave con millones de inversión cuyo éxito era casi obligado y un posible fracaso hubiese supuesto un grave problema para la compañía gala.

Hablamos de Assassin's Creed, el primer juego de una saga que ha tenido casi una entrega anual desde entonces y hasta se ha estrenado en la gran pantalla el año pasado con la película protagonizada por Michael Fassbender.

El juego fue lanzado para PlayStation 3 y Xbox 360 y narraba dos historias paralelas, la de Altair y la lucha entre los Assassins y la Orden Templaria en la guerra de las cruzadas del siglo XII, llevándonos a trepar por las ciudades de Jerusalem, Acre o Damasco, y también la de Desmond Miles, un pariente lejano de una estirpe de asesinos con un ADN que Abstergo ha conseguido utilizar para revivir épocas pasadas y cambiar la historia.

Sin duda Assassin's Creed es una de las IPs más importantes y relevantes de los últimos años, con algunos altibajos pero por lo general una gran aceptación en crítica y público. Su último juego, Assassin's Creed Origins nos lleva al Egipto de los faraones. ¡Que cumplan muchos más!