A raíz de las recientes noticias sobre los videojuegos, lo mejor no es callarse, porque si todo el mundo tiene derecho a dar un punto de vista, imagino que se aplica a todo el mundo. Se ha dicho que los videojuegos te hacen violento o violenta, que, supuestamente, los videojuegos son una herramienta que influye en los jóvenes para mal, y que enseñan cosas horribles a los y las jóvenes.

Quizá esto nos lleva a reflexionar que en realidad se tiene miedo a la propia industria, al fin y al cabo mueve mucho dinero, hay muchos títulos en el mercado y se tiene acceso a ellos de forma relativamente sencilla, porque bueno, existe el modelo free to play, y Fortnite ha sido señalado cómo una forma o una vía de enseñar a matar.

En realidad yo no vengo aquí a hablar, ni a contrarrestar esos comentarios, simplemente vengo a hablar sobre que los videojuegos no te hacen violento, todo lo contrario.

Una herramienta de enseñanza

Una de las formas en que los videojuegos no te hacen violento es cuando sabes usarlos como una herramienta pedagógica, a día de hoy hay profesores y profesoras valientes que deciden usar juegos como Minecraft para enseñar a sus alumnos a cooperar, a diseñar estructuras, y a divertirse aprendiendo independientemente del éxito que haya tenido este título, se ha reconvertido en algo dónde una persona puede aprender y además, disfrutando del proceso.

No voy a negar que existen títulos violentos, títulos en donde incluso puedes llegar a ver escenas muy desagradables, pero, ¿es culpa de ese título la actitud violenta que puede llegar a desarrollar una persona? ¿no vemos películas a diario, leemos libros, vemos series o incluso escuchamos canciones que muestran algún tipo de violencia? pero no por ello vamos a salir a la calle y vamos a apalear a alguien.

Un hobby o un pasatiempo en ocasiones se puede convertir en una profesión, pero si yo practico boxeo, no significa que yo tenga que boxear con todas las personas con las que me encuentro, si practicó rugby, no tengo que hacerle un placaje a alguien cuando vas hacia el último melón del supermercado en pleno verano. Entonces, si yo cojo un mando jugar a un videojuego, en donde puedo conducir y estamparme contra una pared, no lo voy a hacer en la vida real.

Porque señoras y señores, cada uno y cada una puede ser más o menos susceptible ante lo que ven sus ojos, aprender o desaprender, interiorizar o debatir sobre lo que estamos viendo, es verdad que las mentes jóvenes pueden llegar a ser más influenciables, pero hoy en día nos encontramos en un mundo donde podemos elegir dónde, cuándo y cómo aprender de forma complementaria fuera de los colegios.

Streamers, youtubers y videojuegos

Hablando de los youtubers o streamers a quienes también se suele criticar en los medios de comunicación convencional, yo invito a todas aquellas personas que lo critican a que se pasen por lo menos 10 minutos a ver a una de estas personas que se ponen delante de una cámara, al igual que lo hace la gente en televisión, y podrán comprobar como muchos y muchas de ellas enseñan una gran cantidad de valores que sirven en el día a día y que sirven para el futuro.

Porque al fin y al cabo son personas emprendedoras (y sí, algunas de ellas son para echarlas de comer a parte, que no es oro todo lo que reluce), que desde cero se han construido un nombre o incluso una marca en donde ellas mismas trabajan, puedo poner claros ejemplos: hay un creador de contenido que juega a Valorant llamado SirMaza, al que puedes ver por las mañanas enseñando sobre técnicas del juego a través de su propia forma de jugar, pero suelta sus pequeñas píldoras de enseñanza, maduras y coherentes que perfectamente puede escuchar cualquier persona joven, que les ayudaría mucho más que escuchar otro tipo de cosas, sobre todo, aquellos discursos que se basan en el odio y el maltrato hacia otras personas que no son de tu misma orientación sexual.

También tenemos casos como el de Elesky, que toca canciones de videojuegos en directo y que además charla con su público de forma amena y entretenida, es una vía a través de la cual está enseñando sobre música, está mostrando información sobre un arte, está enseñando a la gente otra parte de los videojuegos que tiene que ver con las bandas sonoras con las que muchos y muchas se han emocionado al escucharlas, al igual que con una composición que puedes oír en una película.

También tenemos el caso del gran éxito de Ibai Llanos, que ni siquiera versa su contenido en los videojuegos exclusivamente, un día entras y puede estar hablando de música, emitiendo deportes o dando consejos a gente que tiene dudas en el chat de forma muy acertada, como ha comentado en muchas entrevistas, uno de sus objetivos es que la gente se sienta acompañada, que si están pasando por un mal momento puedan sonreír.

Hay que destacar además que esa responsabilidad no recae sobre él, ni sobre ninguna de las personas que se dedica a ello, si una persona se encuentra mal o está atravesando un mal momento, que pida ayuda, porque al exteriorizar todo ese contenido interno, se puede trabajar con él, tu entorno puede acompañarte en ese proceso.

Con respecto a todo esto, invito a cualquier padre o madre que ha leído algún artículo sobre que los videojuegos incitan a comportamientos violentos o tienen tintes negativos, que no vaya a contracorriente, que dedique un tiempo con su hijo o con su hija a ver en qué emplea su tiempo dentro de los videojuegos, a ver y escuchar con ellos y con ellas a las personas que hablan delante de una cámara todos los días en plataformas como Twitch o Youtube, y si escuchan algo que no les gusta o no les convence, que lo reflexionen y lo hablen para qué la gente joven entiendo aún mejor sobre qué es la vida y cómo se debe convivir de forma cívica.

Beneficios y buenas prácticas

Hoy en día se ha demostrado tras varios estudios, que los videojuegos reportan muchos beneficios a nivel cognitivo, incluso desde hace tiempo está demostrado que para las personas que trabajan en cirujía viene bien coger un mando y practicar con él con cualquier videojuego, pues mejora la musculación de la mano y la coordinación psicomotriz. Pero claro, de todo esto a veces no conviene hablar, pero hay que dar luz a esta industria, para aportar, para enseñar al mundo que los videojuegos tiene mucho potencial y que a día de hoy es un mundo que aún está arrancando y despegando.

En ámbitos como la realidad virtual, se ha transformado en una herramienta capaz de mostrar a gente que no puede moverse de una cama lugares con los que siempre ha soñado, las gafas de VR han permitido ver a una persona el Museo del Louvre por completo, y eso, para ella, no tiene precio alguno. Por lo que hay que cambiar el prisma a la hora de ver este entretenimiento, lo mejor es sumarse a la ola para que pueda desarrollar su potencial.

Marvel's Iron Man VR 2

La forma en que las personas podemos conectar a nivel emocional con un videojuego que acabamos de empezar, que estamos jugando o que acabamos de terminar, puede compararse a una relación de amistad, se ha generado de forma espontánea, y puede llegar a ser una historia que no olvidamos nunca, contiene una trama y unos personajes que se tatúan en nuestro interior y a veces, incluso, en nuestra personalidad porque nos ha cambiado, como cuando acabamos un buen libro o al ver una película te has dado cuenta que puede ser tu favorita.

Gracias a los videojuegos hay mucha gente trabajando, se está compitiendo a nivel profesional, y en otros países han llegado a ser un deporte oficial, así que merece el mismo respeto que cualquier otro ámbito del entretenimiento porque se lo ha ganado a pulso, se lo ha ganado por méritos propios.

Porque algunas palabras lo digan expertos no significa que sean la absoluta verdad, al igual que todas estas líneas que son una opinión y un punto de vista, con el que puedes estar más o menos de acuerdo. Si ciertos colegas de profesión tratan de usar su experiencia en la psicología para dedicar palabras negativas hacia los videojuegos, ya os puedo decir que a día de hoy, ejerciendo la misma profesión, miro más hacia las positivas, puesto que ayudan a mucha gente en su soledad, personas que han entrado en entornos virtuales y han conocido a personas maravillosas (menos cuando juegas en competitivo, que ahí salen alguno que otros tóxico de su cueva), y han ganado confianza y valentía para enfrentarse al mundo real.

Una concluisón entre tantas otras

Todo esto llega hasta tal punto de que los videojuegos ya forman parte del mundo real, para bien, y no para mal, son una realidad, que perfectamente se pueden distinguir del resto de realidades y no te convierten en una persona violenta. No camuflemos actos atroces y horribles que tienen que ver directamente con el odio, mediante un medio como los videojuegos, porque ahí, es donde nos estamos equivocando por completo.

En una persona influyen otras muchas cosas, el entorno en el que se cría, en el que se desarrolla, las enseñanzas que ha interiorizado, las experiencias de vida, las vivencias, la propia personalidad formada o en proceso de formarse, las personas que conoce, la educación que ha recibido y en muchas ocasiones, lo que oye de personas con una posición más "elevada" que creen tener la razón y solo infunden odio y rabia, llevando a la sociedad a un plano más inhumano y que no sabe convivir con todas las personas, independientemente de su sexo, su etnia, religión, color de piel u orientación sexual.

Hoy en día podéis elegir con qué o quién crecer, ya sea encendiendo la consola, el PC, instalando un nuevo juego en tu móvil, leyendo, viendo vídeos, películas, series, teatro, practicando deporte, escribiendo o mirando a gente que quieren entretener a cientos de personas a diario, y puedes controlar y vivir tu vida de la forma que quieras, pero siempre tu libertad termina donde empieza la de otra persona. Vive en positivo, vive los videojuegos y no te avergüences de ser quién eres.