A falta de escasos días para conmemorar el segundo aniversario del lanzamiento de la tan esperada PS5, la comunidad gamer se sigue preguntando, aún después de dos años, los motivos por los cuales muchos de ellos no han podido acceder a la última consola de Sony, así como los motivos de la escasez de PS5 que está azotando a toda la comunidad.

Y es que esto está siendo una constante desde su lanzamiento. Se nos han presentado situaciones nunca antes vistas. Fruto de esta problemática, surgieron noticias como el aumento de los precios un año después de su salida y la disminución de las previsiones de ventas, convirtiendo a la PS5, en la primera consola en tener que aumentar sus precios post lanzamiento. Esto ya lo podríamos empezar a tomar como índice que nos ayude a comprender mejor la situación de escasez de PS5.

Sin embargo, la PS5 no es la única que está afrontando este tipo de dificultades. La compañía que mayor cuota de mercado abarca en el mercado japones, Nintendo, tampoco está transitando por lo que se diría un camino de rosas. Aunque tampoco es que pase por el gran lodazal en el que se encuentra Sony actualmente.

Bien es cierto que ambas compañías han tenido que disminuir sus previsiones de venta para este año fiscal. Nintendo pasaron de unas 23M de unidades, a unas 21M de unidades, un 10% menos con respecto a lo deseado.

Con respecto a Sony se pasaron de unas previsiones de 22M de ventas a unas 18M de unidades, un 20% menos. Algo que se podría interpretar como que a a Sony le ha afectado esta escasez el doble que a su máxima competencia. Realmente, esto no es así y no es algo que se pueda reducir a algo tan sencillo.

A continuación, te explicamos todos los motivos detallados y contrastados de por qué está ocurriendo esto, no solo en el sector del gaming sino, incluso, en un marco mundial.

La crisis de semiconductores mundial

Tal y como habéis leído, se trata de una crisis de semiconductores mundial. Es decir, un problema que afecta no solo a un sector aislado, sino que perjudica a la totalidad de la economía en su conjunto.

Y como sucede en todas las crisis mundiales, el problema no deriva de un único horizonte. Más bien es una serie de acontecimientos encadenados que, unidos, dan lugar a esta gran crisis global.

Pese a ser un dilema para todo el planeta, aflige tristemente para todos nosotros, de sobremanera al sector del gaming incluyendo el PC.

Una vez identificado el problema central, vamos a lo que nos interesa realmente. ¿Cuáles son los motivos causantes de la escasez de PS5?

Con todas las grandes variables que abarcan el tema en sí, podríamos resumirlo como una consecuencia de la pandemia, los escasísimos productores de semiconductores y la grandísima demanda y necesidad que hay de estos.

Y es que, efectivamente si lo miramos desde una perspectiva super simplificada, estos serían los verdaderos agentes del problema.

Para ponernos un poco en contexto, debemos de conocer el intrincado y complejo mercado de los semiconductores. Hablamos entonces de un mercado de altísima exigencia del que la producción global de microchips depende solamente de unas selectas compañías, las cuales se ubican en su mayoría en Asía.

Así como lo leéis, son unas pocas las empresas en todo el globo capaces de proporcionar los microchips que casi todo terminal electrónico actual lleva incorporado, incluidos los de nuestras amadas consolas PS5.

Pues bien, este oligopolio no es formado por casualidad, sino que es la consecuencia de las altísimas exigencias que el propio proceso productivo necesita.

¿Qué tipo de exigencias? Logísticas y económicas principalmente, que constituirán una barreras de entrada tan exagerada que eliminarán inmediatamente potenciales competidores, ya que una sola planta de producción de microchips empleando los máximos recursos posibles de semejantes gigantes económicos tardaría - siendo optimistas - 3 años, resulta algo totalmente inasumible para casi cualquier empresa.

Tengamos en cuenta que esta actividad es tan altamente costosa debido a la extrema especialización y agrupación que se ha de llevar para poner en marcha la actividad económica en sí. Desde el personal mas formado y especializado del mercado, a las maquinas y plantas tan costosas que se requieren para la fabricación de la memoria pensante de nuestras consolas.

El caso específico de PS5

Una vez conocidos la concreta situación del mercado de semiconductores, ¿cuál es la situación específica de las PS5? Sony compra estos microchips a la mayor empresa de semiconductores, TSMC, la misma compañía que fabrica los procesadores de los Iphone y hasta el de los aviones de combate F35.

Cómo os podéis imaginar, esta empresa tiene una demanda exagerada a la que hacer frente, y es aquí donde se juntan los tres factores que mencioné anteriormente para generar la tormenta perfecta. La pandemia, los pocos oferentes y un aumento de la demanda.

Aunque parece que la pandemia haya pasado a otra vida, sus consecuencias se hacen presentes. Hablo de las millones de unidades que tuvieron que ser retrasadas y que actualmente ralentizan la producción.

Encontramos entonces que, para que nuestras amiguitas digitales se construyan, aún hace falta que otros miles de productos se realicen previamente. Asimismo, no todos los problemas son de tiempos anteriores, sino que actualmente China, la fábrica del mundo, actualmente discurre por un estricto confinamiento.

Este nuevo confinamiento chino ha provocado otro retraso más en la producción, debido a que muchas empresas que intervienen directa o indirectamente en la cadena de elaboración tan extensa de los semiconductores se han visto obligadas a frenar.

Por si fuera poco lo previamente mencionado, se le suma una aumento de la demanda global de este producto (microchips). Em parte a la gran transformación tecnológica que llevan la totalidad de los agentes económicos.

Si vamos entendiendo la dinámica, entenderemos que conlleva esto. Efectivamente, mayor carga para las compañías productoras que tendrán que fabricar en mayor volumen, aumentando considerablemente las listas de espera para poder adquirir los procesadores con los que se fabrican nuestras videoconsolas.

Comúnmente se responde a esta problemática en un mercado normal (que este no lo es), aumentando la oferta. Si esta oferta no sería suficiente, los oferentes atraídos por la gran demanda y nivel de precios actuales, aumentarían la producción.

En este caso de PS5 hay una gran demanda de microchips, pero, no está siendo respondida con un aumento de la oferta. Esto, como ya conocemos, se debe a las grandes dificultades y exigencias para abrir nuevas plantas de fabricación.

Por tanto, de la única forma con la que Sony ha sabido afrentar esta demanda es incrementando el precio de sus dispositivos. Tratando de mitigar de forma tímida la demanda... aunque ya hemos visto que de nada ha servido. Aún, miles de personas están dispuestas a comprar una PS5, pese a que no son capaces de hacerse con una. Tristemente, teniendo que acudir a un mercado de segunda mano o reventa con precios tan ridículos que ascienden a los 800$.

Esto, viene a decir que una parte de la comunidad de los videojuegos tendrá que recurrir a pagar al rededor de un 60% más del precio por el cual han salido las PS5.

¿Cuándo volverán a las tiendas las PS5?

De momento, no hay ningún indicio excesivamente esperanzador para creer que esto se solucionará para ninguna empresa, y mucho menos para Sony.

Todavía continúan las estrictas normas del confinamiento del gigante asiático, y se le suma el conflicto con Taiwán tras la posibilidad de que esta sea invadida por la China continental. Cabe mencionar que TSMC esta localizada en Taiwán, lo que significa que es otro factor externo que, desde luego, no favorecerá a que se solucione el problema.

Sin embargo, nos llega un pequeño rayo de luz de un lejano horizonte con las nuevas informaciones de que TSMC, levantaría una nueva planta en USA que haría aumentar exponencialmente su producción, volviendo nuevamente a niveles normales de fabricación de procesadores.

Pero, previamente mencionado, estas plantas conllevarán tales costes y dificultades que impedirán que hasta 2023, probablemente 2024, no tengamos otra planta productora de semiconductores funcionando capaz de abastecernos de los tan deseados microchips de las PS5.