Este análisis ha sido realizado gracias a una copia digital facilitada por Thunderful, título actualmente disponible en PlayStation 4, PlayStation 5 (versión analizada), Xbox Series X|S, Nintendo Switch y PC.
Hoy os traigo un título con denominación de origen española, quizás es uno de esos que ha podido pasar más desapercibido, pero todas aquellas personas que lo han probado han conocido su toque especial, en esta ocasión os presento el análisis de Worldless, el primer lanzamiento del estudio Noname Studios, que ha sabido dar personalidad propia a todo lo que alberga este videojuego.
Se trata de una propuesta conceptual en su historia, y en su estética, pero si nos adentramos en todo su esplendor, veremos un juego de aventuras, plataformas, y combates por turnos con alto grado de exigencia, pero de esos que resulta muy satisfactorio en cuanto dominemos sus secretos.
Aunque a nivel de historia podemos andar un poco perdidos y perdidas, hay que intentar leer entre líneas, fijarse en los escasos textos que aparecen, y observar los escenarios. Pero la experiencia que ofrece Worldless, que sabe acompañar con una banda sonora redonda, es de esas que hay que vivir con todos nuestros sentidos.
La historia oculta
Para entender la trama central de este título no recomiendo buscarle las costuras, Worldless no va de aprender sobre su historia, si no todo lo que orbita alrededor de nuestro personaje principal. Despertamos de un letargo para ponernos a los mandos de este curioso ser que nos aparece en pantalla, que consta de puntos no conectados entre si, muy al estilo Rayman, y debemos embarcarnos en la aventura de comprender nuestra propia existencia.
La única forma que tengo de contextualizar todo lo que quiere contar este título, es indicando su descripción principal: “Worldless se desarrolla en un universo nuevo de entes atrapados en un conflicto eterno por culpa de la polaridad natural de sus atracciones. Estas interacciones pueden provocar un intercambio de polaridades, pero este proceso es muy inestable y nadie sabe qué puede causar...”
A lo largo de la aventura está muy presente esta polaridad, incluso juegan con la inestabilidad que producen las mismas, sobre todo a través de conflictos que observamos en algunos fondos de los escenarios, batallas ajenas a nuestra exploración, que aparecen sin avisar, así mismo, los propios escenarios monocromáticos nos indican que estamos caminando entre escenas conceptuales que no llegamos a comprender.
Su propia belleza nos atrapa, pero la historia no define todo lo que jugamos, quizás por eso no recomiendo entrar a este lanzamiento por su historia, si no por todo lo que me queda por contar, aún así, en este choque de fuerzas opuestas, de la dicotomía de colores, y de los personajes, me gusta que no dejen claro quienes son los buenos, y quienes son los malos, simplemente nos muestran su existencia.
Sobre los saltos y la exploración
Aunque la razón de la existencia de nuestro personaje no esté clara, ni tampoco sus motivaciones u objetivos, debemos avanzar por diferentes escenarios interconectados, llenos de plataformas, combates, secretos, y pequeños puzles que no cuentan con explicación, pero que podemos resolver para obtener diferentes beneficios.
El diseño de los niveles es muy acertado para toda la movilidad que ofrece el personaje, ya que podemos saltar desde un inicio, pero poco a poco iremos adquiriendo nuevas habilidades que abren nuevas vías de exploración, como un dash que nos impulsa en cualquier dirección, o correr a toda velocidad, entre otras, puesto que no busco desvelar todo, porque de ahí nace el interés por jugar, por descubrir cosas nuevas en primera persona.
Como plataformas, Worldless no es de los más exigentes, pero ofrece una buena experiencia en esta vertiente, gracias a integrar saltos ajustados, momentos de rompecabezas en su propio diseño plataformero, y escenarios variados para dicho fin. En cuanto a estos escenarios, la monocromía ayuda a diferenciar cada uno de ellos, ya sea en tonos azules, rojos, blancos, amarillos, y varios más que es mejor descubrir con vuestros propios ojos.
Esta parte de exploración me ha resultado muy satisfactoria, y con el acompañamiento musical de fondo es todo un regalo para los sentidos, aunque nos topamos con un mapa demasiado conceptual, nos indica dónde nos encontramos, pero puede liarnos en algunas ocasiones, aun así, la integración del mismo con la exploración se agradece, ya que aparece pulsando un solo botón sin pausar el juego.
Combates complejos, pero gratificantes
En verdad Worldless no solo entró por los ojos, su sistema de combate por turnos fue uno de los alicientes para querer saber más y más sobre su complejidad, todo lo que escuché en el evento de presentación al que pude acudir en las oficinas de Nintendo España se cumplió para bien, y me ha dado mucho más de lo que esperaba.
Estamos ante un sistema de combate que penaliza aporrear botones, donde el timing es muy importante, saber leer los movimientos del rival, y realizar combinaciones entre los ataques y la absorción lo es casi todo. Digo casi todo, porque nuestra agilidad a los mandos es importante, y conocer cada uno de los botones premia al jugador o jugadora con combates espectaculares, y que tienen sentido en su existencia.
Para avanzar en estas habilidades, el personaje principal cuenta con un árbol de habilidades, el cual irá aumentando al encontrar puntos de habilidad por el mapa, o absorbiendo enemigos, ya que, si solo acabamos con ellos, no obtendremos nada más que la celebración de la victoria. Cada arma y cada ataque dispone de un daño físico determinado, y otro de absorción, por lo que saber alternar entre ambos nos dará la victoria, y puntos de habilidad.
En cada combate disponemos de un tiempo determinado para realizar acciones durante nuestro turno, por lo que no podemos dormirnos en los laureles, ya que, en cuanto termina, comienzan las acciones del enemigo, a las cuales podemos reaccionar en el momento adecuado, con el botón adecuado, pero nuestro bloqueo es finito, y debemos medir bien de qué manera usarlo.
Una vez que alcanzamos el umbral de absorción determinado para cada criatura, con un solo botón iniciaremos el proceso, que se basa en una combinación de botones que aparece incompleta si el porcentaje de absorción aún no es elevado. Entre las armas disponibles, tenemos el escudo y la espada, un hacha de gran impacto, un arco para los ataques a distancia, y magias elementales.
Gracias a estas últimas, no solo atacar es importante, ya que algunos enemigos tienen una debilidad elemental o física determinada, ya sea de rayo, fuego, hielo, entre otras, que nos darán mayor probabilidad de victoria si sabemos hacer buen uso de ellas. Sumado a todo ello, tenemos el bloqueo y los parrys, muy importantes a la hora de enfrentar las contiendas, debido a que un buen parry a tiempo deja muy expuesto al enemigo y nos dará una ventaja táctica.
El sistema de bloqueo es curioso, ya que tenemos asignados botones diferentes para el bloqueo físico, y el mágico, lo cual suma un componente de estrategia que ha captado toda mi atención. Toda esta amalgama de acciones y botones es muy satisfactoria a los mandos, puesto que tendremos combates intensos y variados, sobre todo contra los jefes finales que desafiaran todo lo que hemos aprendido, y que debemos comprender al 100% si queremos salir con vida del combate.
Worldless no penaliza si perdemos un combate, simplemente nos expulsa hacia atrás para poder volver. Muchos de los combates son de carácter obligatorio para poder avanzar, pero siempre podemos repetir aquellos que hayamos terminado para seguir practicando, y puedo decir en alto que su sistema de combate no me ha parecido injusto en ningún momento, siempre da margen para aprender, para avanzar, en definitiva, para superarnos a nosotros, y a nosotras mismas.
Belleza visual y sonora
A nivel estético y visual, Worldless habla por si solo, ofrece una experiencia bella, su atmósfera atrapa desde el principio, y su sencillez no demanda más, simplemente se disfruta de principio a fin. La fluidez en su manejo, y en su rendimiento es excepcional, y no me he encontrado con ninguna bajada de frames por segundo acusada, todo ha ido como la seda, gracias a que va a la par con un buen diseño de niveles.
Su belleza visual se combina muy bien con la banda sonora, que ofrece muchos momentos de paz en la exploración, lo cual se agradece en aquellos momentos que estamos resolviendo algún puzle que alberga el mundo, o intentamos realizar algún salto a priori imposible. Los enemigos suelen ir en la línea de lo que muestra, muchos de ellos son figuras geométricas combinadas, que realizan ataques que debemos aprender para alzarnos con la victoria, patrones en el aire que hay que saber leer.
A nivel sonoro tiene todo lo deseado, los efectos lumínicos y de partículas van acompañados de sonidos acordes a su espectacularidad, y los momentos musicales de mayor impacto y tensión aparecen en los bosses más complejos, o en enemigos secretos que son todo un reto a batir.
En cuanto a las opciones de accesibilidad, podemos desactivar la vibración del mando, quitar la sacudida de la cámara y los parpadeos de pantalla, así como activar o desactivar los tutoriales, pero no cuenta con ninguna descripción de audio, ni información con códigos de color, ni opciones de alto contraste, entre otras medidas de accesibilidad.
Conclusiones
En Worldless me he encontrado con toda una experiencia visual, sonora, y jugable que tiene una firma cuidada y de buen gusto. La parte de la historia puede ser su mayor enemigo, ya que muchas personas, yo incluido, se pueden sentir perdidas sobre los objetivos y motivaciones de la misma, no está muy claro que queremos conseguir, pero tenemos la convicción de querer conseguirlo.
Una misión que tenemos fijada gracias a todo lo demás que se incluye dentro del propio juego, como su exploración, los pequeños puzles que nos premian con gemas para mejorar nuestra barra de salud, o el sistema de plataformas, que va mejorando según consigamos nuevas habilidades, y de ahí recoge elementos de su vertiente metroidvania.
Sin duda, el sistema de combate es uno de sus puntos más fuertes, gracias a todo lo que ofrece, como la variedad de armas, las diferentes habilidades y magias, y que nos motiva a pensar nuevas estrategias y formas de vencer, no se queda en esa capa de aporrear botones como puede ocurrir con otros títulos similares, aquí hay que medir tiempos, encontrar los momentos adecuados, y conocer bien las habilidades del personaje principal.
Este lanzamiento de Noname Studios puede ser exigente para algunas personas, pero os recomiendo darle una oportunidad, ya que nos da las herramientas suficientes para saber avanzar, para conocer nuestras debilidades y fortalezas, y para aprender sobre los enemigos que nos vamos encontrando, además, a nivel visual es todo un despliegue de medios, no por tener gráficos de última generación, simplemente por querer aportar su belleza simple y directa.
