Tras estrenarse con una muy buena acogida en agosto de 2021, Total War Saga: TROY está de regreso para presentarnos Rhesus y Memnon, su nuevo DLC. Este contenido adicional, opcional, se suma a MYTHOS o al pack de Ajax y Diomedes para permitirnos darle aún más vida a esta tragedia griega inspirada en La Ilíada.

Antes de comenzar con el análisis sobre este nuevo pack de contenido, me gustaría despejar la que quizá sea la duda más importante de los fans de este título y esta saga. No, no estamos ante un simple retoque de personajes ya existentes con otro nombre. Rhesus y Memnon se suman al juego con sus propias mecánicas y contenido.

Troya no luchó sola

Pese a que el destino final de Troya es de sobra conocido, su caída no sucedió de la noche a la mañana y a causa de un simple caballo. Se trata de un proceso mucho más largo en el que muchas potencias se vieron involucradas.

Dos de ellas, Tracia y Etiopía, las cuales llegaron comandadas desde el norte por Rhesus y desde el sur por Memnon, se unieron al campo de batalla para demostrar que, pese a lo que muchos podríamos haber creído, Troya no fue abandonada, Troya no resistió sola.

Un señor y su lanza

En primer lugar comenzamos con Rhesus (o Reso en español), líder de la facción Tracia que cuenta con una jugabilidad que podríamos describir como la de una pequeña empresa y la más salvaje de las vista hasta ahora en Total War Saga: TROY.

Al jugar con él, la clave está en ir tanteando a los dioses para ganarse el favor de alguno de ellos y una vez conseguido esto comenzar con una estrategia de crecimiento basada en saquear y amenazar a los enemigos cercanos.

Después de todo, estamos ante un hombre de tradiciones que, si bien he descrito como un salvaje, sabe cuando es el momento de rezar y cuando el de coger las armas.

La primera gran traba de los tracios es el hecho de que los propios tracios están en contra. De allí la importante de unir a aquellos que estén en nuestra línea a nuestras filas y destruir cualquier rastro de oposición. La fe y los recursos son un factor clave en esta campaña, pues el ganarse el favor de los dioses a través de sacrificios nos hará acreedores a diversas mejoras (entre ellas un coste por mantenimiento de tropas muy bajo).

No podemos controlar grandes extensiones de territorio o asentamientos, así que nuestra forma de obtener recursos será mediante el saqueo o la extorsión tras ganar batallas. ¿Qué pasa con esto? que curiosamente para reclutar nuevas tropas, además de caros sacrificios, es necesario pagar por adelantado con recursos tan valiosos como el alimento. Es así como el hecho de planificar mal un reclutamiento puede llegar a costarte la partida completa.

Rhesus es un héroe caótico capaz de cambiar las tornas de la batalla en los momentos más álgidos de la batalla (especialmente si tenemos en cuenta que algunas de las unidades de su facción son señores con palos que no le temen a nada), pero en las manos incorrectas no llegará demasiado lejos.

El faraón proveerá

En segundo lugar, pero no menos importante tenemos a Memnon, un hombre con el cual descubriremos el don de la paciencia y la importancia de tener alianzas en el momento y lugar adecuados.

Personalmente, la jugabilidad con Memnon me parece mucho más divertida que con Rhesus, pues prescindimos de los caros sacrificios a los dioses para basarnos en la confianza y la buena voluntad del todopoderoso Faraón.

Etiopía es un facción que, si bien no puede capturar asentamientos como tal, opta por saquear y sembrar el caos. Esto es posible gracias a su gran árbol de construcciones y una cantidad de recursos más que envidiables que servirán para hacer algo de juego político con los territorios aledaños. Con él la clave está en saber usar las alianzas políticas y la abundancia de recursos para, saber dónde hay que saquear y donde no (podemos ver los recursos que ofrece una ciudad en caso de saqueo exitoso).

Además, desde la distancia el contar con el favor del Faraón nos otorga nuevas tropas llegadas desde todas las partes en las que el Imperio Egipcio tiene influencia. Estos refuerzos no se limitan a una clase en particular, sino que varían según la región a la que decidamos solicitarlos y, junto a la posibilidad de reclutar seguidores para nuestra "horda", hacen que jugar con Memnon sea mucho más entretenido que con el bueno de Rhesus.

Finalmente, si bien los etíopes carecen de las clásicas unidades de espionaje, inteligencia y demás, lo compensan gracias a contar con "seguidores", los cuales se van acoplando a Memnon y otorgando bonificación que de otra forma sería imposible conseguir como puede ser la regeneración de unidades.

Una grata sorpresa

Si bien palidecen frente a lo que fue Mythos, Rhesus y Memnon es un pack de contenido descargable que realmente merece los 8,99 euros que cuesta. En este análisis he intentado centrarme en capturas iniciales para evitar destripar las posibilidades y dificultades de ambos héroes, pero doy mi palabra de que no te arrepentirás de hacerte con este contenido.

Es cierto, puede que Memnon se lleve las palmas en cuanto a mejores aspectos, pero esto hace que Rhesus tenga una dificultad adicional idea para quienes estén buscando nuevos desafíos. No esperaba demasiado de estos dos héroes, pero su llegada me ha demostrado que hay más de una forma de cambiar el destino de Troya, y obtener beneficios de ello en el proceso.

¿Dónde comprarlo?

Encontrarás este DLC en Steam y Epic Games, aunque para disfrutar de él necesitarás hacerte con una copia de Total War Saga: TROY. Si el día del lanzamiento del juego te hiciste con la copia gratuita que regalaban, puedes comprar el contenido sin miedo, pues funcionará sin problema alguno.