He vivido aventuras de lo más disparatadas y divertidas; algunas crueles, otras sanguinarias, incluso alguna gallarda, pero todas las he disfrutado como un enano. A continuación tienes toda la información necesaria para conocer lo que nos ha parecido The Bard’s Tales IV: Director’s Cut.

Si quieres aprovechar y superar las tres primeras entregas, ahora tienes la oportunidad de hacerlo en PC, donde se encuentra disponible el remake de los tres juegos. Aquí tienes nuestro análisis de The Bard’s Tale Trilogy.

Para amantes de lo añejo

En primer lugar, dejaremos las cosas claras. Estamos ante un título de la vieja escuela adaptado por completo a la tecnología de nuestros días. Si en su día fuiste un enamorado de las entregas originales o de otras joyas del género como las sagas Might & Magic o Wizardry, este The Bard’s Tale IV te encantará.

Nos encontramos ante una propuesta que nos hará viajar hasta las partidas de lápiz y papel de nuestra infancia, donde la imaginación formaba una parte importante de la propuesta jugable. inXile Entertainment, liderado por Brian Fargo, autor de las tres primeras entregas, ha conseguido crear una jugabilidad única.

La mítica Skara Brae vuelve a ser la ciudad escogida donde comienza nuestra alocada aventura. Una introducción que nos explica de forma reducida los acontecimientos de las anteriores entregas nos da la bienvenida para poder disfrutar de la cuarta entrega de la saga conociendo muy por encima el contexto de nuestra aventura.

Pero, ya adelantamos que, no nos quedaremos siempre en la ciudad, ni mucho menos y que tendremos muchas mazmorras para explorar.

De entrada, comenzaremos la partida controlando a Melodía, una barda con poderes mágicos que salen de las metálicas cuerdas de su laúd. Mas adelante podremos cambiar de personaje en el gremio de aventureros.

En este sentido, aunque no dispongamos de una gran cantidad de opciones, podremos escoger entre magos, bardos, guerreros y ladrones. Entre otras razas podremos escoger entre humanos, elfos y trow, cada uno con sus habilidades.

Estilo de juego

El juego se desarrolla en primera persona pudiéndonos mover con total libertad. También existe la opción de avanzar baldosa a baldosa, como se hacía en los juegos de rol de los 80. A esto hay que unirle un sistema de combate por turnos donde será de vital importancia dónde esté situado cada uno de los miembros de nuestro grupo.

Otra pieza importante que conforma el título tiene que ver con los puzles. El juego está lleno de ellos, siendo algunos más fáciles de solucionar y otros realmente complicados. Para ayudarnos en los momentos donde nos quedemos atascados contaremos con una guía que trae el juego donde nos enseñarán a resolver esos puzles, así que no hay excusa para no avanzar.

Por cierto, es necesario saber que, al tratarse de un título de la vieja escuela, el juego toma mecánicas de tiempos pasados. Por ejemplo, cuando entremos en una localización, en vez de poder movernos libremente por el establecimiento, se abrirá una ventana con un texto descriptivo del recinto indicando las diferentes opciones a realizar. Esto nos hará recordar, una vez más, los juegos de rol de mesa donde el máster nos iba narrando lo que sucedía al entrar en una nueva localización.

Curiosidades

Una de las curiosidades más divertidas es el hecho de que el bardo tenga que estar alegre cuando llega la hora de atacar. En ese momento podrá beber alcohol para ahogar las penas y venirse arriba. Pero hay que andarse con cuidado ya que, si bebe demasiado, no responderá como debe hacerlo (no explico lo que puede suceder por no hacer spoilers).

También decir que podremos utilizar un gran repertorio de instrumentos musicales, fabricar y mejorar nuestras bebidas alcohólicas, y conseguir armas nuevas conforme vayamos avanzando por la historia.

Otro hecho muy destacable tiene que ver con la banda sonora. Se puede decir que la música que nos acompaña la genera el entorno. Si vamos paseando por un mercado, pueden haber mercaderes cantando, o un coro de niños practicando, o una mujer que pase a nuestro lado puede ir tarareando un melodía. Esto me ha llamado mucho la atención ya que impregna el título de un realismo e inmersión muy potentes.

A parte de esto hay momentos donde entrará la música como en cualquier otro videojuego, pudiendo disfrutar de una banda sonora muy celta amenizada por la voz de Julie Fowlis (Brave, de Disney). Las voces están perfectamente dobladas a un inglés con acento escocés. Pero no hay problema ya que los textos están todos en castellano.

Alguna sombra

Conocemos que The Bard’s Tale IV se mueve sobre el motor Unreal, muy utilizado en la mayoría de títulos actuales, por eso nos resulta molesto que todavía, a día de hoy, aún habiendo aparecido unas cuantas actualizaciones, no se haya solucionado del todo el problema de rendimiento que experimenta el juego.

Se nota sobre todo cuando giramos la cámara que se atasca o da pequeños saltos que resultan molestos, sobre todo cuando llevamos varias horas de partida a nuestras espaldas. Es una lástima que todavía exista este problema (que seguro será reparado) teniendo en cuenta que, sin ser un videojuego de gráficos espectaculares, sí que son vistosos y acordes a la propuesta que ofrece.

Conclusiones

Rol de la vieja escuela a lo largo de unas cuarenta horas de aventura, esto es lo que ofrece The Bard’s Tale IV: Director’s Cut. Pero también disfrutaremos de grandes dosis de humor con las disparatadas historias que iremos conociendo.

El alcohol y las canciones de taberna se dan la mano en un título muy recomendable para los más veteranos pero también para los jugadores de rol, que encontrarán unas mecánicas narrativas muy potentes y un atractivo estilo de juego, contando con unos combates excelentes donde hay que aplicar mucha estrategia y cabeza.

Dónde comprarlo

[aawp box='B07V33WS59']

Reseña
Puntuación final:
8.1
Artículo anteriorDayZ ya está a la venta en físico para PS4 y Xbox One
Artículo siguienteEl bucle mortal de Raging Loop ya está disponible en formato físico
analisis-the-bards-tale-iv-directors-cutNos encontramos ante el regreso de una mítica saga de rol de los años 80. La propuesta sigue intacta: buen rol de la vieja escuela y mucha diversión. Los combates son excelentes y el entorno musical sobresaliente. Flojea en cuanto a lo técnico, aunque se deja disfrutar. Recomendado.