Este análisis ha sido realizado gracias a una copia digital facilitada por Nintendo España, título actualmente disponible en Nintendo Switch (versión analizada), PC, PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, y Xbox Series X|S.
El ritmo de lanzamientos nacionales no decae, y esta vez os traigo uno de esos que destacan mucho por su acabado artístico, pero que, además, arroja un gran nivel en cuanto a puzles y misterio, en el análisis de Tales from Candleforth nos adentraremos juntos en este point & click con ambientación folk horror.
El equipo de Under the Bed Games lanza su primer videojuego desde Málaga, para darnos una historia oscura, escenarios detallados y llenos de secretos, y mecánicas que suman originalidad a la resolución de puzles y rompecabezas.
Su premisa de juego de escape captó inmediatamente mi atención, si además se junta con un estilo visual sacado de los mejores momentos de las películas de Tim Burton, ya tienen todo mi interés, así que hablemos de cada punto de este videojuego hecho a mano.
Una historia de familia
Para entender parte de Tales from Candleforth, hay que comprender su premisa, ya que se trata de una colección de cuentos populares que han sido escritos sobre un libro más antiguo, más oscuro, y cuyo contenido ha sido olvidado para que no asomen sus verdaderas intenciones. Pero este contenido trata de escarbar y salir a la luz, lo cual lleva a que el resto de cuentos se mezclen con estas escrituras antiguas, y se distorsione el relato de los mismos.
Si ya tenéis los pelos de punta es normal, la base de estos cuentos del pueblo de Candleforth apunta alto, y no es para menos, en este primer relato nos pondremos en la piel de Sarah, una chica de 16 que debe buscar a su abuela, y en este camino tratará de encontrar los poderes que portan las mujeres de su familia.
Ella hereda la botica familiar, la cual será el primer escenario de entre varios, y estos se sucederán mediante diferentes capítulos, que nos llevarán por varias localizaciones del pueblo. El título sabe conjugar bien entre la escenografía y los puzles, lo cual nos lleva a un desarrollo donde la narrativa ambiental cobra protagonismo. Aunque la historia es interesante, puede resultar insuficiente en contenido, porque tiene un buen planteamiento, y me habría gustado saber más sobre ciertas circunstancias, y de la historia familiar en general.
En este viaje pasaremos por diferentes momentos sacados de verdaderas pesadillas, escenarios irracionales y ocultos en el subconsciente, pero que quieren contarnos una historia, y también confundir a la protagonista, quien busca a su abuela con todo su corazón. La trama principal nos puede llevar una hora y media si realizamos todos los rompecabezas de forma excepcional y del tirón, pero puede alargarse hasta las dos horas y media, o las tres horas, dependiendo de nuestra pericia a los mandos, y del tiempo que tardemos en solucionar los puzles.
Resolviendo rompecabezas
Paredes, cajones, espejos, caminos, espantapájaros, flores, y un largo etcétera, serán parte del juego, y es lo bonito de los point & click, donde todo puede ser una pista o un acertijo, y parte de nuestra capacidad atencional entrará a formar parte de la jugabilidad. Cabe decir que la gran mayoría de puzles que se integran dentro de Tales from Candleforth me resultan bastante originales, y demuestran mimo y cariño dentro de su planteamiento.
A nivel jugable nos moveremos por cada escenario gracias a nuestro puntero, que nos permitirá seleccionar objetos y elementos de cada espacio, en esta aventura pasaremos de un escenario a otro mediante flechas, y nos plantaremos desde la perspectiva en primera persona de Sarah, para examinar una imagen estática como si de viñetas de un cómic se tratase, pero con mucha más riqueza en su interior.
La ambientación, y el acabado visual serán grandes acompañantes en cada punto de la aventura, quienes aumentan el interés por avanzar, y que ponen la guinda del pastel a diferentes momentos llenos de misterio, a varias imágenes que causan incomodidad de manera intencionada, pero bien llevada, ya que la intención del equipo no es dar sustos como ya comentaron en la presentación, que podéis leer aquí, sino crear un ambiente de terror opresivo, y que cause impacto en el jugador o jugadora.
Gracias a esta intencionalidad, en mi transcurso por el juego de principio a fin ha sido predominante la sensación de estar ante una obra de artesanía, tanto en los puzles, como en la parte visual, el dibujado a mano deja una sensación muy positiva, donde admirar más de una pieza que se nos presenta ante los ojos, y donde los rompezabezas están llenos de misterio, sin tener una dificultad muy elevada, y varios de ellos nos pueden resultar conocidos, pero Tales from Candleforth sabe dotarles de personalidad propia, y diferenciarse, aportando bastante variedad en cada capítulo.
El juego aporta las facilidades suficientes para resolver varios de ellos, y para poder terminar más de uno nos hará falta resolver unos pasos anteriores, ya sea al encontrar unas fotos, resolver puzles previos que nos dan parte de la solución de otro, donde gana importancia el cuidado por los detalles, convirtiéndose en un juego estimulante para nuestro cerebro.
Disponemos de un inventario donde se guardan algunos objetos como sellos, ramas, figuras, y diferentes elementos, que nos permitirán interactuar con ciertos objetos del escenario, así como otro apartado de documentos que se utiliza menos de lo que me gustaría, pero que cumple su función dentro de la jugabilidad. Podemos observar el inventario en todo momento, y si posicionamos el puntero encima de los objetos que contiene, puede que nos den alguna pista.
En la resolución de puzles me ha resultado muy original que en varias ocasiones cambia el escenario al resolver unos rompecabezas determinados, sin entrar en spoilers, aunque con ellos sería más fácil de explicar, Candleforth se siente un escenario vivo y cambiante gracias a este hecho, y estos cambios nos pueden ayudar a resolver acertijos que previamente estaban bloqueados, lo cual es una gran decisión a nivel de diseño, y de narrativa.
Acabado visual y sonoro
Es innegable que Tales from Candleforth entra por los ojos desde un primer momento con su planteamiento 2D, ya que su diseño de arte goza de originalidad, buenos acabados, y un aspecto visual muy característico, donde sale a relucir que todo está hecho a mano y con sumo cuidado.
A nivel de rendimiento no he encontrado ningún tipo de problema en la híbrida de Nintendo, salvo en un par de ocasiones que se ha ralentizado la fluidez al resolver un par de puzles, por lo demás, todo funciona correctamente, ya sea a nivel de iluminación, o los cambios que se puedan producir dentro de cada escena, y los diferentes mecanismos de los rompecabezas destacan por su buen planteamiento, donde cada engranaje, cada movimiento, y cada resolución tiene su buen acabado visual.
Habría agradecido la posibilidad de quitar o reducir el granulado de película presente en varias ocasiones, ya que puede afectar a la imagen de algunas escenas, pero no es algo que moleste a la larga, y te acabas acostumbrando a ello. Pero destaca su conseguida ambientación de terror folclórico, que consigue mantener a lo largo y ancho de toda su propuesta.
Cuenta con una banda sonora que sabe acompañar a la perfección durante toda la trama, aumentando la atmósfera de misterio y secretismo, y entiende cuándo debe cambiar el compás para ir de la mano de cada escena dependiendo del nivel de intensidad del momento, el título añade diferentes ruidos ambientales que suman mayor nivel de inmersión, así como más capas lúgubres y oscuras al conjunto general.
En cuanto a las opciones de accesibilidad echo en falta diferentes opciones visuales, como los filtros para personas con daltonismo, opciones de alto contraste, notificaciones visuales, y diferentes ayudas a nivel sonoro, como notificaciones auditivas, o la posibilidad de activar pistas para aquellas personas que así lo deseen. Dispone de 8 idiomas diferentes, entre ellos el castellano, y la posibilidad de modificar la velocidad de aparición de los textos.
Conclusiones
Puedo asegurar que Tales from Candleforth me ha devuelto las ganas de volver a explorar el género point & click, y aplaudo que se siga apostando por este tipo de propuestas, con ellas se pueden crear diferentes historias repletas de secretos, y de curiosidades repartidas por cada escenario.
Su claro planteamiento a modo de escape room es toda una delicia para aquellas personas que busquen este tipo de experiencias, ya sea porque te gusta realizarlos en carne y hueso, o porque te encante toparte con este tipo de organización de puzles en diferentes videojuegos, ya que el planteamiento es muy bueno, los puzles son asequibles, pero ponen a prueba a un nivel suficiente como para estrujarnos el cerebro.
Habría agradecido una mayor duración en general, una mayor cantidad de rompecabezas de dificultad elevada, o la posibilidad de poder tener diferentes finales dependiendo de nuestras decisiones, o de la cantidad de puzles resueltos de forma correcta, o en un orden determinado, pero la visión del equipo creativo es muy acertada y personal, así que debe respetarse, y espero poder conocer más cantidad de cuentos, e historias de Candleforth, ya que, me habría gustado que el juego ahondase más en la historia de Sarah y su familia, que se queda algo corta de contenido.
En varias ocasiones he sentido el verdadero significado de la palabra videojuego, gracias a plantear algunos puzles como si de un juego de mesa, o de lápiz y papel se tratasen, pero trasladados a un mundo virtual en 2D, que transpira arte, y que sabe crear una atmósfera cautivadora, a la par que misteriosa y oscura, Tales from Candleforth te deja con ganas de más, pero en el buen sentido, porque quieres descubrir más cuentos, y adentrarte en más historias creadas por Under the Bed Games, un equipo que ha demostrado tener un gran talento.
