Yace en un lecho de piedra

mi luz, mi amor, mi bien amada,

una oscura maldición apagó su aliento,

los colosos deben caer, para que su vida

no esté por siempre condenada.

 

Agro me acompaña, mi fiel caballo,

el arma en mi puño firme muestra el camino,

trepo por la espalda del gigante y clavo mi espada,

su sombra me consume, pero ella está más cerca.

Salvarla de la muerte es mi destino.

Puede que algunos os estéis preguntando a qué demonios viene empezar un análisis con una poesía - encima tan mala - y otros penséis que es bonita, que por qué no usar el verso para describir un juego en lugar de tanta prosa hablando sobre sus gráficos, su frames por segundo, su música o sus controles.

Algunos videojuegos traspasan esa frontera del puro entretenimiento para convertirse en ARTE, así, en mayúsculas, pero el arte no está hecho para todos, y no todos lo saben apreciar. Por suerte en el mundo siempre quedan románticos, personas que no se conforman con copiar lo que funciona y quieren ir más allá.

Eso hicieron Fumito Ueda y su Team ICO en 2005, hace ya 13 años, lanzando al mercado Shadow of the Colossus, considerado para muchos como el mejor juego de PlayStation 2 y una obra maestra atemporal en la historia de los videojuegos.

Muchos jugadores no han tenido ocasión de probarlo, otros guardan de él un recuerdo imborrable, y Sony ha querido que, para unos y otros, BluePoint Games se encargue de relanzar el título con una remasterización que esté a la altura. Veamos si lo han conseguido.

Revisitando un clásico

Como os decía, la tarea de rehacer un clásico como Shadow of the Colossus, con lo que ese nombre significa para tanta gente, no es nada sencilla, pero si repasamos el historial de BluePoint Games y comprobamos lo bien que lo hicieron con God of War Collection, Metal Gear Solid HD Collection, Gravity Rush Remastered o Uncharted: The Nathan Drake Collection, uno podía esperarse un trabajo muy profesional. Pero nunca esperarse tanto... esta vez se han superado.

Antes de entrar en el plano técnico hablaré un poco sobre el juego para quien no lo conozca, así que los que ya conozcan la obra de Fumito Ueda y quieran saber qué aporta este remaster mejor que se salten este apartado y el siguiente. Los que no lo sepan o quieran recordarlo, que sigan leyendo...

La sombra de los colosos es una experiencia única, íntima, muy solitaria. Un joven llega con dificultad a una vasta tierra a través de un largo puente en cuyo final se dibuja un castillo en ruinas. A lomos de su caballo, Agro, entra en el castillo y deja en un altar a una doncella. Yace muerta, pero una voz celestial le asegura que puede regresar al mundo de los vivos siempre que nuestro protagonista, al que algunos llaman Wander o vagabundo, derrote a los colosos que descansan en lo largo y ancho de esa tierra oculta y maldita.

Y así, sin más explicación, sin garantías y sólo con unas breves palabras sobre lo que nos espera, nos ponemos en marcha, montamos en Agro, alzamos nuestra espada a la luz del cielo y un haz nos indica el camino hacia nuestro objetivo, uno tras otro hasta acabar con los 16 colosos.

Salvo la presencia de palomas, un águila y algunos lagartos, estaremos completamente solos en ese mundo tan majestuoso, salpicado de vestigios de una civilización anterior, salvaje y solitario. Sentiremos soledad y desamparo como ningún otro juego ha sido nunca capaz de ofrecer, porque en el mundo no hay nada más que nosotros y los colosos. Buscar, encontrar, matar y repetir. Una y otra vez.

Lo que, sobre el papel, podría parecer una tarea aburrida o cuanto menos monótona, se transforma en una experiencia cautivadora, que nos atrapa en ese mundo y nos empuja a seguir, porque en cada rincón hay algo que nos maravilla, porque disfrutaremos recorriendo ese mundo misterioso buscando al próximo coloso - algunos están bien escondidos y no será fácil llegar a ellos - y porque no hay un coloso igual.

Sentiremos asombro y respeto cuando lo tengamos delante, puede que algo de miedo, tendremos que pensar cómo derrotarlo, buscando sus puntos débiles, imaginando la forma de sacar ventaja del entorno, tal vez provocándole o buscando lugares elevados para poder trepar por su cuerpo, agarrados fuertemente a su armadura o su cuerpo peludo. ¡Qué gran satisfacción cuando hayamos encontrado la forma de hacerle daño! Y menudo placer cuando logremos, manteniendo el equilibrio, hundir nuestra espada en sus puntos débiles y derribarle.

Utilizo mucho el verbo "sentir", pues Shadow of the Colossus va de sentimientos, no sólo la citada soledad, también el amor y el sacrificio están muy presentes. Somos un ser muy pequeño en un mundo de gigantes, pero empujados por el amor seremos capaces de hacer grandes cosas.

Lo amas o lo odias

Las mecánicas del juego son así de sencillas, no hay nada más, no hay enemigos que derrotar por el camino, ni puzzles que resolver (aunque hay quien diría, con bastante acierto, que cada coloso es un gran puzzle en sí mismo). Tenemos una espada y un arco, pero que sirven de muy poco, con el arco podemos atraer la atención del enemigo y enfurecerlo, y la espada sólo sirve si la clavamos en los puntos débiles.

Usaremos a Agro, nuestro caballo, para desplazarnos largas distancias por un mapa que antaño era enorme - hoy ya no lo es tanto - y podremos recuperar salud rezando en templos diseminados por el mapa. El uso de la espada para que su rayo nos muestre el camino será esencial para orientarnos, pues no hay minimapas ni más indicación que esa, y en zonas de sombra o con bruma perderemos esa guía.

La mayor riqueza en la jugabilidad la encontramos a la hora de enfrentarnos a los colosos. Cada uno es abordable de una forma muy distinta y la curva de dificultad planteada hace que los primeros sean muy sencillos y directos, pero a medida que vayamos avanzando se nos presenten auténticos retos que denotan una gran imaginación y un diseño impecable.

Cada coloso es un mundo, los habrá con forma de animales y no mayores que diez veces nuestro tamaño, pero también auténticos gigantes cuyos dedos serán más grandes que nuestro propio cuerpo. Una vez abordados, nuestro personaje contará con un indicador de resistencia que debemos cuidar, pues se trata en su mayoría de escalar y mantenerse agarrado al pelo del gigante mientras éste se zarandea y trata de tirarnos. Si nos quedamos sin energía y no pisamos terreno horizontal nos caeremos y vuelta a escalar.

Y en eso consiste el juego, encontrar colosos y derrotarlos, no hay fases de conducción ni de sigilo, nuevas armas ni maneras de mejorar al personaje adquiriendo nuevas habilidades, la lista de movimientos es limitada, nuestro personaje no es más que un muchacho. En su día el juego levantó polémica y muchos lo tacharon de simplista, mientras otros encumbraron su diseño, su original propuesta, esa forma que tiene de provocar sentimientos que otros títulos ni se atreven a plantear.

A pesar de tener un modo Nueva Partida +, que conserva la mejora de resistencia que nos dio cada coloso al ser derrotado y la posibilidad de escoger el mundo espejo, y los retos de enfrentarnos directamente a los colosos para tratar de mejorar nuestros tiempos, el juego no es demasiado rejugable y lo podéis completar en 6-8 horas, aunque os sorprenderéis queriendo volver a él de vez en cuando para seguir disfrutando de su diseño, sus paisajes, y volver a experimentar la sensación de escalar a esos gigantes una vez conozcáis sus puntos débiles y la forma de abordarlos.

Esto es el núcleo de Shadow of the Colossus, y ahora os voy a contar qué ha hecho BluePoint Games con él.

Maestros del remaster

Ya he mencionado en los primeros párrafos del análisis los trabajos por los que BluePoint Games se puede considerar, probablemente, el mejor estudio del mundo en esto de las remasterizaciones, en coger un juego más o menos antiguo y darle tal lavado de cara que parece otro. Hasta ahora se habían dedicado a mejorar texturas, añadir algunos efectos de luz, mejorar la resolución y demás tareas para adaptar a PlayStation 4 los God of War, Uncharted - gran trabajo con el primero, por cierto - o el propio The ICO & Shadow of the Colossus Collection, que pasó de PS2 a PS3 con resolución HD y efecto 3D estereoscópico.

La experiencia trabajando en un remaster previo de Shadow of the Colossus habrá ayudado, y la colaboración y asesoramiento de Japan Studios también, pero el trabajo conseguido con este juego en PS4 es francamente sorprendente, sin duda su mejor obra de remasterización hasta la fecha, una labor digna del juego al que están representando.

Visualmente las imágenes y los vídeos hablan por sí solos, prácticamente la totalidad de su mundo se ha visto enriquecido con unas texturas en alta resolución que le dan al título el aspecto de cualquier juego de PS4 original, y eso es mucho decir tratándose de un juego del año 2005. La iluminación también ha sido muy mejorada, caminar por un espeso bosque viendo cómo fluye el agua del río y cae por unas espléndidas cataratas mientras los rayos del sol se cuelan entre las ramas de los árboles te da una idea del tremendo trabajo realizado por el estudio afincado en Austin, Texas. También los colosos han mejorado su aspecto, y su pelaje luce mejor que nunca recordando al de Trico en The Last Guardian.

Se han rehecho gran parte de las animaciones, mejorando su fluidez y añadiendo algunas nuevas, como el movimiento de la ropa y especialmente en Agro, que también se favorece de mejoras en el sistema de físicas y que le dan una sensación de peso y aplomo que suma verosimilitud. Hasta la vegetación en muchos puntos ha sido animada para reflejar el viento y dar más vida a los escenarios, que en muchos casos también han sido rehechos por completo y que gracias a la nitidez y a la mayor distancia de dibujado ofrecen una mejor visión de lo amplio y solitario que es el mundo que nos tocará recorrer.

Hemos podido probar el juego en una PS4 a 1080p y 30 fps y luce de maravilla, pero ya resulta insuperable en PS4 Pro, con la opción de escoger entre el modo cinemático a resolución 4K dinámica y 30 frames por segundo o el modo rendimiento con 1080p - generados a partir de un objetivo de renderizado de 1440p y 60 frames, para el que prefiera calidad visual o fluidez. En ambos casos se consigue una imagen suavizada y con menos errores de aliasing. En mi opinión a 30 fps va perfecto y con las texturas en 4K parece que estás viendo un cuadro en movimiento.

El nuevo maquillaje y toda la base artística que ya venía de serie hace de Shadow of the Colossus un juego con el que estaréis constantemente sacando capturas de pantalla o maravillados con su Modo Foto, que incluye las habituales opciones para mover la cámara a nuestro antojo, añadir filtros, modificar contrastes, distancias focales para los objetos cercanos y lejanos y un sinfín de opciones para lograr unas capturas de impresión. A modo de curiosidad, me ha costado mucho hacer la selección de las capturas para este análisis, y es que tras hacer una criba inicial todavía tenía más de 60 donde escoger y todas igual de buenas.

Respecto a los controles aquí sí se le notan un poco los años al juego, y aunque el protagonista no se maneja mal ni a pie ni a caballo, demostrando que son aspectos que se han trabajado y mejorado respecto al original, sí se sufre esa menor sensibilidad a los giros de cámara o de dirección que no tenemos en los juegos de actual generación, especialmente en lomos de Agro o en determinados momentos escalando a los colosos, donde a veces nos dará la sensación de estar combatiendo también contra los controles.

BluePoint Games ha incluído un nuevo esquema de control modificando la disposición de los botones para adaptarlos a los estándares de los nuevos tiempos (ahora por ejemplo nos agarraremos con L2), un esquema que a mi me parece más acertado, aunque se podrá cambiar por el original para los más puristas o los que todavía se acuerden del primero y prefieran mantenerlo.

Y quiero terminar el análisis técnico haciendo mención a la banda sonora, magnífica como en el original, con una mezcla de pianos y coros para las rozas tranquilas y percusión en las batallas finales, presente sólo en momentos puntuales para que los silencios potencien la sensación de soledad y la música sólo adquiera protagonismo cuando toca. Las voces, que no abundan precisamente en la obra, se mantienen en japonés con subtítulos en castellano, y los efectos de sonido son más que correctos representando con contundencia los golpes de espada contra distintas superficies, los relinchos de Agro y los gritos de los colosos mezclados con el retumbar de la tierra moviéndose bajo nuestros pies.

Conclusión

Hay unas pocas obras que merecen ser jugadas una y otra vez, clásicos atemporales que todo jugador que se precie debería tener siempre en su biblioteca, y Shadow of the Colossus es sin duda una de ellas.

Con un renovado apartado gráfico el juego parece otro, el estudio ha construido tantas cosas desde cero que muchos lo han calificado como "remake" en lugar de "remaster", y ahora su estética rivaliza con la de cualquier juego nuevo de PS4, pero manteniendo los diseños, sensaciones, en definitiva, la esencia que lo convirtió en algo único e irrepetible.

Es cierto que el concepto de remaster es totalmente contrario a añadir nuevos contenidos, aunque puestos a rehacer, un par de nuevos colosos o algunas modificaciones en la forma de enfrentarnos a ellos respecto al original tal vez animarían a más gente que ya lo jugase en su día a volver a probarlo. Claro que muchos pensarían que, como toda obra maestra que se precie, retocarla sería un sacrilegio y las probabilidades de empeorarla serían elevadas.

Habrá quien crea que su propuesta jugable sigue siendo simple, que se trate de un juego que ya se disfrutó en su momento y que no merece la pena revisitar y prefieran dedicar su tiempo al enésimo shooter en la Guerra Mundial, disparando alienígenas o pegando patadas a un balón. También habrá quien piense que menuda tontería fue empezar este análisis con una poesía, que los juegos no pueden ser arte y que la diversión se mide en cantidad y no en calidad de horas.

Tal vez esas personas deberían revisar su interior, por si una sombra oscura se le ha colado dentro. Tal vez sea la de un coloso, que lucha por salir y clama por su libertad.

NOTA: El contenido de este análisis ha sido elaborado a partir de una copia review cedida de forma gratuita por Sony Interactive Entertainment Europe. Las capturas y vídeos que lo acompañan han sido tomadas desde una PlayStation 4 Pro.

Dónde comprarlo

[aawp box='B0721N1GXB']