Este análisis ha sido realizado gracias a una copia versión 1.02 facilitada por Meridiem Games, título ya disponible en PlayStation 4 (versión analizada), Nintendo Switch y PC.
Desde la primera vez que se dio a conocer me sentí interesado en Sakuna, el cual resulta un poco extraño, en razón de ser una curiosa combinación de dos géneros que hasta ahora no había podido probar.
Edelweiss nos ofrece un juego que mezcla el granjeo 3D con combate lateral 2D en medio de un mundo lleno de dioses, demonios y sucios humanos. Con grandes juegos como Stardew Valley o inclusive el Animal Crossing: New Horizons, Sakuna: Of Rice and Ruin tiene todo para ganarse su lugar en el género.
Si debo describir este título en una oración, esta sería, es una mezcla de simulador agrícola de arroz con jugabilidad hack’n’slash condimentado con mitología japonesa (ficticia). Al inicio me dediqué al cultivo de arroz, actividad que resulta ser más que un simple minijuego. Y que se convierte en una de las actividades principales del juego y la forma de subir el nivel de nuestro personaje.
Historia - Una aventura celestial
Aquí tomamos el mando de Sakuna, una diosa bastante malcriada y odiosa que reside en el noble reino (Loftty Realm) de los dioses. Ella pasa la mayor parte del tiempo comiendo y bebiendo a expensas de la honorable reputación de sus padres. Cuando de repente los humanos irrumpen en el lugar, esto en parte por la negligencia de Sakuna.
Como castigo al desastre causado por los humanos, Sakuna es desterrada a una isla infestada por demonios junto con los mortales problemáticos. Luego, se le es encomendada la tarea de cultivar la tierra y deshacerse de la infestación de demonios para resarcir el daño causado en el reino de los dioses. Por suerte contará con ayuda de un variopinto grupo de humanos que nos ayudarán en diversas formas.
Jugabilidad - El divino arte de la gestión de recursos
La granja a la que llegamos será nuestra base. Aquí podemos mejorar nuestro equipamiento, iniciar misiones secundarias, comer y dormir, y obviamente, cosechar arroz. Más allá de solo proveer una fuente de subsistencia, es la manera en la que Sakuna sube de nivel.
Lo anterior es distinto al leveleo tradicional por combate. Los métodos y el cuidado que le dediques a los cultivos determina qué tanto suben nuestras estadísticas. El proceso completo de cultivo y cosecha de arroz es un proceso profundo, largo y ocasionalmente tedioso.
Conforme progresamos en la historia, más elementos son incorporados, como simplificaciones en el proceso o agregar más permutaciones. No tenemos que hacernos cargo de todo, para la mayoría de las etapas tenemos la opción de hacer que alguien más se haga cargo, a costa de obtener menos ganancias.
También tenemos la opción de disminuir la dificultad del cultivo de arroz en el menú del juego, aquí os doy una idea del proceso del cultivo: hay que preparar el campo, clasificar las semillas, sembrarlas, hacer fertilizante, remover la mala hierba, administrar el nivel del agua, cosechar, secar y procesar el cultivo.
Vale, creo que ya me habéis pillado la idea. Una vez que cosechamos el cultivo, hay varios pasos que tenemos que hacer para convertirlo en arroz, el tiempo que invirtamos en este proceso, determinará el tipo de arroz que obtengamos.
El arroz es poder
Verbigracia, obtener el arroz blanco requiere el mayor procesamiento y produce el mayor crecimiento en nuestro personaje. El último paso en particular puede resultar un poco tedioso, ya que requiere un poco de machacar botones. Por fortuna, el repetir ciertas acciones nos ayudará a desbloquear ventajas.
Ventajas como el poder plantar dos semillas de arroz a la vez, y a medida que avanzamos en la historia, es posible crear herramientas que nos facilitarán las actividades. Las estaciones transcurrirán de primavera a otoño, lo cual afectará el clima y agrega cierta presión temporal en la que debemos estar seguros de obtener nuestra cosecha antes que el invierno se establezca.
Ahora, todavía me hace mencionar la cantidad de opciones que tenemos de personalización para crear fertilizantes. Me reservo decir dónde obtenemos los ingredientes base, ya que es más divertido descubrirlo por nuestra cuenta.
Diversión - Un juego con dos caras
Una vez que abandonamos nuestra base, entramos al mapa principal donde podremos acceder a áreas de lucha infestadas por demonios, que en su mayoría tienen una apariencia animal como conejos o cerdos armados. Podemos hacernos de ingredientes de cocina, recursos de creación, incluso equipamiento ocasional y mejoras al aventurarnos en estas áreas.
Algunas de las áreas las podemos encontrar libres de enemigos y nos permite reunir los valiosos recursos. Asimismo, tenemos la posibilidad de mandar a nuestros compañeros a reunir ciertos recursos específicos en áreas en particular, estando estos desaparecidos de la base hasta que terminen su labor.
Limpiando las áreas de enemigos al llegar a la salida o derrotando uno que otro jefe, nos ayudará a subir nuestro nivel de exploración, en consecuencia desbloqueando nuevas áreas. Cada área nos ofrece objetivos opcionales, como eliminar un número determinado de enemigos en una noche, derrotar a un jefe en un tiempo límite o encontrar un ítem en particular. Si logramos estos objetivos opcionales nuestro nivel de exploración sufrirá un subidón.
La lucha - ser una diosa conlleva mucho trabajo
La lucha está en formato 2D con jugabilidad de Hack’n’slash, teniendo la posibilidad de usar un arma de ataque rápido o una a dos manos para golpes fuertes. Así también, tenemos a nuestro alcance ataques especiales que causan más daño, pero esto consumirá la energía de un indicador de recarga.
Podremos desbloquear más ataques especiales y asignarlos a los botones especiales de ataque, esto último a medida avancemos en la aventura y subamos de nivel con el uso continuo. Otra herramienta que usaremos mucho es la bufanda celestial, la cual nos permite alcanzar o rodear a los enemigos a distancia y nos ayuda a alcanzar plataformas fuera del alcance del salto normal.
El uso de la bufanda celestial se volverá un indispensable para la supervivencia. Similar a los ataques especiales, es posible desbloquear movimientos especiales de nuestra bufanda divina, pudiendo equipar hasta 4 en las ranuras disponibles. Lamentablemente, encontré muy tenido de realizar estos movimientos.
La mayor parte del tiempo dependeremos de la creación de objetos para obtener armas y equipamiento más poderoso con determinadas bonificaciones (algunas dependerán de la estación). Cada pieza de equipamiento cuenta con ranuras para asignar bonificaciones, si bien algunos estarán bloqueados hasta que logremos cumplir con particulares condiciones, como la de eliminar una cantidad de enemigos.
Por otro lado, me encantó que el equipamiento que asignemos a nuestro personaje, su apariencia se verá afectada. El cambio de estaciones afectará la estética de las áreas, incluso al anochecer el estilo de juego se verá drásticamente afectado. La oscuridad no solamente reducirá claramente la visibilidad, también hará que los enemigos sean más difíciles.
Sakuna Matata
Dependiendo nuestro nivel y fuerza del arma, apenas y dañaremos a los enemigos en la noche, por lo que lo más sensato es mejor volver a casa. Conforme el tiempo pasa, Sakuna sentirá apetito, lo que evitará que se cure en automático y se perderán los beneficios recibidos por la comida anterior. Nuevamente, la mejor opción es volver a casa a comer y dormir hasta el día siguiente.
Ocasionalmente, nos encontraremos con la necesidad de hacernos con un beneficio alimenticio en específico, como resistencia a venenos para poder avanzar en un área determinada, por lo que debemos poner atención con lo que preparamos en el menú alimenticio. Destacando que algunos ingredientes se pueden arruinar, esto se puede mitigar al convertirlos en alimentos en conserva.
Todas las mecánicas de juego se combinan muy bien. Todo fluye en una buena manera al gestionar nuestro campo, acabar con algunos demonios para subir la velocidad de exploración, recolectar recursos, y finalmente regresar a casa para recargar energías hasta el día siguiente.
Dicho lo anterior, si no estás acostumbrado a tomar un ritmo de juego, esto se podría volver repetitivo y tedioso. Al menos hasta que nos hagamos con más opciones de mejorar los cultivos, la gran cantidad de variables podría resultar abrumadora.
La sección de exploración no tiene mucha variación y a veces no está claro si es necesario explorar más o esperar a que la historia avance para continuar. La lucha, aparte de tener cierta profundidad por lo regular es más un machaca botones o abusar de ataques especiales una y otra vez.
Los enemigos que nos encontremos se vuelven retadores, mas, principalmente se volverán bolsas de golpear. Sakuna: Of Rice and Ruin nos ofrece la posibilidad de disminuir la dificultad de la agricultura y de las secciones de lucha por separado.
Gráficos - una belleza en cada esquina
Rice and Ruin cuenta con un estilo gráfico en sombreado de celdas con diseños de personajes inspirados en el anime. Todos los personajes tienen una apariencia interesante, hay lugares muy bonitos aunque en su mayoría son las típicas cavernas con poca variedad en su interior.
Nos encontraremos con una buena variación de enemigos. Lo jugué en una PlayStation 4 Slim y su rendimiento es bastante estable a 30 fotogramas por segundo, en mi partida no detecté ninguna caída en los fps y su rendimiento va la mar de bien a una resolución de 1080p.
Banda sonora - Encantadora y limitada
En las actuaciones de voz tenemos inglés y japonés, mi favorito fue el japonés ya que se sentía mucho mejor desarrollado, lamentablemente el título no nos ofrece textos en español y estamos obligados a los subtítulos en inglés, lo cual podría ser una gran pega para muchos, a mi juicio es necesario un nivel medio-bajo.
Ahora, la música que nos acompaña en la aventura es una delicia. Continuamente nos encontraremos con tonos musicales bastante disfrutables mezclados con sonidos típicos japoneses. El juego va a un ritmo lento en su narrativa y se siente al escuchar la banda sonora.
Conclusión
Sakuna: Of Rice and Ruin es una carta de amor al cultivo de arroz tradicional japonés. Su jugabilidad es refrescante al intentar combinar la simulación de granja con hack and slash. Aquí es necesario que amemos el juego como un todo. No podemos jugarlo solamente por su simulación de granja o plataformeo. La repetitividad se puede volver tediosa. Estéticamente el juego es precioso, Sakuna es un gran personaje, Para bien o para mal su crecimiento es lento.
Afortunadamente, estamos ante un juego extenso, destaco que no sufrí ningún fallo en su rendimiento y todo me fue fluido. La falta de textos en español es la mancha que podría distanciarnos que querer jugarlo.
Rice and Ruin es recomendable para aquellos que aman los simuladores de granja con un toque de acción, en donde debemos tomarnos todo con calma y dejarnos llevar en la aventura a su propio ritmo.
Dónde comprarlo
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