Este análisis ha sido realizado gracias a una copia actualizada a la versión 1.0.0.0.624677 facilitada por Plaion, título ya disponible en PlayStation 5, PC vía Steam (versión analizada) y Xbox Series X|S.

Hablar de Payday no es sencillo, en razón que desde el lanzamiento de Payday 2 el pasado 2013 ha logrado cimentar un éxito como pocos, principalmente por seguir el modelo de juego como servicio que supone un enorme reto para cualquier estudio. Overkill Software logró alimentar el juego con una enorme cantidad de contenido descargable de pago como gratuito.

Una década después los desarrolladores han enfocado sus esfuerzos en una secuela Payday 3, juego que tiene la titánica tarea de no solo igualar a su antecesor sino también superarlo aprovechando las bondades de la actual generación de consolas.

La historia

Payday 3 nos lleva al oscuro mundo criminal en el año 2020, siguiendo los eventos de Payday 2. Los miembros originales de la banda; Dallas, Chains, Wolf, Hoxton y Joy, junto a la recién llegada Pearl, se ven obligados a volver de su retiro, ya que las acciones pasadas del grupo han creado enemigos poderosos e influyentes.

Su regreso a la vida criminal es en la Ciudad de Nueva York. Reavivando su apetito por atracos audaces. El juego hace un buen trabajo en transportarnos a su mundo, aprovechando la evolución tecnológica y la aparición de las criptomonedas que han provocado un cambio en el funcionamiento de las operaciones criminales.

Si bien, la premisa logra causar intriga, ya que nos muestra las consecuencias de la banda por sus acciones en el título anterior. Mas, el juego no nos ofrece un mayor desarrollo, nuestros criminales favoritos solamente regresan al mundo de los atracos y durante las partidas no se ve un progreso narrativo que vaya de la mano de lo jugable para sumergirnos más en su mundo.

Más allá de algunas cinemáticas entre atracos, es sumamente desalentador la manera en que es presentada, aunque dada la naturaleza del juego, se siembra la promesa de irse expandiendo con actualizaciones de contenido que nos ofrezcan detalles argumentales que apuntan a ser de largo plazo.

La jugabilidad mantiene ese brillo de diversión en los atracos, aunque se siente como un retroceso

El juego sigue la estela establecida, de ser un juego de disparos multijugador cooperativo en primera persona. Desde el comienzo nos ofrece momentos intensos para los recién llegados y un repaso en sus mecánicas para los fieles de la franquicia en un tutorial conformado por cuatro niveles, donde probaremos la cobertura en combate, el sigilo social, evasión y la gestión de civiles.

Payday 3 nos lanza a aventurarnos en ocho atracos distintos, que podemos jugar desde el inicio, habiendo una supresión en un potencial progreso de niveles concatenado. Cada atraco me ha encantado por ser tan diverso en su ambientación, así como sus intrincados funcionamientos específicos.

Verbigracia: los sistemas de seguridad van desde rejillas laser a sensores de movimientos, incluso revisiones de retina. Lo cual nos asegura una buena variedad de retos en los atracos, ninguno será igual y el nivel de éxito dependerá en gran medida en cómo reaccionamos al entorno, desarrollando una manera rápida de reacción.

Aquí la estrategia cobra mayor protagonismo, pudiendo elegir en una infiltración encubierta o un escandalo caótico a mano armada. Situación que aparta totalmente lo establecido en lo jugable con Payday 2 al apuntar a un acercamiento mucho más realista que no obliga a ir con cabeza.

Payday 3 divide los atracos en fases, quitándole naturalidad a los golpes. Comenzando con la infiltración; en donde accederemos sin ser detectados, escalando hasta el momento en que se inicia la fase de negociación; en la que involucra a rehenes y la alerta de los enemigos. En la fase de anticipación; es cuando se eleva la ansiedad mientras evitamos la intervención de la policía, negociando el intercambio de rehenes ganando tiempo.

En la fase de progresión estamos obligados a cumplir ciertos objetivos mientras estamos bajo ataque intenso y en la fase del no retorno; estamos en una desafiante persecución policial en la que tendremos que ser sumamente cuidadosos eligiendo la desviación que no ayude a escapar a salvo.

Es importante mencionar que Payday 3 apunta a ser una experiencia para jugar a ratitos muertos, esto porque rápidamente las misiones se vuelven repetitivas. Para mayor molestia estamos obligados a jugar con permanente conexión en línea, aunque lo hagamos en solitario. Lo cual compromete la calidad de vida a futuro del juego al no poder jugar sin conexión.

El emparejamiento es más complicado, ya que se vuelve difícil encontrar jugadores que jueguen un atraco en una dificultad y sitio en especial, a esto se le suma que jugar con bots es un completo dolor de cabeza, ya que son más inútiles que jugar con un hermanito de cinco años.

La detección de los guardas y las cámaras ha sido mejorada, por lo que debemos ser más cuidadosos cualquier perturbación los hará ir a investigar el área. En otros momentos inexplicablemente nos detectarán, dejando en claro que hace falta una depuración más dedicada en su comportamiento.

Ahora contamos con pequeños mini-juegos al forzar cerraduras y cortar vidrios, que le da una mejor inmersión al tener que hacerlo con mucho cuidado por la suma facilidad en que se puede fallar.

El sistema de progresión se extiende a apariencias cosméticas y armas, que podremos desbloquear con nuestro nivel de infamia y la divisa interna conseguida de las misiones. Todo el tiempo nos podremos encontrar con una divertida y molona máscara, armas o guantes, entre otros para hacer de nuestro criminal el más molón y espeluznante del atraco, lo cual nos incentiva a seguir jugando.

En principio es entretenido el estar acumulando experiencia, mas, se vuelve tedioso y repetitivo al obligarnos a cumplir desafíos aburridos y poco divertidos, como el tener que utilizar cierta arma hasta lograr una determinada cantidad de bajas o jugar en determinada dificultad, subiendo el nivel de exigencia a un nivel insostenible.

Tendremos a disposición más de 100 habilidades con una buena cantidad de opciones para ajustar a nuestro personaje al estilo de juego que mejor nos vaya. Teniendo completa libertad para definir una especialización de habilidades, habiendo una clara restricción al número de asignaciones para no romper el juego.

Payday 3 es cuestionable en su funcionalidad multijugador, verbigracia al momento de votar luego de un atraco fallido, los jugadores que ya votaron y abandonen la partida en medio de la votación, el voto seguirá contando, causando retrasos y frustración para iniciar el atraco. Además de no haber una opción de voto para expulsar que nos obliga a lidiar con usuarios no deseados o crear nuevas salas de juego.

Los gráficos

Payday 3 es bastante continuista en lo visual al momento de compararlo con Payday 2, habiendo un diseño de personajes bastante bueno, pero, que en ningún momento superan lo visto en el anterior juego, teniendo en consideración que es un juego exclusivo para plataformas de actual generación y que supone una exigencia mucho más elevada.

En cuanto a los efectos como explosiones y disparos entre otros, lucen competentes y claramente carentes de ese factor de emoción que otros juegos saben retratar apropiadamente, a lo cual se le suman momentos de fallos visuales que se ven empeorados por la obligación de mantener una conexión permanente de internet.

Las cinemáticas son solamente imágenes estáticas, cumplen muy bien con darnos un contexto de los atracos que vamos a superar, el juego nos obliga a superar cada atraco en un orden para poder desbloquearlas.

Su rendimiento es bueno, pero irregular: mi procesador es un AMD Ryzen 5 5600X, con 16 GB de memoria RAM y una tarjeta gráfica Nvidia GeForce RTX 2060 y tuve un rendimiento inestable de 60 fotogramas por segundo, con todas sus configuraciones gráficas en ultra y en una resolución de 1920x1080, y con Nvidia DLSS SR activado en calidad. Por momentos tenía pequeños pero notables bajones, generalmente al iniciar el golpe o mientras cargaba algo, pero luego logra estabilizarse y es disfrutable.

Naturalmente, ahora es un título más exigente: sus requisitos mínimos son un procesador Intel Core i5-9400F, 16 GB de memoria RAM y una tarjeta gráfica Nvidia GTX 1650 con 4 GB de VRAM. Mientras que sus requisitos recomendados son un procesador Intel Core i7-9700K, 16 GB de memoria RAM y una tarjeta gráfica Nvidia GTX 1080 con 8 GB de VRAM.

Banda sonora

En lo musical es muy poco inspirado, habiendo temas poco memorables que la mayor parte del tiempo pasan desapercibidos sin estar al nivel de la exigencia de la adrenalina del atraco que estamos consumando.

En las actuaciones de voz cuenta solamente con voces en inglés, en las cinemáticas no hay voces, habiendo solamente al momento de realizar los atracos, siendo son competentes y nos van guiando en las fases del golpe.

En cuanto a los textos y subtítulos, nos llega en castellano, con la opción de hacer los textos más grandes, aquí es algo bastante bienvenido, ya que nos permite leer con claridad, aunque se echa en falta la opción de cambiar el color o fijar un fondo oscuro para mejorar las opciones de accesibilidad, ya que el color blanco de los subtítulos en ocasiones es difícil leerlo.

Conclusión

Payday 3 es claramente una interesante propuesta que saca provecho al juego cooperativo y explota su potencial al jugar con amigos al ser elevado a un nivel mucho más estratégico con un sistema de progresión bastante meritorio.

Lamentablemente la inconsistencia en la IA y poco novedosos objetivos lastran la experiencia al hacerla tediosa rápidamente, a lo que se le suma la obligación de estar conectados todo el tiempo sin opción de jugar sin conexión a internet. Visualmente no logra superar a su antecesor, además que su narrativa nos deja con ganas de más al ser desarrollada a cuenta-gotas.

A pesa de ser una entrega lejos de ser perfecta o de al menos igualar a su antecesora, cumple con ofrecernos un divertido reto en el mundo criminal de los atracos, al ser un juego que promete contenido a largo plazo que irá mejorando la experiencia.