Introducción

Megadimension Neptunia VIIR, también conocido con la coletilla Victory II Realize, es una versión con soporte para realidad virtual de Megadimension Neptunia VII, aparecido en PS4 entre 2015 y 2016 para los mercados de Japón y occidente respectivamente.

Considerado por muchos aficionados como el mejor juego de la saga, en Megadimension Neptunia VII teníamos que acompañar a las famosas diosas a lo largo de tres aventuras distintas, que en cierto modo bien podrían haber sido títulos independientes, dando como resultado un juego largo y lleno de contenido.

Megadimension Neptunia VIIR 01

En esta ocasión toca analizar esta versión (que no remake) con soporte para realidad virtual, a ver qué tal funciona. Si os parece, voy a eliminar las referencias al juego de 2015 y analizar éste desde cero. Vamos pues con ello.

Tres historias en una

Lo primero que vemos tras empezar Megadimension Neptunia VIIR es una llamativa secuencia de introducción marca de la casa, con las alegres diosas haciendo poses, seguida del menú de inicio, donde ya destaca una genial ilustración de la prota Neptune.

Lo curioso del tema es que, una vez metidos en vereda, contemplaremos otra secuencia introductoria, incluso con un logotipo distinto, en este caso de Zero Dimension Neptunia Z: Twilight of the Desperate CPU. Efectivamente, acabamos de adentrarnos en una de las tres historias que componen este juego -junto con las versiones G (Hyper) y H (Heart)- y que, si bien guardan un hilo cronológico y una cierta coherencia entre sí, se sienten completamente independientes. Cada una, incluso, tiene sus propios títulos de crédito.

Conviene aclarar que debemos avanzar a lo largo de estas tres aventuras una detrás de otra, no pudiendo elegirlas a voluntad -dentro de la segunda sí podemos jugar en el orden preferido la parte de cada diosa-. Sin embargo, aunque por supuesto las mecánicas de combate y el sistema en general se mantienen, resulta llamativo que en cada historia el juego introduce elementos propios que la distinguen del resto, incluso con personajes únicos.

¿Por qué no una aventura más larga?

Este sistema de partir Megadimension Neptunia VIIR en tres plantea una ventaja y un inconveniente. La parte buena es la ya mencionada variedad, ese aire nuevo que siempre se agradece. El problema es que esta sensación se consigue a cambio de limitar las historias a chascarrillos más o menos simplones, que desde luego no se van a llevar un premio por sus elaborados guiones.

No esperéis por tanto una aventura con giros inesperados que os mantenga en vilo, aunque si ya conocéis esta saga os lo habréis imaginado. Lo que que aquí tenemos es una trama ligerita con muchachas ligeritas, que es de lo que va Neptunia: nada demasiado serio, todo en clave de humor y con los habituales toques picantes entre este grupo de lolitas, a las cuales hemos acabado cogiendo cariño tras varias entregas.

Megadimension Neptunia VIIR 03

Antes de hacerte con Megadimension Neptunia VIIR, sobre todo si eres un profano en la saga, tienes que estar preparado para este tono pretendidamente superficial y plantearte si te interesa. Los diálogos se apoyan en dibujos de estilo manga formidables, pero acaban siendo insulsos, algo común en todos los Neptunia. Vamos, que éste no es un juego para estar súper concentrado; al contrario, relájate, disfruta de su colorido, de los chistes, de los personajes absurdos... un poco ese rollo.

Sistema de combate

Nos encontramos ante un RPG por turnos, donde vemos a los enemigos en el escenario, antes de entablar combate, por lo que podemos elegir si queremos liarnos a mamporros o preferimos evitar algunos encuentros.

Cabe destacar la generosa cantidad de opciones estratégicas, desde el ataque directo hasta el uso de items o habilidades especiales, pasando por movimientos que sólo se ejecutan en combinación con otros personajes, o con aquellos que permanecen en la retaguardia.

Megadimension Neptunia VIIR 04

Cada arma tiene su propio radio de acción, que en alguna ocasión nos permite atacar a más de un enemigo. Además, las diosas o CPUs pueden adoptar su aspecto verdadero, llamado forma HDD: en este modo, aparte de un radical cambio físico, las chavalas harán uso de nuevas habilidades exclusivas.

Completan el círculo los puntos de acción y de magia, que hay que gestionar para lograr la máxima eficacia. Incluso, a la hora de finalizar el turno, iremos aprendiendo distintas poses de defensa que otorgan ciertas ventajas. Este detalle me ha parecido muy original, puesto que en la mayoría de juegos la defensa es una acción en sí misma.

Sin embargo, hay un gran PERO: la evidente facilidad de los encuentros. Entre las muchas opciones disponibles, no hay ninguna para ajustar la dificultad de los combates, por lo que éstos acaban siendo rutinarios, cayendo en ese mal habitual que es usar siempre los mismos comandos porque, total, no necesitas calentarte mucho la cabeza.

Megadimension Neptunia VIIR 02

Hay algunas pocas excepciones a lo dicho en los encuentros con algunos bosses, o en partes del juego donde sólo manejamos a un personaje y las cosas se ponen cuesta arriba. Sin embargo, es una pena que ni los enemigos parezcan demasiado amenazadores ni supongan por lo general un reto. Por si fuera poco, la barra de vida se recarga completamente tras cada pelea.

En cierto modo, hablamos también en los combates del mismo tono ligero y poco serio que caracteriza a esta saga. Tampoco le busquemos tres pies al gato.

Resto de mecánicas

Fuera de los enfrentamientos, que se producen en las clásicas mazmorras, lo que hacemos en Megadimension Neptunia VIIR es recorrer una serie de caminos por el mapeado, que dan lugar a nuevas mazmorras, a ciudades o a simples eventos. Más adelante incluso podremos construir nuevos caminos nosotros mismos.

Megadimension Neptunia VIIR 06

Entre mazmorra y mazmorra, lo que tenemos son secuencias de conversaciones donde las chicas se ven fenomenal, con algunas ilustraciones a desbloquear mientras jugamos. Algunas de las imágenes presentan ese toque picante que ya he mencionado, con una extraña obsesión de las diosas por darse un buen baño tras cada combate. Como es de recibo, estas secuencias van narrando la historia, pero como ya he dicho se sienten muy simplonas, entretenidas hasta que te cansas y empiezas a pulsar el botón para que pasen cuanto antes. Al poco tiempo te das cuenta de que el 80% es morralla.

En el menú del juego hay de todo: gestión de objetos y de las luchadoras, un diccionario de términos, y más adelante los clásicos encargos de la guild y hasta el envío de exploradores, todo ello a su vez lleno de submenús que permiten un buen nivel de personalización. Francamente, creo que es un soberano rollo contarlo todo al detalle en un análisis, pero baste decir que tenemos elementos para dar y tomar, más de hecho que en otros grandes JRPG.

La excusa de la realidad virtual

Entre acto y acto, dentro de cada una de las tres historias de Megadimension Neptunia VIIR, vamos a ver una especie de programa presentado por las chicas, donde narran lo que va pasando en clave de broma. Después, invariablemente, tendrá lugar un evento especial con soporte para la realidad virtual.

A estos eventos entre actos hay que añadir los propios de cada una de las cuatro diosas, siempre en realidad virtual, que se desbloquean a medida que jugamos.

Megadimension Neptunia VIIR 07

El problema aquí es que se hace imposible dejarse las PlayStation VR puestas. Uno podría pensar en jugar las partes “normales” con las gafas, en modo cinemático, pero no tardas en descbrir que los 30fps del juego son una bomba de relojería para posibles (y más que probables) mareos.

Así que tendremos que alternar el modo normal en la televisión con las secuencias propias de realidad virtual, donde ahí sí el framerate se mantiene a 60 imágenes por segundo. ¿El resultado? Que probablemente no os pongáis el casco, ya que estas partes también se pueden ver en la tele.

Lo más seguro es que, una vez desbloqueadas, volváis a estas secuencias de realidad virtual, una detrás de otra, ya con las gafas puestas. Y lo haréis un rato y poco más, ya que hablamos de algo muy vago que no aporta nada: estamos en una habitación, en la “dimensión virtual”, y las diosas vienen a vernos y hablar con nosotros. Nuestra interacción, bastante ocasional, se limita a responder sí o no, aparte de mirar fijamente a las chavalas para que por lo general se ruboricen. También podemos personalizar algunos objetos de la estancia, logrando en teoría distintas reacciones de las chicas que sin embargo yo no he notado.

Megadimension Neptunia VIIR 08

Nada del otro mundo, nada verdaderamente interesante y, en definitiva, una excusa para relanzar el juego con el tema de la realidad virtual. Es muy importante aclarar que éste no es un título propio de PSVR, salvo que os interese la idea de escuchar a estas lolitas mientras nos cuentan chorradas, ya que al menos es cierto que hay bastantes de estas secuencias. Y es una pena, porque la idea de que las diosas vayan a ver al mismísimo jugador es interesante, pero no comentan detalles sobre el desarrollo del juego, no se aprovecha este recurso para meternos más en la trama.

Para enamorados del anime

Seguramente el punto fuerte de Megadimension Neptunia VIIR sea su llamativo apartado gráfico. Ya en mi análisis de 4 Goddesses Online destaqué este aspecto, a pesar de haberme parecido un juego desalentador. Pues bien, en este caso tenemos unos gráficos aún mejores en todos los aspectos.

Las mazmorras, sin presentar un apartado visual puntero, al menos lucen bien, con unas texturas que en este caso son decentes. El motor a 30fps, eso sí, no puede ser producto sino de una optimización más bien tosca, ya que este título debería mantenerse a 60fps con los ojos cerrados. Las transiciones a los combates son inmediatas, entendiéndose que luchamos en una parcela de la propia mazmorra, donde se mantiene la factura gráfica. De todo ello destacan por supuesto las chicas, que, sin ser nada del otro mundo, están bien modeladas y transmiten ese estilo anime tan característico.

Megadimension Neptunia VIIR 09

El resto, que vienen a ser los diálogos y las secuencias de la historia, son una gozada para cualquier amante del manga, con las muchachas sucediéndose sobre fondos de lo más coloridos, presentando además distintas expresiones que logran otorgarles mucha personalidad. Se agradece incluso que respiren, no siendo ilustraciones totalmente estáticas. Lo cierto es que estas diosas se hacen querer.

Como ya se ha dicho, podemos desbloquear todas las ilustraciones, eventos VR e incluso secuencias de la trama para revisionarlos después desde el menú de inicio. Y no son precisamente pocos.

Voces y música

El apartado sonoro de Megadimension Neptunia VIIR raya a buen nivel. Si, como yo, empezáis jugando con las PlayStation VR, es posible que elijáis las voces en inglés, ya que al menos entenderéis algo de lo que dicen las chicas y se hará menos necesario andar leyendo los subtítulos. Pero si, también como yo, acabáis dejando las gafas aparcadas, os recomiendo encarecidamente que escojáis el japonés para los diálogos, lo cual es mucho más fidedigno al estilo propio del juego. Ambas opciones de doblaje, eso sí, están muy logradas, y en esta ocasión además con una buena sincronización de los labios. Los actores de doblaje han hecho un muy buen trabajo.

Sobre la música, tenemos unas melodías pegadizas que se dejan escuchar, aunque no vamos a encontrar ningún tema emblemático de esos que serán recordados. Por cierto, también iremos desbloqueando la banda sonora para escucharla después desde el menú de inicio.

Megadimension Neptunia VIIR 10

Conclusión

Lo primero que debo decir es que con Megadimension Neptunia VIIR me he quitado aquel mal sabor de boca de 4 Goddesses Online, y eso ya es muy de agradecer.

Ahora sí, tenemos un juego con muchas virtudes: unos gráficos in-game decentes, unas ilustraciones alucinantes, buena música, una duración larga, bastante variedad, muchas opciones de personalización, estrategia en los combates, etc., etc.

Sin embargo, aunque sé que esta saga tiene una serie de defensores acérrimos (y seguramente poco objetivos), lo cierto es que sigue sin alcanzar la excelencia por dos factores fundamentales: una historia simplona y poco inspirada, y unas mecánicas de combate que caen en lo repetitivo.

Megadimension Neptunia VIIR 11

He jugado a muchos JRPG y por lo general he encontrado más “chicha” que aquí. Porque no se trata sólo de incluir muchas opciones y elementos, se trata también de que la base donde se cimenta todo sea sólida. Ojalá estas diosas encuentren una historia a la altura de su carisma, sólo tienen que tomarse un pelín más en serio a sí mismas; eso sí, sin dejar de lado la parte cómica, que una cosa no quita la otra.

Dónde Comprarlo

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