“¡Cuerpo a tierra soldado! ¡Todo el mundo a las trincheras! ¿Es que quieres que te maten?” Lo siento, acabo de volver de una guerra y aún oigo esas voces en mi cabeza. Ha sido una guerra dura, no sé si la conocéis. La Segunda Guerra Mundial la llaman, y de verdad espero que no haya una tercera. Y si es así, ¡que no cuenten conmigo! Por fin estoy en casa.

Sledgehammer Games y Activision nos sitúan esta vez en una de las mayores guerras de toda la historia de la humanidad, la Segunda Guerra Mundial, con el shooter en primera persona Call of Duty: WWII. Más en concreto, lucharemos en Europa en los años 1944 y 1945, los finales de esta guerra. En ella se enfrentaron numerosos países, pero se podían dividir en dos grupos: Aliados de la Segunda Guerra Mundial y Potencias del Eje. No es la primera vez que un juego nos sitúa en este escenario, pero puede que sea la primera vez que nos involucra tanto.

Por supuesto, no hay que olvidar qué juego es y que su modo campaña no es lo único que podemos jugar. El modo multijugador es un clásico ya, por no hablar del Modo Zombis. Hablaremos de todo ello a continuación.

La vida de soldado... ¿la vida mejor?

En el modo campaña, seremos Ronald “Red” Daniels y pertenecemos a la conocida 1ª División de Infantería, la división más antigua del Ejército de los Estados Unidos (conocida como The Big Red One). Pero no estamos solos, ya que la guerra une mucho a las personas. Con nosotros encontraremos más soldados, pero en concreto otros tres hombres serán nuestro mayor apoyo durante la aventura. Otros personajes se repetirán durante la aventura y acabaremos sonriendo cuando hagan sus apariciones para ayudarnos. Todos somos soldados rasos, luchando por nuestro país contra los alemanes, y sobretodo intentando no morir y que nadie muera. Que, por cierto, el fuego amigo está prohibido así que si se nos ocurre disparar a un compañero finalizará la partida del mismo modo que si hubiéramos muerto nosotros. Toda una muestra de compañerismo.

Viviremos la guerra a través de 11 capítulos, pudiendo escoger la dificultad de estos al inicio de cada uno y cambiándola a un nivel menor en pleno juego si nos atascamos. Los acontecimientos son lineales, pero entre un capítulo y otro pueden pasar un par de días o semanas. De cualquier modo, esto no hace que nos perdamos en su historia, pues está muy bien contada y es fácil de seguir en todo momento. En cada capítulo estaremos en una zona y tendremos distintos objetivos, y ello nos permite que en contadas ocasiones podamos incluso pilotar un tanque o un avión, o ser los responsables de destruir estos vehículos enemigos con distintas armas. Estas ocasiones ofrecen un soplo de aire fresco en la monotonía que supone avanzar por caminos disparando y ocultándonos. También hay que hacer una mención especial a cierto momento en que nos ponemos en la piel de una mujer, miembro de la resistencia francesa, y nos tendremos que infiltrar en un cuartel alemán con tan solo un pasaporte falso y buena memoria para aprendérselo, pues a veces nos harán preguntas.

En algunos momentos tendremos la opción de avanzar con sigilo, matando a enemigos en silencio por la espalda o con un silenciador en la pistola para llegar a un objetivo sin llamar la atención, aunque en todas estas ocasiones podemos tirar de munición y volvernos locos disparando. La decisión es nuestra, y habrá que cargar con las consecuencias.

De cualquier manera, el ritmo de juego es en su mayor parte muy rápido y frenético. Los capítulos avanzan en una mezcla entre juego y escenas donde no nos podemos mover, o tan solo podemos mover la cámara y casi es mejor ni hacerlo. Estas escenas pueden ser de conversaciones, pero otras veces será porque inevitablemente un enemigo se nos echa encima. Y aquí se nos presenta un pequeño evento quick time, en el que debemos mover el joystick izquierdo hacia un círculo y presionar un botón de la cruceta. Para ayudarnos, la cámara se ralentiza, pero el tiempo es limitado y si no conseguimos completarlo moriremos.

Avanzaremos casi siempre junto con nuestros compañeros y superiores, quienes serán los que nos manden avanzar hacia un lado u otro, atacar aquí o utilizar tal arma. Estos compañeros nos proporcionarán cada cierto tiempo suministros como botiquines, munición o granadas. En esta ocasión, la vida se restablecerá mediante el uso de botiquines, así que nunca hay que perderla de vista. Pero estos suministros también se pueden conseguir en el campo de batalla, y con tan solo pasar por encima de ellos ya los habremos recogido. Por supuesto, también podremos recoger las armas que los enemigos dejan caer o que están ya situadas en una cobertura (como rifles, grandes metralletas, etc.). Todo esto hace que el juego en sí sea muy dinámico.

Cada capítulo cuenta con unos coleccionables. Uno de ellos será ser bueno con los enemigos y en las ocasiones que se nos presente, perdonar la vida a algunos grupos de enemigos cuando se rindan. Pero claro, si vas disparando sin mirar (como ha sido mi caso) puede que no veas esta señal de rendición, y en el momento en que disparas una sola bala pierdes esta oportunidad. Otras veces, un enemigo estará atacando cuerpo a cuerpo a un compañero y deberemos salvarle rápidamente antes de que lo mate; o pueden estar heridos en el suelo y podremos arrastrarles a un lugar seguro para que no mueran. Todo esto es opcional, claro, pero como humanos que somos los jugadores se nos hará difícil evitar echar una mano a un compañero.

Otros coleccionables serán eso, objetos distribuidos por las zonas en las que avanzamos y que tendremos que buscar para recoger todos. Personalmente, no es un aspecto en el que me haya parado y de casualidad tan solo he encontrado dos en todo el juego, pero es algo que en mi opinión rompe ese ritmo rápido que le da emoción al juego, por lo que recomiendo olvidarnos de esto en un primer momento y volver a buscarlo si nos interesa en futuras partidas.

El modo Campaña en conjunto no es el más memorable que podamos jugar, pues se limita a seguir objetivos y su trama es bastante simple. Pero se nota que los responsables han querido destacar el compañerismo en esos momentos tan duros para una persona, y en este sentido han cumplido más que suficiente. Aunque no conozcamos mucho de los personajes, estaremos muy unidos a ellos durante todo el viaje y eso hace que nos preocupemos por ellos tanto o más que por nosotros. Al fin y al cabo, ellos son nuestro apoyo en momentos difíciles, e incluso podríamos decir que son hermanos. Este es el aspecto que destaca en el modo Campaña.

No te fies del vecino, puede que sea tu enemigo

Así es. Y no me refiero a porque tu vecino sea alemán (recordad que ya no estamos en 1944), sino, por supuesto, al querido modo multijugador. Ese modo de juego donde nos enfrentaremos a jugadores de todo el mundo defendiendo o atacando objetivos, o tan solo matando por los puntos. Como en anteriores entregas, tenemos multitud de opciones para jugar. Para empezar, podemos unirnos a una partida pública, crear una partida, jugar una partida igualada (aunque esta opción no estará disponible hasta el 1 de diciembre) o unirte a la liga mundial de Call of Duty.

En las partidas normales online, también podemos elegir el tipo de juego. Tenemos los tipos ya conocidos de otras entregas como el típico duelo por equipos, dominio, punto caliente o tomar la bandera, y en otra categoría (Extremo) subiremos el nivel de dificultad en los cuatro tipos de juegos disponibles, solo para valientes. Todo ello en 10 mapas disponibles que esta vez tienen ese toque de la guerra antigua y que ya es novedad en comparación con anteriores juegos.

Pero además de jugar a todas estas opciones, al entrar al modo multijugador apareces en un campamento con un personaje propio. En este modo, la visión es en tercera persona (aunque luego en las partidas vuelve a ser primera persona) y nos permite vivir como un soldado con tiempo libre (¿eso existe?). Así, al comienzo debemos elegir la división a la que queremos pertenecer de entre Infantería, Aerotransportada, Acorazado, Montaña y Expedicionario. Unas personas (reales) mediante unos vídeos nos explicarán las características de cada división. Y es que cada división tiene habilidades específicas y armas de bonificación, además de las otras armas de las categorías habituales. En el menú podemos organizar y personalizar nuestro equipo preferido para usarlo en las partidas, además de poder personalizar nuestro personaje cambiando únicamente su rostro. Y sí, podemos elegir ser una mujer. Punto positivo.

Además de esto, por todo el campamento podemos ir a ver nuestro correo, donde nos llegará el salario cada cierto tiempo y donde recogemos las recompensas que nos des. Podremos practicar con las armas en un área de tiro, o ir a la zona específica de los duelos uno contra uno. También habrá una Intendente que nos proporcionará contratos y colecciones. Los contratos son objetivos que aceptaremos de manera opcional por un precio y cada uno tiene un objetivo, un límite de tiempo y una recompensa si lo completamos. Las colecciones, por otro lado, se describen como el equipo que tienes y el que te gustaría tener. También encontraremos al comandante Howard con órdenes para nosotros. Estas órdenes también son opcionales, y nos marcarán un objetivo y la recompensa que recibiremos al completarlo. Al contrario que los contratos, las órdenes están disponibles por tiempo limitado (las hay diarias, semanales y especiales). A todo esto se une una lista de tareas pendientes, con otro tipo de objetivos como aceptar un contrato, pedir suministros y más. Al igual que lo demás, será opcional pero también nos proporcionará beneficios. Vamos, como para aburrirnos.

Una de las novedades para este modo multijugador es el modo Guerra, donde hay un fuerte elemento narrativo, y en el que dos equipos se enfrentarán en diferentes misiones inspiradas en algunas de las batallas históricas más conocidas de la Segunda Guerra Mundial. Estas misiones serán de asalto y defensa, y cada equipo estará en un bando de la guerra (Aliados y Fuerzas del Eje). Un equipo defenderá una posición mientras el otro cumple objetivos para poder avanzar. Esta es una apuesta muy interesante para el modo multijugador, ya que nos permite escaparnos de las típicas partidas online que también podemos encontrar en otros Call of Duty, y que además podamos estar en ambos bandos nos dará dos puntos de vista del mismo modo de juego. Sin duda, es obligatorio al menos probarlo.

De vuelta a las partidas online, a pesar de los problemas que parece que ha habido con los servidores y las conexiones que Activision ya está arreglando, yo no he tenido ningún problema en este aspecto. He jugado varias en varios tipos, y todas las partidas se han desarrollado sin problema. Puede que haya tenido suerte o que efectivamente Activision se ha puesto las pilas; en cualquier caso, la experiencia de juego es perfecta.

Nazis, zombis nazis

¿Quién iba a pensar que los zombis existían desde hace tanto tiempo? En este modo, que todo fan de Call of Duty seguro que conoce, nos vuelve a colocar en esa extraña situación en la que los zombis nos atacan. ¿Huiremos? ¡No! Les plantaremos cara aunque nos den miedo.

En este juego, el modo Zombis vuelve al terror y su diseño está basado en oleadas. Si somos nuevos, podremos completar un prólogo en el que nos enseñarán algunas cosas y estaremos solos. Después, las partidas se podrán jugar en cooperativo local u online.

Como he dicho antes, los enemigos vendrán en oleadas y no te creas que harán una fila para llegar de uno en uno. Será mejor que no te despistes de tu compañero ni dejes al descubierto tus espaldas, pues aparecen por donde menos te lo esperas.

Como en anteriores ocasiones, utilizaremos energía que conseguiremos matando zombis para recoger armas o mejoras, aunque esta vez no será posible construir barricadas para detener a los muertos vivientes. Ah, y la pala con la que empezamos tampoco es una mala opción si no queremos gastar balas contra un solo enemigo.

Su ritmo de juego es bastante rápido, no tendrás mucho tiempo para pensar antes de que vuelvan a aparecer los zombis, y creo que es algo positivo. Pero más allá de esto, este modo no destaca en gran medida en comparación con los anteriores. Si te gusta lo disfrutarás, porque en esta ocasión todo está más enfocado al terror de sus orígenes, pero no es lo que más destaca. He de decir que he jugado en su opción online y en la primera partida perdí la conexión por un error en el servidor. Pero confío en que pronto todos estos problemas sean cosas del pasado.

Ajustes técnicos

El apartado gráfico brilla, y nos ofrece unos gráficos casi de películas. Lo he jugado en una PlayStation 4 estándar con una tele no de las más nuevas, y no tengo ninguna queja sobre sus gráficos. Cumplen en todo momento y sin tiempos de carga, lo cual es más sorprendente. El tema del sonido es en lo que tengo más pegas. Los personajes estarán hablando en todo momento, otros gritando órdenes, pero siempre se oirá alguna vez. En mi casa nos son bienvenidos los sonidos altos, y mi sorpresa fue ver que a un volumen al que las voces se oyen a un volumen adecuado, de repente abre la boca nuestro personaje y se oye el triple de alto. En otras ocasiones, alguien grita a los lejos y le oímos más alto que el que nos está hablando al lado. Así que he jugado con el DualShock 4 en una mano y el mando de la tele en la otra. En esta ocasión he agradecido los subtítulos, que se pueden activar o desactivar a gusto, y prácticamente han sido mi guía. Aparece el nombre del personaje que habla, algo también muy importante si eres un desastre para las caras como yo y se te hace difícil diferenciar personajes. Por cierto, el idioma de las voces viene predeterminado y es algo que no podemos cambiar. Si tienes el juego español, el idioma es español para todo, así que no cuentes con las voces originales en esta ocasión. Al menos el doblaje no es del todo malo.

Los ajustes del juego también ofrecen una gran personalización, pudiendo cambiar los controles, la ayuda al apuntar y otros aspectos relacionados. También podemos ajustar el área de visualización para marcar los límites de nuestra pantalla y que nada se quede a medio mostrar. Incluso podemos activar un modo para daltónicos y ajustarlo a las necesidades de cada uno. Así, el juego es más cómodo y sobretodo accesible para más gente. Otro elemento a destacar es la vibración del mando, que se activa cuando disparamos, cuando un tanque pasa por al lado, en las explosiones… Siempre es correcto, y quizá podrían haber añadido algún sonido al altavoz del mando.

Qué decir de la duración. Mientras que la Campaña nos tendrá entretenidos durante una media de 7 horas, el tiempo que estaremos conectados al online o cooperativo mediante los otros modos son innumerables. Pero claro, esto nos hace depender mucho de internet y la opción del juego online, que quizá no todo el mundo tiene acceso.

Conclusión

Call of Duty: WWII nos lleva al pasado, y deja de lado esa trama futurista que ha estado tratando en los últimos títulos. Esto puede gustar más o menos entre los fans (según las ventas alcanzadas, ha gustado mucho), pero a mí parecer es algo que le hacía falta a la franquicia.

Su Campaña es bastante simple aunque cuenta una historia que consigue calar en el jugador. Es interesante de jugar aunque puede resultar monótono en algunas ocasiones. Pero es entretenido y desde luego transmite lo que quiere: los lazos de unión que se crean entre estos hombres que ponen su vida en peligro por un bien mayor. Para mi gusto, falta profundidad en este modo, quizá un apartado donde poder elegir y personalizar el arma o algo parecido.

El modo online no ha cambiado mucho, excepto sus ubicaciones y el innovador modo Guerra que ofrece aún más entretenimiento y un modo de juego para quienes se tengan muy conocidos los demás. El Modo Zombis regresa a sus orígenes con un toque de terror y algunos sustitos que te hace aguantar el aire y querer correr. Pero ambos ofrecen poca innovación, aunque sí horas y horas de entretenimiento.

Pero no todo lo juzgado en este momento es lo definitivo, pues llegará más contenido y se irá renovando cada poco para dar todo a los jugadores.

Otro punto que me ha llamado la atención es la incorporación de mujeres en diferentes ocasiones. Tanto en ese capítulo de la Campaña en el que controlaremos a una y muy importante como la opción de que nuestro personaje sea una mujer en el multijugador, se agradece que en estos pequeños detalles se vaya normalizando la presencia femenina. Por cierto, he visto poca de esta presencia en las partidas online. Mujeres del mundo, es hora de participar en una guerra.

Sí es verdad que se pueden detectar algunos bugs, e incluso en un par de ocasiones durante la campaña me ha tocado reiniciar el punto de control porque llegaba al objetivo y el juego no avanzaba. Y su conectividad online también necesita un poco de tiempo para estar óptimo. Por suerte, todo esto tiene solución, solo hace falta paciencia.

En definitiva, si te han gustado los anteriores Call of Duty y buscar un buen multijugador con el que pasar horas, no lo dudes. Pero ofrece poco más que se pueda destacar.

Dónde comprarlo

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