En noviembre de 2014 llegó a las tiendas Assassin's Creed Rogue, la última entrega de la saga para PlayStation 3 y Xbox 360, un juego que seguía la estela de éxito que dejaron los barcos de Assassin's Creed Black Flag con una nueva historia, nuevos personajes y mucho ron.

Os cuento esto porque quizás a más de uno se le escapó el lanzamiento del juego en su día, y es que coincidió en el tiempo con el gran estreno de Assassin's Creed Unity, el debut de la saga en nuestras flamantes PlayStation 4, y uno se dejó embriagar por el aroma a cruasán de París, con su revolución francesa, su guillotina, su Napoleón Bonaparte y sus gráficos de nueva generación y dejó a Rogue muy olvidado.

Es por eso por lo que tal vez a muchos les resulte interesante la llegada de Assassin's Creed Rogue Remastered, una ocasión perfecta para jugar al título que se quedó en el tintero y que bien merece una revisión.

Así que levar anclas, armemos el navío y preparémonos para surcar los siete mares. Arrr.

Asesino de Asesinos

Lo primero que llama la atención de Assassin's Creed Rogue Remastered es que el protagonista no es un Assassin, sino un Templario, así que podremos meternos en la piel del gran enemigo por primera vez en la saga y eso es algo que otorga al juego de un atractivo ineludible.

Seremos Shay Patrick Cormac, y al principio formaremos parte de la hermandad Assassin, pero por azares del destino terminaremos en el bando enemigo y conoceremos nuevos detalles sobre los Templarios y su eterna lucha, y de sobra conocida.

El título se sitúa en Norteamérica durante la Guera de los Siete Años (1756-1763) y nos llevará por parajes tan singulares como el Valle del Río Apalache, Nueva York o el Atlántico Norte, en el que nos enfrentaremos a parajes helados y peligrosos glaciares.

Se trata del fin de la trilogía de la América Colonial y tendremos ocasión de reencontrarnos con personajes de Assassin's Creed III como Haytham Kenway o Achilles, también con Adéwalé de Assassin's Creed IV: Black Flag e incluso con varios personajes de Assassin's Creed Unity.

Además de ello, podremos participar en secuencias en Abstergo, el complejo detrás de todos estos "viajes sanguíneos" y cuya presencia se fue diluyendo en las siguientes entregas como Assassin's Creed Syndicate y Assassin's Creed Origins. El hecho de seguir profundizando en esta organización es otro motivo que hace que el título sea interesante para aquellos fans de la saga que no hayan podido disfrutarlo en su día, y aunque no hay grandes revelaciones, sí ofrece más detalles interesantes que os gustará conocer.

Perdiendo el factor sorpresa

Tal vez lo que produjo en su día una falta de interés por el juego puede ser ahora una ventaja, y es que Assassin's Creed Rogue aprovechó claramente el éxito de Black Flag para reutilizar gran parte de sus mecánicas y contenidos en una nueva historia en la que casi todo era demasiado familiar y reciente.

Es algo muy similar a lo que hizo Ubisoft en su día con Assassin's Creed: La Hermandad y Assassin's Creed Revelations, y teniendo en cuenta que también preparaban Unity no les culpo de nada. El hecho de que hayan pasado varios años hasta este Assassin's Creed Rogue Remastered hace que muchos jugadores - yo entre ellos - quieran volver a piratear los mares por el gran recuerdo que nos dejó Black Flag en su día.

¿Qué encontramos en Rogue? Un Assassin's de los de siempre, así que tampoco me extenderé en detalles. Tendremos un mapeado extenso lleno de puertos que esconden decenas de misiones secundarias como rescatar civiles para que se unan a la tripulación, búsquedas del tesoro, atalayas que desbloquear, mejoras del barco y de nuestro equipamiento, misiones de espionaje, sigilo y ese sistema de combate que ahora nos parece tan arcaico pero que funcionaba relativamente bien, basado en el ataque y el contraataque.

Las mejoras de Assassin's Creed Rogue Remastered

No me quiero extender en la descripción de Assassin's Creed Rogue porque es un juego de hace cuatro años y puede que muchos ya lo hayáis jugado. Me centraré en las mejoras que nos trae esta versión remasterizada, a ver si Ubisoft ha querido volcarse en darle un aspecto totalmente distinto al juego o estamos ante lo mismo pero con los añadidos justos.

Me temo que es más bien lo segundo, y es que Assassin's Creed Rogue Remastered ofrece lo mínimo que se le puede pedir a una versión remasterizada y no da mucho más.

¿Y qué ofrece? Pues tenemos un juego que funciona a una tasa de imágenes totalmente fluida - 30 fps 100% estables, cosa que en su día ya os imaginaréis que no era así - y con una resolución de 1080p en Xbox One y PS4 y 4K en Xbox One X y PS4 Pro, así que tanto en resolución como en frames por segundo el título cumple con creces.

También cuenta con detalles como texturas en alta definición - sólo algunas - y pequeños efectos visuales mejorados respecto al original, pero después de disfrutar de Origins volver a ver esos rostros de escasa animación facial o texturas de vegetación planas canta, y tal vez cante todavía más al verlas a 4K y sin mejoras.

Sensaciones jugables

La jugabilidad de Assassin's Creed Rogue Remastered está intacta respecto al original, así que si tenéis recuerdos de los últimos Assassin de la pasada generación sabréis de lo que hablo.

Además del ya mencionado sistema de combate, que se apoya en las espadas y los trabucos además de las clásicas cuchillas ocultas, el parkour es bastante automático pero funciona como de costumbre, con sus aciertos y sus momentos de hacer algo que no queríamos.

El juego sigue ofreciendo las suficientes actividades y misiones como para tenernos entretenidos durante semanas e incluso meses. La historia principal si vamos rápido nos pueden llevar 10-12 horas, pero con la cantidad de misiones secundarias y coleccionables la cifra se puede ir por encima de la veintena.

En definitiva, un juego al que se le notan los años pero igualmente disfrutable, especialmente si eres fan de la saga.

Gráficos y sonido

Como ya hemos explicado, el apartado gráfico cumple para ser un juego de 2014 realizado para una consola de generación anterior, y sus mejoras gráficas en este remaster son las suficientes como para poder disfrutar del juego sin que nos sangren demasiado los ojos.

Además otro aspecto a destacar es que, gracias a la potencia de esta generación, los tiempos de carga entre misiones son realmente bajos, y eso unido a su fluidez a prueba de bombas - literalmente - hace que jugar sea muy gratificante.

Respecto al sonido de nuevo encontramos mucha continuidad respecto a Black Flag, así que podemos esperar escuchar sonidos muy fieles al gobernar el barco, contundencia en las batallas navales y también en tierra cuando choquen las espadas.

Además de un buen doblaje al castellano, como suele ser habitual en la serie, me ha gustado ver que el juego tiene muchas canciones piratas, que podemos escuchar en el barco y también en las tabernas que visitemos, y eso le otorga una ambientación muy curiosa que se agradece.

Conclusión

Ubisoft no se ha esforzado demasiado en hacer de Assassin's Creed Rogue Remastered una remasterización memorable, limitándose a ofrecer las mejoras habituales en forma de resolución, tasa de frames y pequeñas mejoras en texturas y efectos.

Por suerte el juego cuenta con un poderoso aliado, ese fan que no lo pudo disfrutar en su día y que ahora tiene una ocasión única de hacerlo en su PS4, para no perderse la sensación de manejar a un templario y no perderse una historia bastante notable.

Puede que la compañía francesa haya podido hacer más, y puede que al juego se le noten los años, pero eso no quita que sea un título muy disfrutable para todos esos fans de una saga que nos ha dado y nos seguirá dando alegrías. ¡Brindemos con ron por ello!

Dónde comprarlo

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