En un mundo de modas en el que las compañías rara vez se salen del guión por temor a unas perdidas que puedan resultar fatales para el futuro de sus estudios, todavía quedan valientes que se arriesgan, que llevan sus ideas hasta el final aunque no sean la tendencia. A Way Out es un ejemplo de lo que hablo.

Y es que un día el equipo sueco Hazelight, liderado por el polémico Josef Fares, presentó una idea a Electronic Arts, una idea valiente, casi más propia de otro tiempo, un juego que presentase una aventura 100% cooperativa, bien a pantalla partida o bien online con un sistema de invitaciones que podía ser compartido de forma ilimitada a cualquier amigo que nos quisiera echar una mano.

Y si mérito tuvo Hazelight, Electronic Arts supo recoger el guante y supo ofrecerles el apoyo que necesitaban dentro de su categoría EA Originals para que el proyecto siguiera adelante. Ese proyecto se llama A Way Out, ya está en las tiendas y te contamos nuestra valoración sobre él.

Vincent y Leo, Leo y Vincent

La historia de A Way Out al principio se presenta de forma simple, dos tipos de personalidades muy distintas se unen para escapar de la cárcel, sabiendo que si lo hacen juntos tienen más posibilidades de salir. Sus nombres son Vincent y Leo.

Ambos, como decimos, son muy distintos, Leo es más joven e impulsivo, más directo, le gustan las cosas rápidas, sin complicaciones, mientras que Vincent es más viejo y calmado, y siempre cree que, si se puede superar discretamente un problema, mucho mejor.

Uno pensaría que el juego consiste únicamente en escapar de prisión, ver cómo los personajes van ganando una confianza inicial que no tienen y fin de la historia, pero el juego ofrece más, mucho más.

Sin entrar en detalles, porque uno de los puntos fuertes del juego es su gran guión, que no sólo empieza fuerte sino que va in-crescendo manteniéndose siempre alto y con algunos picos espectaculares y un gran final, digamos que hay mucha más vida tras los barrotes, y que conoceremos bien a los protagonistas, sus motivaciones y sus deseos. Se nota que su responsable, Josef Fares, es escritor y director de cine, pues A Way Out es una gran película de acción interactiva.

La historia tiene de todo, momentos de humor, diálogos memorables, situaciones que ni la mejor película de acción de Hollywood, humor, familia... y por supuesto confianza, cómo se va forjando una amistad entre los dos protagonistas, entre dos tipos que no se fían casi de nadie en esta vida.

¿Y la duración? Podemos completar el juego en unas seis horas, que pueden subir a 7-8 si nos dedicamos a explorar bien el mapeado y aprovechar todas sus posibilidades (algo necesario si queremos conseguir los trofeos, pues ya os adelanto que por completar capítulos o la campaña completa no dan nada).

Puede parecer corto, pero es un juego claramente rejugable, ya no sólo por la gracia de compartir una magnífica experiencia con varios amigos y escoger al otro personaje, sino por la cantidad de decisiones que tienes que tomar y que pueden cambiar con cada partida.

Coopera, y también compite

He probado unos cuantos modos cooperativos en mi vida y he de decir que estamos ante el juego cooperativo definitivo. Así de simple.

Hazelight Studios ha centrado toda la aventura en la cooperación, y eso hace que el juego sea imposible ser jugado por un solo jugador, ni siquiera con una IA controlada por la consola. Habrá quien piense que no contar con esa opción sea un punto negativo, o no tenga amigos con quien probar A Way Out. Si es así es una lástima, pero el juego ha sido concebido para dos jugadores y cualquier otra fórmula no habría tenido sentido.

Aunque juguemos online siempre veremos la pantalla partida, y si bien en muchos momentos estemos "a lo nuestro", también habrá otros en los que tocará coordinarse con el compañero en acciones como agarrarse, pasarse algo, derribar juntos una puerta o darle la clave que sólo vemos nosotros desde nuestro punto de vista (o viceversa).

Esa famosa pantalla partida es dinámica, a veces se muestra horizontal, otra vertical, en ocasiones desaparece, se hace más grande para uno u otro jugador en función del contexto, pasa a ser cenital, o en vista 2D... el punto de vista nunca deja de sorprendernos y siempre está elegido de forma magistral.

Las acciones para cooperar también están muy bien pensadas y van más allá del habitual "súbeme a esta plataforma elevada que una vez arriba te tiendo la mano", de hecho esta acción aparece sólo un puñado de veces y cada una se resuelve de forma distinta a la anterior. En ocasiones tendremos que coordinar movimientos en situaciones muy variadas, entretener y robar, abrir fuego para dar cobertura, conducir y disparar... algunas serán situaciones de pura tensión, otras de sigilo, y a veces pasar de una a otra es cuestión de segundos.

Aunque A Way Out cuenta con muchas escenas más o menos guiadas con una única ruta, también ofrece varios caminos y muchos momentos en los que se nos presenta un escenario abierto con montones de actividades por hacer, desde hablar con civiles que a veces aportan algo más a la historia (pudiendo escoger el diálogo entre dos opciones) hasta beber agua, hablar por teléfono, hacer sonar un timbre, encender un ventilador... y lo mejor, una gran selección de minijuegos con los que quitarnos la careta de amable colaborador y picarnos con nuestros amigos a ver quién consigue ganar o más puntos.

Aquí tenemos desde dardos, baloncesto, tiro de herradura, beisbol hasta echar un pulso, mantener el equilibrio o jugar una partida de conecta-4. Esa ruptura de la cooperación para mi gusto le viene perfecta al juego, y además la mayoría de logros están en este tipo de actividades, así que no faltarán razones para explorarlas y disfrutarlas.

¿Una pega? Es un juego muy sencillo, está pensado para que lo pasemos bien, para que narrativamente tenga ritmo y no sea demasiado dificultoso avanzar, además si fallamos en alguna decisión rápida o caemos en un tiroteo (que pasará) el juego cuenta con una ingente cantidad de puntos de control para volver casi al mismo sitio. No me parece mal que lo hayan ideado así, al final la propuesta es muy divertida, pero tal vez un segundo nivel de dificultad donde los tiempos estuvieran más ajustados o el daño de la CPU fuera mayor tampoco hubiera sobrado.

El Pase Amigo

Como decimos, el juego está pensado para jugarlo con un amigo, ya sea en la misma consola o a través de internet. En lugar de obligar a que los dos jugadores se compren el juego, Hazelight ha empleado un método que me parece todo un acierto, y que es una rareza en la industria por los tiempos que corren.

Y es que únicamente se necesita que un jugador tenga el juego, mientras que el resto de amigos pueden descargarse la versión de prueba en la Store. Basta con que el dueño del juego inicie una partida y mande una invitación a cualquiera de nuestros amigos para poder compartir el título al completo.

No se necesita ningún código como se pensó en un principio, simplemente mandar la invitación a cualquiera de nuestros contactos, y sin límite de usos, nuestro amigo o amiga lo juega y en cualquier momento podemos dejar esa partida y empezar otra con otro amigo o amiga.

Eso, unido a que el juego sale a la venta por 29,99 euros, lo hace una opción más que irresistible para que podamos disfrutarlo en compañía, y además, como ya hemos explicado, es un título que se presta a ser rejugado para tomar otras decisiones o ver todos los finales (tiene dos).

Un "indie" muy triple A

Hablamos ahora de los gráficos, y es que A Way Out desde el principio sorprendió por su apartado visual, con un estilo artístico muy peculiar y unos personajes que rozan la caricatura.

Aunque las expresiones faciales de los protagonistas sean más que notables - no tanto las de los secundarios, claro - y la mayoría de animaciones son sublimes, quizás lo más destacado del juego sea su iluminación, magnífica tanto en interiores como en exteriores, además de la cantidad de detalles que es capaz de mostrar, algunos de ellos interactivos.

Más merito tiene aún si tenemos en cuenta que el juego siempre tiene que mostrar todo por duplicado (incluso a veces por triplicado) multiplicando la cantidad de recursos a consumir, y todo lo hace sin perder la calidad visual que nos regala el juego en toda su aventura.

La IA de los enemigos es muy correcta, y si hay que ponerle un "pero" al apartado técnico lo podemos hacer con las caídas de frames, y es que en determinados momentos (en exteriores y con mucha vegetación) el juego da ciertos tirones, que molestan pero no estropean en nada la experiencia. Sólo pasan en la versión de PS4, pues como ya os contamos en PS4 Pro gracias a la opción de mejorar los fotogramas la cosa mejora ostensiblemente.

En cuando al sonido el juego cuenta con una buena banda sonora, que sabe mezclar temas de tensión con otros más relajados o melancólicos según el momento, y a nivel de efectos de sonido también cumple con creces.

Como dato curioso, cuando estamos explorando y cada jugador tiene una conversación con un personaje distinto, sólo la voz del primero que habló se escucha alta y la otra baja, salvo que la conversación del otro sea más importante, pero nunca se entremezclan y los textos de ambas se pueden leer sin problemas.

Las voces sólo están en inglés con subtítulos en castellano, y como suele pasar en los juegos de EA, el tamaño del texto de los subtítulos es ridículamente pequeño (esperemos que los aumenten con algún parche) pero el juego se sigue muy bien y las interpretaciones de todos los personajes son geniales en su idioma original.

Conclusiones

Creo que A Way Out es uno de los tapados del año, un juego que ha llegado sin hacer ruido y consigue no sólo entretener y ofrecernos una aventura llena de emoción y risas cooperativa, también aportar algo nuevo al género, y eso es algo de lo que muy pocos juegos pueden presumir.

El que obligue a jugarlo en compañía puede hacerle perder jugadores, y se le puede tachar de corto, fácil o incluso con algunos problemas de framerate. Pero yo me pregunto... un juego pensado para que te lo pases con un amigo... ¿tiene sentido que nos dure 15 horas y nos cueste 70 euros?

Para mi es una obra que ofrece una clase maestra de cómo deberían ser los juegos cooperativos, con un guión y un ritmo brutales, que no deja de sorprender por su cámara y sus situaciones y que hace que te cuestiones si realmente Hazelight Studios sólo está formado por unos 40 trabajadores.

Si a esto le sumamos su precio reducido y la posibilidad de compartirlo con todos los amigos que queramos, no puedo hacer más que recomendar su compra.

Dónde comprarlo

[aawp box='B078X1W7BC']

Reseña
Nota final
9.5
Artículo anteriorFar Cry 5 se puede terminar en tan solo diez minutos
Artículo siguienteSanta Monica Studio explica cómo rodó God of War en una sola toma
analisis-a-way-outHacer un juego cooperativo a estas alturas no es fácil, lograr que nos sorprenda aún menos, pero Hazelight Studios consigue embarcarnos en una montaña rusa de emociones sentando unas bases que ojalá otros estudios tomen en cuenta. Si tienes un amigo para jugarlo, tienes un tesoro.