Ryan Hernández, un joven hacker de tan solo 21 años, ha sido condenado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos a tres años de prisión y una multa de 259.323 dólares por sus actos de piratería contra Nintendo of America.
En muchas ocasiones este tipo de actos quedan impunes, pero en el caso de Ryan no ha sido así, y la justicia americana ha querido aplicarle una dura condena que espera que sirva como golpe de efecto para que otros se lo piensen dos veces antes de actuar.
Ryan Hernández irá a la cárcel por piratear a Nintendo
Su recorrido empezó en 2016, con 16 años. Mediante técnicas de phishing consiguió robar las credenciales de algunos empleados de Nintendo y consiguió acceso a archivos confidenciales donde se hablaba de la consola híbrida que no había sido anunciada aún, la Nintendo Switch, y la filtró en foros online. No se sabe exactamente cuántos daños le ocasionó a la compañía porque aún con las filtraciones se han vendido 68.3 millones de consolas a día de hoy.
Debido a su minoría de edad, Nintendo no emprendió acciones legales hasta un año después, con el compromiso de que Ryan dejaría de intentar piratear y filtrar la información de la empresa. Sin embargo, siguió con sus acciones entre 2018 y 2019.
En junio de 2019 el FBI se presentó en la casa del joven y requisó todo sus equipos electrónico para evitar sus acciones. Además en estos dispositivos se encontró material pornográfico de menores.
En octubre el Departamento de Justicia de Estados Unidos declaró a Ryan Hernández culpable y fue condenado a tres años de prisión y a indemnizar a Nintendo con una multa de 259.323 dólares.
Este es uno de los ejemplos de cómo Nintendo está persiguiendo legalmente a los hackers para intentar blindar la información confidencial interna. Muchas veces es muy difícil de detectar porque, aunque en este caso el condenado se jactaba de sus actos por redes sociales, hay muchos intentos de pirateo que no salen a la luz.
