Hablar de DONTNOD Entertainment es hablar de Life is Strange y de su secuela, que atrajo la atención de todos durante la pasada Gamescom. Pero no es el único juego que se cuece en las cocinas del estudio francés. Twin Mirror fue otro de los títulos que pudimos probar en la feria alemana en el stand de Bandai Namco.

Se trata de un juego que de nuevo apostará por el formato episódico con tres capítulos y que arrancará con Lost on Arrival a principios de 2019. Nos pusimos a los mandos para probarlo y os contamos qué nos ha parecido:

Twin Mirror: Nuestras decisiones definirán quiénes somos

Nos metemos en la piel de Sam, un periodista que vuelve a su antiguo pueblo, Basswood, al Oeste de Virginia, un regreso al antiguo hogar donde trabajamos, donde encontramos el amor, y que ahora vuelve a nuestra vida para asistir al funeral de un amigo.

Nos despertamos en una habitación de hotel sin recordar nada, con una camiseta arrugada y manchada de sangre en el baño, una sangre que no es suya…

Sam es… peculiar. Cuenta con una mente privilegiada y un transtorno mental que le permite ver una imagen de sí mismo imaginaria, más pedante, que le habla y le hace sugerencias, ya será cosa nuestra hacerle caso o no, porque nunca sabremos si nos quiere ayudar o perjudicar.

Otra característica de su trastorno es la posibilidad de construir un Palacio Mental, un lugar fragmentado al que puede acudir para reconstruir lo que pasó y que se irá completando a medida que vayamos lanzando hipótesis, reconstruyendo la acción y encajando las piezas.

En la demo nos despertábamos en la habitación de hotel con una resaca importante y unos golpes en la puerta nos avisan sobre la obligación de dejarla libre en 10 minutos. Nuestro “twin” o gemelo imaginario nos aconseja no entrar en la habitación, coger la bolsa de viaje, irnos a casa y no mirar atrás. Pero lo ignoramos, entramos y nos encontramos la camiseta y la sangre. ¿Qué ha pasado?

La reconstrucción de los hechos

La jugabilidad del título se basa en ir recorriendo la habitación y el baño, fijarnos en los objetos y las posibles acciones con ellos y elegir la combinación de actos que pensamos que hicimos la pasada noche.

Todo se basa en la observación, la deducción, por ejemplo creer que primero nos tumbamos en la cama, luego fuimos al WC y más tarde nos miramos al espejo, o tal vez antes consultamos el móvil y algo en él nos hizo arrojarlo con furia contra la pared.

Las deducciones correctas irán dando forma al Palacio Mental, nos abrirá nuevos caminos, alzará nuevos puentes y descubriremos nuevos objetos y opciones que arrojarán algo más de luz. Cuando todo encaje veremos una recreación de lo sucedido y descubriremos algo nuevo que nos abrirá nuevas líneas de investigación.

Lo importante en el juego y sobre lo que el estudio hizo mucho hincapié fue en el hecho que las decisiones no serán correctas o incorrectas, simplemente serán las tuyas. Tendremos a un protagonista normal en muchos aspectos, irónico, con problemas con el alcohol, nada del típico héroe.

En Twin Mirror se nos invita a explorar y a decidir, y se nos indica que algunas decisiones tendrán consecuencias. Antes de dejar la habitación nos preguntan si queremos dejar en la habitación la camisa con sangre o llevarla con nosotros. ¿Qué es lo mejor? Decisiones difíciles de tomar, nada evidentes y que otorgarán al título un componente rejugable importante.

Apartado visual

Como suele suceder con los juegos de Dontdot, Twin Mirror no es ningún portento gráfico ni podemos esperar unas texturas ultradefinidas ni una cantidad de efectos de postprocesado que nos dejen sin aliento, pero al juego no le hace ninguna falta.

El aspecto gráfico del juego está muy en la línea con lo visto en Life is Strange, una buena representación de los personajes y sus expresiones, para reflejar lo que sienten en cada momento, tal vez un punto por encima de sus trabajos anteriores, suaves animaciones y un detalle notable en los objetos que encontramos en cada nivel.

Quizás lo que más destaque sea el palacio mental y cómo vemos la realidad fragmentada, incompleta. El título jugará mucho con ese concepto, la mente, la dualidad, alcanzar el conocimiento e ir recomponiendo los recuerdos como piezas de puzle, y la representación de estos conceptos se reflejan de manera perfecta en Twin Mirror.

Conclusión

Aunque creo que Dontnod debería haber ofrecido algo más alejado de los conceptos de Life is Strange con las decisiones y sus consecuencias, entiendo que sigan creciendo a partir de una jugabilidad que dominan y ofreciendo los cambios suficientes para que se sienta un juego diferente y atrayente.

Twin Mirror tiene buenas ideas, y su historia pinta interesante, así que habrá que probar el primero de sus episodios para saber si logra engancharnos tanto como lo hicieron Chloe y Max en su día. Va a ser difícil.

Lost on Arrival, el primero de sus tres episodios, llegará a principios de 2019 a PlayStation 4, Xbox One y PC.