A todo el mundo le gusta de vez en cuando un reto, pero no a nivel mecánico o de habilidades como nos proponen otros juegos, sino uno intelectual. Para esos momentos recurrimos a juegos de puzles, dónde nuestro imaginación y nuestro cerebro están puestos a prueba.

El principal objetivo de este tipo de juegos es el de crear un verdadero desafío para el jugador, a la par que contar una buena historia que enganche y que haga que quieras continuar. El problema es que algunos de los títulos que podemos encontrar en este género se hacen pesados o incluso frustrantes.

Podemos encontrar juegos de alta calidad  a nivel narrativo como The Gardens Between y otros realmente innovadores como The Pedestrian. El problema de estos es que se pueden hacer realmente cortos.

A día de hoy, se podría decir que hay 3 juegos que están un paso por delante en cuanto a esta temática se refiere: La saga Portal, The Talos Principle y The Witness.

Nuestro futuro, en la luna

Esta vez Mighty polygon son los encargados de traernos este nuevo reto futurista en el que para avanzar a través de la historia tendremos que poner en marcha nuestras neuronas y aprender un poquito de física. Y es que en Relicta tendremos que comprender cómo funcionan dos de las fuerzas fundamentales; la fuerza magnética y la fuerza de la gravedad y así utilizarlas a nuestro favor.

Relicta es un juego en primera persona en el que nos meteremos en la piel de una científica a principios del siglo XXII. Estaremos viviendo junto a otro grupo de científicos en la base Chandra, que se encuentra la Luna, para realizar experimentos sobre física.

Después de una breve introducción en la que vemos que ha habido un gran problema en la base lunar, el juego nos lleva tiempo atrás a una zona boscosa en el exterior de la base donde dan lugar unos primeros puzles a modo de toma de contacto.

Lo primero que nos sorprende es lo bonito que se ve el exterior. No es la típica idea que tenemos de la luna ya que no esperas encontrarte con árboles y ríos en la luna. Además se han creado condiciones climatológicas para que pueda llover y nevar.

Tenemos que tener en cuenta que es una luna habitada, nos situamos entre los años 2118 y 2120. El ser humano ha avanzado suficiente tecnológicamente para poder hacer viajes espaciales hasta allí y construir bases.

Un poquito de ciencia y un poquito de física

Todo el tiempo estaremos comunicándonos  con una inteligencia artificial a la que le llaman sys, diminutivo de sistema, que es la encargada de administrar toda la base. Esta IA nos acompaña durante la aventura y nos hablará sobre el equipo que llevamos, para que sirve y como utilizarlos para sacar su máximo potencial.

Obviamente el juego nos proporciona la información sobre cómo trabajan las 2 fuerzas de las que hemos hablado antes. En resumidas cuentas, la fuerza de gravedad es la fuerza que hace que dos cuerpos con masa se atraigan (como hace la tierra con las personas) y la fuerza electromagnética que es la reacción que se genera cuando hay partículas cargadas de manera eléctrica. Esta fuerza puede ser de atracción (positivo + negativo) o de repulsión (ambas cargas iguales)

El equipo del que contamos son un par de guantes que nos permiten hacer levitar pesados cubos y transportarlos de una zona a otra. A estos cubos magnéticos podremos darles 3 características diferentes, darles polaridad positiva, darles polaridad negativa y hacerlos levitar. Para facilitar la información, si tiene polaridad negativa, el cubo tomará un color azul. Si es positiva, entonces se pondrá de color rojo. Es un toque sencillo y obvio, ya que es como se ha interpretado siempre, pero que se agradece y facilita la información en pantalla.

Hasta donde hemos podido probar hay puzles muy interesantes en los que tendrás que pensar cómo desbloquear unos paneles que corta el paso con ayuda de los cubos. Hay dos tipos de paneles, unos que te dejan pasar a ti y no a los cubos y otros que no os dejan pasar a ninguno de los dos. El nivel de complejidad de los puzles va aumentando a medida que vamos avanzando. Con alguno hemos tenido que pensar un poco más y repasar las cosas de las que disponemos, pero sin ningún problema mayor.

Podemos deducir que habrá distintas zonas en la historia y que cada una de ellas nos presentará nuevos retos y nuevas formas de aprovecharnos de la física.

Un trasfondo histórico dentro de la historia

Durante la aventura iremos descubriendo información de lo que ha pasado entre el 2020 y el 2120 a nivel de política y todos los mensajes y coleccionables que encontremos los podremos ver en nuestra PDA.

En la PDA podremos seguir tanto este contexto político como los mensajes que nos mandan tantos nuestros compañeros de trabajo como nuestra hija. Los mensajes que nos llegan de la tripulación suelen tener en algún punto un toque sarcástico o gracioso que se agradece. El seguimiento de cada historia será sencillo ya que están apartados diferentes, cosa que se agradece.

A nivel técnico, los controles son sencillos y precisos. No hemos tenido ningún problema mayor durante el tiempo jugado. Visualmente como hemos dicho, es bonito de ver, pero no es ningún portento y quedan cosas por pulir.

Y en cuando al apartado sonoro, se siente bastante logrado tanto los efectos de sonidos de los objetos, como las voces (en inglés). Además cuenta con una relajante música que te ayuda a concentrarte mientras resuelves cada uno de los puzles.

Hemos podido deducir que aunque la investigación que estamos realizando probablemente vaya a ser el hilo principal de la historia, nuestra hija y el contexto político también serán parte importante de esta.

Conclusiones finales

Nos hemos quedado con ganas de saber más sobre la historia, sobre lo que pasó y sobre lo que está pasando. Nos hemos quedado con ganas también de continuar resolviendo puzles y esto es algo muy bueno, porque no todos los juegos de este género consiguen engancharte y este lo hace.

Hemos sentido que este juego tiene gran potencial por sí solo. Puede ser entretenido, con una buena historia y con puzles que son satisfactorios.

Más allá de esto, puede ser un buen titulo que llevar a las VR, ya que es con las manos de nuestro protagonista con lo que hacemos todo y puede convertirse en una experiencia más inmersiva.