He de reconocer que cuando en el State of Play de mayo se presentó como exclusivo de PlayStation 4 Predator: Hunting Grounds no me lo esperaba.

No me considero un gran fan del famoso Depredador, pero sin duda me pareció todo un puntazo que Sony se hubiese hecho con una licencia tan importante, y estuviera desarrollando un título que aparentaba ser ambicioso en sus primeros vídeos.

Por eso la cita con él en la pasada Gamescom era ineludible, aunque cualquiera intenta escaquearse de Predator... es mejor tenerle contento porque como hemos podido comprobar en nuestra propia piel, no se anda con tonterías.

¿Quieres ver qué nos pareció nuestra partida con Predator: Hunting Grounds? Aquí te ofrecemos un vídeo con gameplay inédito y comentado por un servidor, y también texto donde lo explicamos todo con detalle. Si quieres saber más... ya sabes, ¡Sigue leyendo!

Predator se apunta a la asimetría

Una de las principales características de este Predator: Hunting Grounds es que IllFonic, el estudio encargado de su desarrollo, ha cogido las ideas del popular juego asimétrico (con ejemplos tan reconocidos como Evolve o Dead by Daylight) donde varios jugadores se enfrentan a un solo individuo más poderoso o con un mayor armamento/protección y lo han sabido adaptar a la perfección.

Y es que si hablamos de superioridad aplastante contra soldados armados hasta los dientes sin duda Predator da muy bien el perfil para este particular juego del gato y el ratón... ¡menudas garras tiene este gato!

De ahí que a priori la idea parezca perfecta, un shooter multijugador asimétrico basado en una franquicia de éxito, que nos lleva a las sofocantes selvas de América del Sur, donde un grupo de soldados de élite tendrán que coordinarse para completar con éxito las diferentes misiones que se les propone.

Y es que el juego no trata de poner a cuatro tipos y a Predator en un mismo mapa y ya está. En realidad nosotros como soldados tendremos que completar distintas misiones paramilitares: robar unos documentos, asaltar un puesto militar, destruir unos suministros... y por supuesto tendremos que liquidar a los insurgentes, que también estarán fuertemente armados y no nos lo pondrá fácil.

Claro que habrá un quinto jugador que controlará al Predator, y su principal misión será liquidar a los otros cuatro soldados, a los insurgentes también - si él quiere, aunque son una interesante distracción - y en definitiva, a todo el que se ponga en su punto de mira láser.

Así que como soldados tendremos triple tarea, matar a los guerrilleros, lograr los objetivos y sobrevivir a cierto alienígena que se dedica a saltar por los árboles a velocidad de vértigo y posee unas habilidades que no son moco de pavo.

Be Predator, my friend

Está claro que uno de los puntos fuertes del juego es controlar al Predator, aunque por suerte durante la demo de la Gamescom nos dejaron vivir la experiencia en los dos bandos.

En la primera partida me tocó ser Predator... y menuda superioridad. Contamos con una habilidad para correr y saltar hacia los árboles increíble. Estos árboles aparecerán marcados en rojo para que en un instante trepemos por ellos en esos puntos concretos, caminemos por las ramas y podamos saltar entre ellas, también con marcadores para que sepamos por dónde y por dónde no podemos ir.

La vista desde arriba ya de por sí ofrece una gran ventaja táctica, y los cuatro soldados rivales no suelen mirar demasiado hacia los árboles cuando tienen por delante una misión que cumplir y otros rivales que derrotar. Pero es que además contamos con nuestra famosa visión de calor con la que podemos detectar formas de vida ocultas entre árboles.

Ya sea a distancia con la mortal Plasmacaster, o bien cuerpo a cuerpo con nuestras poderosas garras, la superioridad de Predator es evidente y es todo un reto derrotarle.

Podemos también utilizar el camuflaje, que no impide totalmente que nuestros rivales nos vean pero pone las cosas más difíciles. Esta habilidad tiene una barra de energía que necesita recargarse, así que será nuestra decisión usarla para no ser vistos antes de atacar, o reservarla para cuando seamos atacados para poder escapar y recuperarse.

Los soldados unidos jamás serán vencidos

No penséis que es imposible matar al Predator y que las partidas van a ser muy injustas. En este tipo de juegos siempre es conveniente que los cuatro jugadores trabajen en equipo, y con una buena táctica pueden derribar al maldito alien si se lo proponen.

Para empezar contaremos con un buen arsenal de última generación, desde escopetas, SMG hasta rifles de francotirador. Con los soldados realizamos una táctica interesante en equipo, uno se ocupaba de cumplir los objetivos (en este caso robar datos de un servidor), mientras otros dos iban derrotando enemigos y el cuarto estaba atento para intentar matar al Predator.

Siempre tienes que mantenerte alerta, pues en cualquier momento un rayo mortal o una sombra puede caer desde el cielo y probablemente no puedas huir ni esconderte, aunque si el Predator va sin cuidado y queda expuesto la potencia de las armas de varios jugadores pueden marcar la diferencia y lograr la victoria.

Apartado técnico

A nivel gráfico es cierto que el juego necesita todavía trabajo por delante. La paleta de colores, con excesivo uso del verde y marrón (vale que es una selva, pero los tonos no son muy agradables), la escasa calidad de las texturas y un framerate bastante pobre no me han dejado grandes sensaciones respecto al apartado visual.

Predator está muy bien representado, los soldados algo menos, y los enemigos controlados por la IA tienen un nivel de detalle bastante pobre. Podría decir que el título está a medio camino entre el Triple A y el desarrollo indie, se nota que el estudio que lo hace no es TOP y espero que de aquí a su salida le den un buen empujón gráfico, al menos que consigan mucha mayor fluidez.

No es que sea algo injugable, de hecho disfrutamos mucho de las partidas, pero con los gráficos mostrados tan discretos uno espera que al menos el título vaya a 60 fps totalmente fluidos.

A nivel sonoro tampoco pudimos escuchar demasiado su música, pero los sonidos del Predator (por supuesto originales y muy característicos) y las armas en general estaban muy bien representadas.

Conclusión

Predator: Hunting Grounds me ha dejado sensaciones encontradas. Hay que reconocer que es una pasada controlar al Predator, saltar entre los árboles, disfrutar de su insultante superioridad, y tener que escoger siempre la mezcla de sigilo y combate sin miramientos, permitiendo que cada jugador lo disfrute a su manera.

Me parece bastante acertado que se haya apostado por un multijugador asimétrico, un género muy de moda que en este caso va que ni pintado, y también que no todo se resuma en enfrentamientos entre soldados y el alienígena, sino que también existan misiones y enemigos que derrotar.

Habrá que ver si esas misiones son variadas e imaginativas, si el juego tiene un buen sistema de progresión, variedad de armas... en definitiva, elementos para que no termine cansando rápido.

Además a nivel gráfico tiene que mejorar mucho, en texturas, iluminación y frame rate. Por suerte IllFonic tiene tiempo para solucionarlo, pues el título está fechado en 2020 en exclusiva para PlayStation 4.