Tras el éxito de EARTH'S DAWN, Team EARTHWARS está de regreso con LOST EPIC, un nuevo título de estética "anime" y en 2D con elementos RPG, plataformeros y side-scrolling en el que nos veremos inmersos en un conflicto entre los dioses y la humanidad.
Antes de comenzar me gustaría aclarar que si bien LOST EPIC puede comprarse en Steam, el título aún forma parte del programa de acceso anticipado de la plataforma de Valve, así que algunas características mencionadas en estas impresiones podrían no corresponderse con lo visto en la versión final del juego o con las futuras actualizaciones del mismo. Sobre todo si tenemos en cuenta que el estudio recibe de buen agrado el feedback por parte de a la hora de plantear los cambios en el juego.
Hace mucho tiempo, el mundo entró en guerra y tras toda la devastación sucedió lo que quizá nadie habría previsto. Los antiguos dioses se fueron dando paso a unos nuevos dioses. Unos dioses que se repartieron los dominios para domina bajo su propia ley y vigilancia a dos clases de personas.
Por un lado, aquellos que han sido escogidos y, bendecidos por los dioses, gozan de una vida pacífica y sin carencias. Por el otro lado están aquellos que han sido completamente abandonados y están condenados a malvivir mientras esperan su inminente muerte.
Es aquí donde aparece una clase muy especial de seres humanos. Aquellos que con pura fuerza de voluntad y grandes habilidades, se oponen a los dioses y han tomado como misión el ganarse la libertad.
Un desafío prometedor
Jugablemente LOST EPIC es un hack and slash en el que la precisión y la práctica se presentan como necesarias para seguir adelante, pues las claves para hacerse con la victoria se basan en su sistema de combos y la forma en la que controlamos nuestra energía al realizarlos.
Eso sí, esto no limita el combate, el cual es bastante dinámico y divertido gracias a la posibilidad de equipar dos armas y dos habilidades, pudiendo intercambiarlas sólo con un botón (un cambio bastante rápido) o combinarlos para hacer que un ataque sea más poderoso.
Los enemigos por su parte son de diversos tipos y aunque en un principio puede parecer fáciles de dominar, lo cierto es que el confiarse demasiado llega a pasar factura al quedarnos vendidos ya sea por carecer de energía o necesitar recuperarnos. Porque sí, la acción de recuperarse tiene una animación en la cual podemos recibir daño. Para añadir más sensación de pérdida, los objetos curativos no se obtienen a lo largo de la aventura, sino que es necesario crearlos tras haber recogido ciertos materiales necesarios.
Variedad y buen gusto
Para dar batalla a los enemigos contamos con un buen abanico de materiales y armas que ir mejorando. Todo esto tiene un coste, unas joyas que obtenemos al derrotar enemigos, y al morir las perdemos absolutamente todas. Es posible recuperarlas una vez, pero si fallamos no habrá otra oportunidad y tocará empezar desde cero.
Eso sí, hay más de un momento en el que el juego parece "ceder" ante el jugador y que la dificultad ha disminuido, pero lo cierto es que cuando menos te lo esperas aparece un enemigo resistente a todos los ataques que habías aprendido hasta el momento y te elimina sin remordimiento.
Ya en un plano más discreto tenemos el árbol de habilidades del personaje. Hay un buen número de habilidades pasivas y algunas de ellas se obtienen explorando o derrotando enemigos, pero lo cierto es que más allá de la rama principal el resto resulta bastante confusas y no existe forma de comprobar si el efecto en cuestión se encuentra activo o no.
Finalmente, la estructura de cada uno de los mundos disponibles en los que existen mini jefes ocultos que se consideran objetivos secundarios es algo que me encanta. El balance de estos es correcto y ayudan a que la exploración a fondo se siente como algo satisfactorio y no como algo que sólo te ayuda a encontrar atajos. Los enemigos finales suponen la gran prueba final y aquí sí que se nota una subida en el desafío, aunque nada que no se pueda superar con algo de práctica.
Más bonito de lo que esperaba
Si bien el apartado visual de EARTH'S DAWN no era malo, mi gran temor con LOST EPIC era que este se sintiese errático o poco fluido en el movimiento. Afortunadamente me alegra ver que esto para nada es así y a unas animaciones fluidas debemos sumarle un mundo hermoso con una personalidad y estética propias.
Y hablando de estética, también es posible modificar parte del aspecto de nuestro personaje gracias a objetos que iremos creando según avanzamos. Esta opción puede parecer de poca importancia, pero ayuda a que los diseños de Namie (Fate Grand Order, Azur Lane y Arknights) brillen aún más.
La banda sonora tampoco se queda atrás y complementa perfectamente al juego con una selección de temas que no pasan desapercibidos (aunque alguno puede hacerse algo repetitivo). Una banda sonora que de momento podéis descargar gratuitamente en su versión "mini" en Steam como parte de las celebraciones por la llegada del juego a la plataforma de Valve.
Finalmente y respecto al rendimiento debo decir que me encuentro realmente sorprendido por lo bien que funciona el juego pese a ser un early access. No me he encontrado con errores que hay echado a perder mi experiencia de usuario y de hecho lo único que me recuerda que estoy ante un producto sin terminar es que sólo haya dos escenarios disponibles de los seis planeados.
Prometedor
Pese a encontrarse aún en desarrollo, LOST EPIC presenta una propuesta sólida a la par que divertida. Sus mecánicas están bien hechas, y aunque de momento se encuentran bastante limitadas por ser un juego de acceso anticipado, sientes que el potencial que hay en ellas se está aprovechando de la forma adecuada.
En definitiva, es un juego que goza de personalidad gracias al gran trabajo en la banda sonora, así como en su apartado artístico. Un juego que recomendaría a los fans de los hack and slash que quieran darle una oportunidad a un nuevo proyecto. Eso sí, la única pega que de momento le encuentro al juego es la ausencia de traducción al español.
¿Dónde comprarlo?
Puedes hacerte con LOST EPIC por 16,79 euros en Steam. Es un juego en acceso anticipado, cuyo lanzamiento está previsto para dentro de seis meses o un año y de cara a la versión final el precio por el que podremos comprarlo también aumentará.
