Hemos tenido que esperar dos años y medio, que se dice pronto, para poder disfrutar de uno de esos juegos que justifican la compra de una consola, de un título que los fans del género de la aventura llevan anhelando desde hace mucho, mucho tiempo. Una sed de Uncharted que Sony logró saciar en parte con la remasterización de las tres entregas en PS4, un gran aperitivo para ir abriendo boca.
El 10 de mayo sale a la venta uno de los juegos no ya del año, de la presente generación, y aunque parezca que tan altas expectativas puedan asustar a cualquiera e incluso decepcionar, tratándose de Naughty Dog solo podemos esperar lo máximo.
El estado de salud de PlayStation 4 en ventas es envidiable, pero muchos acusan a Sony de falta de un catálogo verdaderamente potente, con una buena cantidad de exclusivos que marquen la diferencia, franquicias estrella que dejen su impronta en esta generación. Algunas ya han asomado, pero en forma de remasterización. Algunos de esos nombres acompañaron al lanzamiento de la consola como Infamous: Second Son o Killzone: Shadow Fall, pero durante 2015 hemos tenido demasiados refritos, revisiones HD de sagas muy queridas que han servido (o eso esperamos) para que los estudios tengan tiempo y dinero para preparar con mimo esos grandes regresos. Se espera un Gran Turismo potente, un God of War apoteósico y, como no, un Uncharted de categoría, acorde con lo que nos tienen acostumbrados.
Una de esas grandes IP ya está entre nosotros, Uncharted 4: El Desenlace del Ladrón, y después de haberlo catado, degustado y hasta repetido, podemos decir que Naughty Dog no ha decepcionado en absoluto, optando por repetir la fórmula del éxito de sus predecesores: Unos gráficos de infarto, un ritmo trepidante apoyado en una jugabilidad variada que reúne plataformas, acción y disparos, una historia de viajes y descubrimientos, humor y romance, y añadiendo a la receta una capa de madurez y profundidad que nos deja un desenlace a la altura de la franquicia.
El final de un canalla encantador
Ya lo dice el título, Uncharted 4 supone el desenlace de una historia llena de personajes icónicos, carismáticos, una despedida que cuesta afrontar. Nathan Drake decidió colgar el hábito y llevar una vida tranquila, casi contemplativa, con Elena Físher, un retiro más que merecido pero autoimpuesto; al bueno de Nathan le cuesta hacerse a la vida reposada y echa la vista atrás recordando con nostalgia tiempos pasados.
La aparición de su hasta ahora desaparecido hermano, Sam Drake, interpretado por el conocido Troy Baker (actor que pone voz y gestos a Joel, Delsin Rowe, al Caballero de Akham en la última de Batman y al mismísimo Big Boss), un ladrón de tumbas todavía más imprudente y temerario metido en problemas hasta el cuello, será la mecha que vuelva a encender el fuego de la aventura, que les arrastrará por varios rincones del mundo a la búsqueda de un tesoro oculto propiedad del pirata Henry Avery para averiguar el paradero de una ciudad cargada de misticismo conocida como Libertalia y que se sabe cerca de Madagascar.
Naughty Dog trata de explorar el lado más humano de los personajes, profundizando en los sentimientos del protagonista, un Nathan cuyos impulsos le empujarán a ayudar a su hermano en apuros aunque ello suponga dejar atrás una vida placentera con su esposa y arriesgar, una vez más, sus pellejos, quizás esta vez más de la cuenta, por alguien a quien creía muerto y que llevaba tiempo alejado de su mundo.
Esta cuarta entrega pone el foco en los sentimientos, su ritmo no es tan frenético, su historia es más íntima, las influencias de la ultima obra del estudio, The Last of Us, está presente y la capacidad técnica de la consola permite dotar a los personajes de una expresividad que otorga veracidad al conjunto.
Además de viejos conocidos como Sully y Elena, dos nuevos protagonistas se suman al elenco de personajes: Rafe y Nadine, mención especial a Nadine Ross, una villana de origen sudafricano y de raza negra que supone una refrescante novedad en la saga y promete convertirse en un rival de altura que nos deja algunas escenas cinemáticas memorables.
Una vez más la historia nos obligará a desplazarnos por localizaciones alrededor del globo al más puro estilo Indiana Jones (Sudáfrica, Italia o Escocia entre ellas), por lo que la variedad de entornos, ya introducida en Uncharted 2 tras un debut demasiado selvático volverá a estar presente, aunque por supuesto volveremos a pisar la selva para no perder las buenas costumbres.
Aventura, viaje, descubrimiento, pilares sobre los que vuelve a sustentarse la obra.
En la variedad está el gusto
La fórmula jugable de Uncharted se ha ido refinando a cada entrega. El gran salto de calidad llegó del primero al segundo, y es que el debut de Drake en PS3 pecaba de repetitivo en los tiroteos, con una IA demasiado simple y unas coberturas que no siempre funcionaban. Su secuela ya introdujo elementos interesantes como el sigilo y tanto las escenas de disparos corno las luchas cuerpo a cuerpo siguieron mejorando con la tercera entrega.
Ahora, una generación después, Naughty Dog parece querer aprovechar toda la potencia de PS4 y toda la experiencia conseguida con la trilogía, y también con su otra obra maestra, The Last of Us, para adaptar aquellas cosas que funcionaron y que pueden aportar frescura a una fórmula que necesitaba ventilarse.
La influencia del título de infectados es mayor de lo que uno podría pensar, no solo por incidir en una historia más personal, también en la forma en la que afrontarnos las misiones. Se potencian las fases de sigilo porque habrá momentos en los que no es recomendable entrar a saco y acabar con todos los enemigos de la zona y no habrá tampoco necesidad de ello, la vegetación será un gran aliado, algo muy explotado en los últimos Tomb Raider de Crystal Dynamics. Un indicador nos avisará si un enemigo está apunto de descubrirnos y habrá muchos momentos en los que tendremos que arrebatare el arma a un rival tras un forcejeo, mecánicas que vimos en la aventura de Joel y Ellie.
Pero al contrario que en The Last of Us, aquí el ritmo es mucho más alto y predominará la acción y el dinamismo. Durante las fases de disparos los enemigos nos obligarán a movernos mucho por el escenario, incluso escalar para buscar cobertura, por lo que las zonas de plataformas y disparos ya no estarán tan diferenciadas en el juego sino fundidas, lo que añade emoción, porque la escalada no se limitará a momentos placenteros en los que avanzar con tranquilidad y recrearnos en los paisajes, momentos que, por cierto, siguen siendo un gusto para los sentidos.
¿Os acordáis que ante saltos imposibles el bueno de Nathan siempre encontraba una cuerda, una liana o una caja muy oportunas para salvarlo? Lo cierto es que en ocasiones quedaba un tanto forzado, y eso es algo que Naughty Dog ha resuelto añadiendo un instrumento más a nuestro cinturón. Una de las grandes novedades jugables es el garfio con cuerda, que nos permitirá asirnos a los salientes marcados, así como un pico para agarrarse a paredes rugosas para poder escalar sin necesidad de salientes. De nuevo Tomb Raider realimenta a Uncharted que a su vez realimentó a Tomb Raider que fue fuente de inspiración de esta saga y etcétera etcétera.
El combate también ha mejorado, y se han potenciado las escenas en las que derribamos a un enemigo utilizando el entorno, algo que siempre resulta espectacular y cinematográfico. Las peleas son más duras y retantes que nunca y cualquier enemigo requerirá más de un golpe y una esquiva para ir al suelo. El gancho también nos ofrece la posibilidad de sorprender a un enemigo desde el aire, aunque por desgracia su uso contra el rival se limita a eso y no podemos utilizarlo como arma como nos gustaría.
No obstante en los tiroteos, no tan abundantes en esta entrega como en las anteriores, es donde encontramos algunos "peros". La inteligencia artificial de los enemigos no es muy brillante y aunque el sistema de coberturas funciona con fluidez, Naughty Dog no ha querido dar un paso adelante añadiendo profundidad (como un sistema de mejora de armas, incluso de habilidades del personaje) y sigue sin complicarse poniendo en el mapa las mismas —poco variadas - armas y munición en abundancia. Tampoco la IA de nuestros aliados es siempre brillante, aunque a menudo funciona bien a veces nuestros amigos quedan expuestos, algo que ya vimos mucho en TLoU, aunque es cierto que ha mejorado mucho respecto a aquel.
Aunque el juego sigue siendo una aventura lineal, un peaje casi necesario para mantener la espectacularidad y el ritmo tan altos, los niveles son más abiertos que nunca, en muchos puntos podremos escoger el camino y esta vez no solo para buscar el tesoro de turno, lo que potenciará la rejugabilidad y nos invitará a buscar rutas alternativas. Las fases de conducción son un soplo de aire fresco y el estudio es capaz de que el ritmo nunca decaiga. Posiblemente Naughty Dog sea uno de los mejores estudios del mundo en ese sentido y lo vuelve a demostrar aquí.
Y respecto a los tesoros contamos con un sistema más profundo de lo que suele ser habitual, pues en algunos casos encontraremos pistas y se nos irá actualizando el diario al instante, nos sorprenderá el número de veces que tenemos que consultarlo si queremos hacernos con las joyas ocultas del juego, no solo en momentos puntuales y muy marcados como antaño.
Y como no, volvemos a encontrarnos los míticos puzzles, otro sello de identidad de la saga, más integrados con la historia y muy asociados con el propio entorno, con un garfio que aporta nuevas mecánicas para resolverlos. Como siempre suelen ser bastante sencillos de resolver con las pistas, aunque si no hacemos uso de ellas nos costará bastante más dar con la solución. Una mayor dificultad no estaría de más, pero es algo que siempre se ha reclamado y Naughty Dog siempre ha optado por no atascar más de la cuenta, mueren con las botas puestas en este sentido.
A la conquista del online
Cuando pensamos en Uncharted solemos hacer en su modo historia, una campaña que nos puede durar unas 14-18 horas, unos números por encima de la media. Naughty Dog podría haber prescindido de un modo multijugador como hacen tantas y tantas otras, pero el estudio americano ha querido seguir el camino que empezó con Uncharted 2 (de forma algo errática) y que mejoró con la tercera entrega.
Contaremos con partidas de 10 jugadores en equipos 5v5 y con 8 mapas en los que tendremos que saltar, cubrirnos, elegir una clase (táctico, apoyo, reconocimiento...), dos armas (pistolas, rifles de asalto, rifle francotirador...), un explosivo (de proximidad o de mano) y hasta un artefacto mítico que nos dé un poder sobrenatural que va desde invocar demonios, recuperar aliados caídos o localizar en el mapa a nuestros enemigos.
La inclusión de estos poderes nos ofrecerá una ventaja clara durante las partidas y se podrán conseguir gastando moneras que recolectaremos logrando bajas, curando aliados o recogiendo joyas por el escenario, aunque cada vez serán más caros para no abusar. También con las monedas podremos comprar armas especiales, botiquines extra o mejoras para las armas comunes. Todo, absolutamente todo en el online de Uncharted 4 puede desbloquearse con moneda del juego, así Naughty Dog no premia al que se gasta más dinero real sino al que más juega para conseguir dinero virtual, fomentando que siempre haya motivos para seguir dándole al multijugador.
También podremos invocar aliados que nos sirvan de apoyo en determinados momentos, como un súper-soldado armado con una ametralladora que resiste muchas balas, un francotirador o un espía que marca la posición del rival en el mapa. Estos aliados podrán acompañarnos o podremos decirles que se queden en un punto determinado, lo que favorece la estrategia durante los combates.
La personalización tiene su hueco, con muchas apariencias, personajes e incluso burlas. A nivel de modos de momento sólo encontramos cuatro: Combate por Equipos, Comando (conquistar tres zonas del escenario para conseguir puntos), Saqueo (el clásico capturar la bandera) y Combate por Equipos Clasificado con un ranking. Se nos antojan escasos y se echa en falta un cooperativo, pero Naughty Dog ha prometido que irá añadiendo mapas y modos durante los próximos meses de forma gratuita y de momento lo poco que hay se disfruta.
Corno puntos diferenciadores respecto a otros modos online destacar el diseño de niveles, muy vertical, y la utilización del gancho, no solo para alcanzar puntos elevados ventajosos, también para ejecutar desde las alturas. Al igual que pasaba con el online de Assassin's Creed no será raro vera la gente pegando saltos y buscando buenas posiciones.
No hemos notado prácticamente nada de lag, y esperamos que cuando se ponga el juego a la venta tampoco se encuentren demasiados problemas, al menos el estudio no acostumbra a ello.
Un juego para presumir de consola
El apartado gráfico es sencillamente apabullante, y por lo visto hasta ahora Uncharted 4 se ha convertido en el juego más bestia técnicamente de todo el catálogo de PlayStation 4, toda una demostración del poderío que encierran las tripas de la consola de Sony.
El hecho de que la propia Naughty Dog trabajase en la remasterización de The Last of Us en PS4 sirvió al equipo para practicar y conocer bien su arquitectura, y no os vamos a descubrir la costumbre de estos chicos por exprimir la circuitería de la consola y lograr un aspecto gráfico por encima de la media, sin olvidar su casi enfermizo gusto por el detalle en elementos que suelen pasar desapercibidos.
La nueva generación aporta a la saga escenarios grandes y detallados, con una buena distancia de dibujado, un viento que mece hojas y ropa y un agua que parece real, al igual que muchas texturas gracias a trucos gráficos come la teselación procedural, que añade más detalle según vayamos acercando la vista. Iluminación y efectos climáticos también están a gran nivel, lo cierto es que no hay nada en el juego que "cante" y la sensación de empaque es mayor todavía cuando descubrimos que apenas hay tiempos de carga y las transiciones entre cinemáticas y el juego en sí son muy fluidas.
Si los gráficos impresionan no podernos olvidarnos de las animaciones, otro de los puntos fuertes de la saga y de Naughty Dog y que vuelve a aportar un salto de calidad. En los vídeos gameplay podéis haceros una idea clara de la fluidez de movimientos de Drake, desde la interacción con otros NPC hasta las más de 60 animaciones distintas para los movimientos de escalada, más orgánicos que nunca.
Mención especial al trabajo realizado con la animación facial, solo la cara de Nathan tiene más de 800 partes animadas, logrando una expresividad excepcional que disfrutaremos en las numerosas escenas cinemáticas recreadas con el propio motor del juego en tiempo real. También las físicas tienen un tratamiento más profundo que notaremos en cosas como la ropa moviéndose con realismo a cada movimiento o la sensación de peso cuando treparnos por un acantilado.
El juego luce a 1080p de resolución y por desgracia no ha sido capaz de alcanzar los 60 frames estables, el estudio decidió ajustar el juego a 30 fps añadiendo más efectos gráficos en el modo campaña y apostando por la estabilidad, ya que en muchos momentos la tasa se mantenía cerca de los 40 frames pero en otros caía y se ha optado por una tasa fija. En cambio en el modo multijugador el juego sí llegará a 60 fps aunque su resolución será de 900p. Los gráficos, en ambos casos, no os decepcionarán.
En lo referente al apartado sonoro era previsible que el cambio de compositor de Greg Edmonson, presente en la trilogía original, al prestigioso Henry Jackman - toda una garantía por contar en su currículum con trabajos como la reciente 'Capitán América: Civil War', 'Kingsman: Agente Secreto', "Big Hero 6' o 'X Men: Primera Generación' — lograse que el gran nivel cuanto menos se mantuviese y podemos dar fe que es así.
Tanto la banda sonora como los efectos de sonido gozan del nivel típico de las superproducciones y el doblaje al castellano sigue siendo de los mejores de la generación, con un trabajo que no podemos dejar de aplaudir y que ojalá todas las compañías llevaran a cabo. Si preferimos podremos escoger las voces en inglés, que por supuesto también gozan de un nivel a la altura.
El Desenlace del Ladrón
Nos quedamos sin calificativos para Naughty Dog, un estudio que lleva años consiguiendo alcanzar los límites técnicos de las sobremesas de Sony y subir el listón un par de escalones más. Con Uncharted 4 se despiden de la saga que les situó en el olimpo y, como no podía ser de otra manera, han querido poner el broche de oro con un cierre memorable con un juego que justifica, y sobradamente, la compra de PS4.
Maravilloso técnicamente, con una historia más madura, un ritmo variado que nunca decae, variedad de situaciones jugables, Uncharted 4 nos hace viajar y nos hace disfrutar con cada paso.
Quizás los amantes de la acción frenética y los tiroteos crean que el juego les ofrece menos de lo que acostumbra, y puede que Naughty Dog no haya arriesgado demasiado en esta entrega (a nuestro parecer, Uncharted 2 fue más impactante y sigue siendo el TOP de la saga), pero el resultado es tan redondo que no podemos más que aplaudir y desearle toda la suerte del mundo al estudio que se encargue de heredar la saga, porque realmente la van a necesitar.
Dónde comprarlo
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