Hubo una época en la que los gráficos eran pixelados y el género principal en PC era el de la aventura gráfica.

Hubo un tiempo en el que la historia de un videojuego era lo más importante, por encima de los gráficos.

Hubo un tiempo en el que algunos maestros como Ron Gilbert crearon joyas como Maniac Mansion y Monkey Island.

Y hoy, los maestros, han vuelto.

Antes de seguir adelante quisiera hacer una reflexión. Es difícil hablar de un juego en el que no puedes explicar nada de la historia, ni de los diálogos ni del humor. Así que haré lo que pueda. Pero entiendo que es más importante no desvelar secretos y dejar al jugador experimentar el juego y sorprenderse a cada paso que dé.

Thimbleweed Park

La primera vez que oí hablar de este título y pude ver unas cuantas pantallas pensé: esto es Maniac Mansion.

Y no, no lo es, pero sí que es el regreso de Ron Gilbert y eso son palabras mayores. Cuando hablamos de Thimbleweed Park, lo hacemos de un juego moderno con un regusto a añejo del bueno. Vamos a ver lo que nos ofrecen los chicos de Terrible Toybox.

La historia

Sobre este apartado no quisiera decir mucho para evitar spoilers, así que me ceñiré a comentar lo que se publicó desde un inicio con algún añadido.

El juego comienza en un pueblo de nombre impronunciable; Thimbleweed Park, controlando a uno de los personajes que tiene una cita secreta con alguien a quien parece no conocer, en un lugar desconocido. Vaya, lo normal. Después de esto se produce un asesinato y dos inspectores vienen a investigar lo que ha sucedido.

Los dos investigadores, el inspector Antonio Reyes y la inspectora Angela Ray, están claramente inspirados en Mulder y Scully de Expediente X. Decir que el juego está ambientado en los años 80 así que las referencias a títulos de esa época y a la cultura popular de esos días serán constantes.

No voy a añadir nada más ya que el juego ofrece sorpresas constantes y no quisiera desvelar ninguna. Y esta es una de las cosas que más valoro de este título, la capacidad de divertir y asombrar al mismo tiempo, haciendo que la historia sea interesante y al mismo tiempo misteriosa y divertida.

Pixel por aquí, nostalgia por allí

El apartado gráfico es un claro homenaje a esos primeros juegos que nos tuvieron horas y horas atrapados delante de nuestros viejos monitores de PC. Gráficos pixel-art de antaño pero con toques modernos. Esto tiene su parte positiva y su parte negativa.

La parte positiva es que los que vivimos aquellos tiempos vamos a disfrutar muchísimo ya que, a parte de lo que vemos en la pantalla, sucede algo que ya ocurría en esa época y es que nuestra imaginación vuela más allá de lo que se ve en pantalla, así que si vemos a un payaso, nuestra mente ve más cosas de las que realmente hay en pantalla.

También hay que destacar que la interface utilizada en este Thimbleweed Park es ni más ni menos que la histórica SCUMM (Script Creation Utility for Maniac Mansion "Utilidad de creación de scripts para Maniac Mansion") diseñada por el mismo Ron Gilbert junto a Aric Wilmunder y Chip Morningstar para Lucasfilms Games (Lucas Arts) en 1987.

¿Cómo funciona esta interfaz? De la manera más lógica posible. Con el puntero apuntas sobre un verbo que indica una opción y luego seleccionas el objeto que quieras utilizar.

Por ejemplo, hay una puerta. Tienes dos opciones: abrir y empujar. La más lógica es abrir. Si esta no funciona por lo que sea puedes probar con empujar. Primero seleccionas el verbo que indica una acción y luego seleccionas el objeto con el que quieres interactuar. A este sistema se le conoce con el nombre de "Point and click".

Puede parecer un poco lento y tosco jugar de esta manera pero la verdad es que es mucho más ágil de lo que recordaba y el control está muy bien adaptado al mando de la PS4. Quizás para los más puristas pueda parecer un sacrilegio utilizar un mando para jugar una aventura gráfica, pero la verdad es que es toda una delicia.

Por otro lado, tanto el aspecto gráfico como el estilo de juego pueden frenar a los jugadores menos avezados a las aventuras gráficas. Incluso hay quien no podrá soportar tanto pixel junto. Solo les diría a estos jugadores una cosa: pruébalo. Cuando lleves cinco minutos ni te acordarás de que los gráficos son cuadrados.

Jugabilidad

A lo ya mencionado en el apartado anterior hay que destacar algo realmente importante y que diferencia este videojuego de los clásicos de los 80 y 90; los puzles son lógicos, son siempre coherentes.

En ciertos juegos de tiempos pasados era muy normal quedarse atrapado en algún puzle que se resolvía de forma totalmente incoherente. Eso aquí no sucede, lo cual ayuda a no desconectar del juego y de su historia.

Inisisto también con la buena adaptación del típico "point and click" al mando de la PS4 y del sistema SCUMM en general, añadiendo que el juego se desarrolla de una manera muy abierta en la que podremos ir avanzando en la historia a través de cinco personajes principales a los cuales podremos acceder en cualquier momento, con lo que si te que te quedas atascado en algún punto puedes seguir la historia por otro lado.

El sentido del humor

El sentido del humor que destila este título es quizás una de las cosas que más me han sorprendido, quizás porque no me lo esperaba. A veces un juego puede tener algunos chascarrillos y bromas. Pero Thimbleweed Park está concebido como una comedia de situación en la que cada pocos segundos encuentras algún tipo de chiste.

Y digo encuentras porque no todos los chistes se sitúan en los diálogos, ni mucho menos. Aquellos que venimos de los 80 encontraremos cantidad de referencias graciosas a otras aventuras gráficas y a la cultura popular de aquellos tiempos dispersas por todo el escenario.

Pero lo mejor de todo es que incluso este título se ríe de aquellos puzles desesperantes en los que, por ejemplo, tenías que marcar el pixel concreto en el momento en el que quedaba al descubierto para recoger ¿una mota de polvo?.

Por cierto... ¿para qué %&#$ necesito una mota de polvo en un videojuego?

Duración

A veces las aventuras gráficas pecan de ser demasiado cortas. Otras veces se alargan de forma artificial con puzles o dinámicas forzadas que lo único que consiguen es que acabemos odiando un buen juego. En este sentido he de decir que esto no ocurre en este título.

El título tiene una duración que va de las 10 a las 14 horas de juego, según si quieres completar la historia o si también intentas conseguir todos los secretos. Una buena duración para una de las aventuras gráficas más divertidas de los últimos tiempos.

Conclusión

Gráficos de antaño, la vuelta del SCUMM, personajes carismáticos que encierran historias interesantes, una música excelente y un doblaje de lujo (el juego incluye voces en inglés y texto en castellano), un misterio que resolver, mucho humor tanto escrito como visual y más de una decena de horas hacen de este título un juego completamente recomendable.

Si amas las aventuras gráficas te va a encantar. Y si no eres amante de este género siempre podrás darle una oportunidad ya que vale realmente la pena. Recomendado.

A la venta desde el pasado 22 de agosto en la PlayStation Store por 19.99€.