El pasado State of Play de Sony nos dejó una agradable sorpresa para la vista, Riverbond, una pixelada y cuadriculada aventura que nos invitaba a jugar con nuestros amigos en partidas de hasta 4 jugadores para abatir hordas de enemigos.

En Sonyers ya hemos podido probarlo a fondo y realizar nuestro análisis donde sacamos todo lo bueno y lo malo de esta aventura, que aunque no tiene mucho que ofrecer, puede servirnos para desconectar y relajarnos en una aventura entretenida.

El mundo de los cuadraditos está en peligro

Al igual que en otras sagas donde el lore es la forma habitual de contar la trama, en Riverbond la historia se cuenta a través de las conversaciones con los NPC, y aunque no es nada profunda, aquellos que disfruten con estos tipos de tramas encontrarán un mundo a punto de ser destruído por el Caballero, y nosotros por supuesto, debemos salvarlo.

Por desgracia, tanto la historia como la campaña son relativamente cortas, y aunque contamos con 8 entretenidas fases lo cierto es que podemos completar cada una en entre unos 35-45 minutos, por lo que la duración del juego es más corta de lo que esperábamos, unas 4 o 5 horas.

Rompe todo lo que se te ponga en el camino

El sistema de juego es bastante simple, cada capítulo cuenta con varias fases, en las que debemos completar una misión para poder pasar a la siguiente zona, mayormente se trata de acabar con una horda de enemigos o encontrar ciertos objetos, llegando a hacerse repetitivo pese a la poca duración que tiene el juego.

Por otra parte, el sistema de combate es igual de simple, únicamente debemos apalear a todos los enemigos a base de pulsar un botón donde, pese a encontrar con una variedad enorme de armas, todas actúan iguales.

La única diferencia entre las armas es que hay varios tipos, por lo demás, cada tipo actúa igual e inflige el mismo daño, haciendo que el juego tenga aún menos profundidad.

Si no juegas con un amigo te vas a sentir solo

El principal atractivo de Riverbond es su multijugador, al cual el juego está bastante enfocado. Por una parte, encontraremos varias skins para nuestro personaje, contando con grandes cameos de otros títulos como Guacamelee o Shovel Knight.

Estas skins son meramente estéticas y algunas resultan muy divertidas, ¿a quién no le divierte ver a un maki destrozándolo todo a base de espadazos?

Aunque la aventura en solitario se hace bastante sosa y algo repetitiva pese a su escasa duración, lo cierto es que en el multijugador gana bastante, resultando muy divertido ir con 3 amigos más cada uno usando su skin favorita.

Si jugamos solos no resulta ni la mitad de divertido que acompañado

Eso sí, nos molesta que no cuenta con multijugador online, reduciendo enormemente las posibilidades de jugar con gente, algo que con los tiempos que corren debería estar a la orden del día.

Por otra parte, echamos de menos un mayor número de modos de juego que potencien su multijugador, un modo arena habría bastado para hacerlo más entretenido.

Su apartado gráfico es lo más gratificante

Sin duda, lo que más nos ha gustado de Riverbond es su apartado gráfico. Tanto su mundo y sus personajes formados por píxeles y cuadrados resulta muy relajante para la vista unidos a sus coloridos enemigos.

Por otra parte la banda sonora también ayuda a que nos sintamos cómodos jugando y lo cierto es que al tratarse de una aventura corta, nos ayude a desconectar si buscamos algo más casual.

Los jefes se disfrutan aunque sus mecánicas no cambien demasiado

La variedad de escenarios como de enemigos también es la adecuada, y aunque los ataques o estrategias para vencerlos no varíe demasiado de un enemigo a otro, estamos contentos con el resultado.

Por su parte, los jefes tienen casi todos una mecánica similar, y no encontramos grandes diferencias entre ellos, por lo que elegir que capítulo afrontar con nuestros amigos va a ser una cuestión meramente de gustos.

A parte, el título tiene poca rejugabilidad, una vez que completes cada fase, no encuentras nada más que te motive a seguir jugando, e incluso para aquellos que disfruten obteniendo todos los trofeos, encontrarán que basta con una pasada para obtener el platino.

Al igual que en Megaman, debemos elegir que fase afrontar con su correspondiente jefe

Conclusiones

Riverbond solo resulta verdaderamente entretenido jugando con amigos, el modo de un solo jugador puede llegar a ser un poco aburrido. Eso sí, el factor relajante que ofrecen sus gráficos y su jugabilidad es innegable, y para desconectar se trata de un buen título.

Por otra parte, echamos mucho de menos que tenga más modos de juego o la posibilidad de jugar online, pero comprendemos que en un título de bajo presupuesto eso es difícil.

Donde comprarlo

Rivenbond saldrá a la venta en formado digital, pudiéndonos hacer con él en PS Store.