Sin duda vivimos una época dorada para los battle royale, el nuevo género que irrumpió con fuerza esta generación sigue trayendo nuevos y adictivos juegos que reúnen a varias decenas de jugadores para pasárselo bien, a tiros.

Es el caso de Realm Royale, un juego que, sin alejarse demasiado de la fórmula de Fornite, nos deslumbra por lo divertido que puede ser y las novedades que incorpora respecto a estos.

Ser un gallina puede salvarte la vida

Creemos que a estas alturas de la vida no hace falta que expliquemos la fórmula de los battle royale. 100 jugadores unidos en una misma isla con el único objetivo de encontrarse, darse de palos y ser el último en sobrevivir.

A la hora de juzgarlos todos tienen algo que los vuelve únicos, y es también el caso de Realm Royale, donde su principal diferencia es también lo más divertido que aporta.

Aunque gráficamente es fácilmente comparable con Fornite por sus gráficos minimalistas y animados, realmente este juego tiene esencia propia. Tanto su ambientación medieval como su selección de clases es algo totalmente nuevo en este género.

Si prestamos atención al mapa nos marcará la localización de tesoros épicos, aunque a veces llegar a ellos supone correr un riesgo

Pero no son sus diferencias ambientales lo que hace grande a este battle royale, su gracia recae en el hecho de que si morimos, nos convertiremos en una criatura salvaje -generalmente un pollo- que deberá escapar durante un tiempo para volver a ser humano, evitando así la muerte y consiguiendo una segunda oportunidad.

Así es, pasados unos segundos tras nuestra muerte y conversión a un plumífero, si conseguimos esquivar a nuestros enemigos, volveremos a la vida con nuestro armamento, listos para devolver el daño que nos han hecho, pluma por pluma.

Cuando nos maten tendremos que correr de lo lindo para que no nos den caza

4 clases distintas para un sin fin de situaciones

Por suerte, aunque la idea de esquivar balazos y proyectiles enemigos mientras somos un ovíparo es muy divertida y nos ha sacado más de una carcajada, no es la única característica jugable de este título.

A la hora de empezar una partida en cualquiera de sus modos, tendremos que elegir que clase queremos ser entre las 4 que podemos elegir.

Guerrero, explorador, mago, asesino, disponen de un abanico de habilidades únicas cada una, así como una lista de skins que podremos desbloquear jugando partidas.

Este hecho le da mucho más dinamismo al juego y hace que aunque echemos muchas partidas seguidas no nos cansemos de él. Siempre podemos ir variando de clase, subiéndolas de nivel y desbloqueando atuendos y habilidades nuevas.

La gracia del juego no termina ahí, pues aunque en un principio es muy parecido a Fornite -hasta la forma de la isla o el globo del que nos lanzamos en paracaídas- sigue teniendo extras que diferencian su jugabilidad.

Por ejemplo, dispondremos de monturas, que nos permitirá recorrer el mapa del juego mientras huimos de la tormenta a un ritmo más rápido, y por qué no, escapar también de nuestros enemigos en situaciones delicadas.

Por otra parte, también podremos desechar los objetos, armamento y habilidades que no queramos para conseguir esquirlas, que podremos usarlas en una forja para conseguir armamento épico y nuevo.

Esto hace que pese a que las partidas pueden alargarse un pelín más por el hecho de que podemos resucitar de nuestra forma de pollo, podamos personalizar más a nuestro gusto a nuestro personaje, lo que nos da más libertad y diversión. No tienes que depender únicamente de lo que te encuentres por ahí tirado.

Usando la forja podremos personalizar nuestras habilidades a nuestro gusto

Técnicamente mejorable, pero es una beta

Siguiendo la moda de los demás battle royale, este juego gratuito también nos llega en forma de beta. Por desgracia, el juego presenta un apartado gráfico inferior a los demás que, sin duda, debe pulirse más.

De todas formas estamos convencidos de que con el tiempo recibirá mejoras, pero por ahora lo que hemos visto puede ser un poco molesto para una consola que en teoría debería de poder con esto y más.

Hablamos por supuesto de tirones y caídas de frames, así como mapeados que tardan en cargar, sobretodo cuando estamos muchos personajes en pantalla. En especial momentos antes de tirarnos en paracaídas cuando estamos junto a los demás 99 jugadores, los tirones son sorprendentes y de inicio echan un poco para atrás.

Algunas zonas son mejorables gráficamente, pero contamos con que mejoren en el futuro

Como ya hemos dicho, los gráficos del juego tampoco es que sean una maravilla, pero los escenarios están currados y se diferencian bien entre si, invitando a jugar y ser explorados, son bonitos a su manera.

Eso sí, la isla en que la trascurre la contienda es más pequeña a la vista en otros battle royale. Pero necesariamente esto no es malo, agiliza bastante la partida y da lugar a situaciones en las que nos encontramos con varios enemigos a la vez, dando lugar a momentos divertidos aunque no seamos gallinitas.

Por último, queremos rememorar también el hecho de que podemos personalizar mediante skins y extras muchos apartados, desde el aspecto de nuestros personajes, nuestros pollos, hasta las monturas que utilizamos.

Esto invita bastante a jugar para desbloquear nuevos items, e incluso hemos sucumbido a hacernos con el pase de temporada mientras hacíamos este análisis porque el contenido que desbloqueaba nos parecía divertido.

Aprovechamos para decir que los miembros de PS Plus pueden hacerse con él totalmente gratis, un gran incentivo para probar la primera temporada que durará 70 días.

Todo será personalizable hasta la médula

Conclusiones más evidentes que la gallina turuleca

Realm Royale, pese a sus muchas diferencias con otros juegos del mismo género, nos ha parecido verdaderamente único y divertido.

Sus situaciones postmorten, monturas y habilidades especiales para cada clase, son realmente adictivas y esperamos que la comunidad de este juego crezca y sus desarrolladores trabajen duro en él, nos ha gustado.

Eso sí, el apartado técnico es algo modesto y esperamos que lo mejoren. Pero aún así estamos ante uno de los battle royale más divertidos que hemos visto, y siendo gratuito hasta su pase de temporada, qué menos que darle una oportunidad.

Las monturas son otras de sus novedades