Este análisis ha sido realizado gracias a una copia digital facilitada por Abylight Studios, título actualmente disponible en PC a través de Steam y Epic Games Store.

Ya tenemos en nuestras manos uno de los videojuegos de gestión que despierta gran curiosidad debido a su temática, y no es otra que la de gestionar un campamento militar para adentrarnos en una campaña de reconquista y supervivencia, en el análisis de One Military Camp os mostraré qué me ha parecido esta versión final que vio la luz el 20 de julio.

Abylight Barcelona ha puesto mucho empeño en este título, ya que han cumplido a rajatabla cada una de los objetivos marcados en su hoja de ruta, por lo que vienen un buen puñado de contenidos desde su aparición en Early Access, versión de la cual hice unas impresiones iniciales.

Sin más dilación pasemos a los entresijos de este campamento militar, que viene cargado de misiones, opciones de personalización, y, sobre todo, humor y mucho contenido que gestionar para que no acabemos en bancarrota, bueno, y para salvar al país.

Campañas y cornetas

El modo principal de One Military Camp es su modo campaña, a través del cual iremos abriéndonos paso por diferentes regiones una vez hayamos completado las misiones pertinentes dentro de cada una de ellas.

Esta reconquista parte de la base principal, nuestro eje de operaciones donde podemos gestionar todos los recursos disponibles, reclutar nuevas personas para que se unan a nuestras filas, y distribuir los diferentes edificios para optimizar el cometido principal.

Este cometido no es otro que frenar a Dragan, un malvado ser que ha conquistado todos los territorios hasta donde alcanza la vista, todos excepto uno, el pequeño bastión que gestionamos desde el inicio, el cual irá aumentando su envergadura según avancemos en las investigaciones, en la contratación de personal, y en edificar los diferentes tipos de estructuras.

El mapa cuenta con múltiples misiones a completar

Debemos ir reclutando a diferentes soldados, los cuales se irán especializando según nuestras indicaciones en diferentes aspectos, ya sea en el mantenimiento del campamento, en cocina, en medicina, investigación, o en las diferentes ramas dentro de las labores del ejército, como son el espionaje, el armamento pesado, francotiradores, piloto de tanques, químicos, y un largo etcétera que nos irá demandando el juego para cumplir las misiones de la campaña.

Estas misiones se distribuyen por el mapa para la reconquista de terrenos, pero solo se desbloquean a medida que vayamos conquistando zonas enteras, que pueden albergar dos o tres misiones. Estos terrenos nos pueden aportar nuevas fuentes de recursos, mejorar las rutas comerciales, más reclutas para la causa, o simplemente mejorar las relaciones con nuestros vecinos y vecinas.

Muchas de estas misiones requerirán de un tipo de soldado específico, o de varios, por lo que el avance dentro del campamento es crucial para poder seguir con la misión principal de reconquista del mapeado, pero, al completar dichas misiones, recibiremos una determinada cantidad de dinero que invertir en sueldos, recursos, mantenimiento, o en construir nuevos edificios. Aunque la primera opción es entrenar a los reclutas hasta las diferentes especializaciones, en determinados territorios podemos encontrar empresas de mercenarios que albergan varias posibles incorporaciones que ya están especializadas en un ámbito, ahorrando tiempo y, quizás, dinero.

Varias conversaciones aparecen de forma espontánea

Todo ello está aderezado con buenas dosis de humor que nos iremos encontrando tanto a nivel narrativo, como en diferentes expresiones de los personajes, una puntualización que siempre es de agradecer en estas propuestas, y que deja un buen sabor de boca después de cada misión, y en cada partida.

La historia de One Military Camp no es su punto fuerte, más bien sirve como excusa para ir mejorando nuestro campamento, adquirir nuevos tipos de edificios, y mejorar nuestras defensas, ya que aquí no encontraremos combates en tiempo real, el desarrollo de las misiones es meramente narrativo, aunque podemos observar los diferentes pasos de cada una de ellas en tiempo real, y tomar ciertas decisiones durante el transcurso de las mismas en algunos de los pasos, como, por ejemplo, si queremos salvar a un grupo de rehenes o no, si nos arriesgamos a tomar unos archivos importantes pero altamente vigilados, etc., pero estas decisiones pueden traer consecuencias, entre ellas, perder a alguno de nuestros soldados, o que vengan con lesiones a su vuelta.

El éxito de las misiones depende de varios factores, pero mejoramos la probabilidad de éxito si el total de soldados que enviamos a la misma suman una fuerza mayor que la del enemigo, debido a que cada recluta cuenta con una puntuación individual dependiendo del tiempo invertido en mejorar las diferentes estadísticas, y de varios factores más. Si una misión no ha tenido éxito, podemos perder a algún recluta, y debemos volver a repetirla bajo las mismas condiciones, pero es posible mandar a otros u otras soldados diferentes.

Debemos mandar a aquellos y aquellas reclutas especializadas para cada misión

A medida que avancemos se mostrarán diálogos entre los personajes principales de la trama, los cuales son de mayor interés debido a su situación específica, o porque se tratan de héroes y heroínas que iremos rescatando, y que se pueden seleccionar como “líderes del campamento”, cada una de ellas aporta un beneficio concreto, y otros diálogos que nos encontraremos al conquistar territorios, donde aparecen varios ciudadanos y ciudadanas explicando la situación actual de la zona, o dan contexto a la narración.

Por otra parte, en el modo Sandbox, tenemos la posibilidad de personalizar las partidas a nuestro gusto, con diferentes condiciones para las mismas, como el héroe o heroína inicial, el enemigo a batir, la dificultad o facilidad de obtener recursos, si aparecemos con todas las investigaciones desbloqueadas, y un largo etcétera, que harán muy entretenidas nuestras escaramuzas.

Este modo trae consigo dos nuevos biomas, la selva y el desierto, muy diferenciadas entre sí, además de un modo diferentes al de reconquista de la campaña, que se basa en la conquista de territorios vírgenes, y de mantener las posiciones, lo cual suma frescura a la propuesta, y jugaremos una versión diferente al de la trama principal.

Podemos personalizar a cada uno y cada una de las reclutas

Gestiones por doquier, y con fundamento

El núcleo importante de este título es la gestión íntegra del campamento principal, el cual puede variar de localización en la campaña principal según vayamos avanzando en la conquista de territorios, pero no se transfieren los edificios y el personal, es como empezar de “cero” pero con una base monetaria importante para avanzar más rápido y poder volver al ritmo anterior.

Los edificios se diferencian dependiendo de su finalidad, y cada uno tiene un coste monetario determinado, ya sean esenciales como los residenciales donde dormir y descansar, la cantina donde poder comer, las casetas de mantenimiento, y los centros de investigación, por otro lado, encontramos aquellos que generan y distribuyen la energía, y los referidos a la logística, como son los centros de almacenaje de recursos. Disponemos de paneles informativos para ver todos los edificios en un listado, a todos los soldados, el listado de candidaturas para ingresar al campamento, así como diferentes paneles de reparación, estado general de salud de los y las reclutas, la distribución de energía, y un largo etcétera.

La base cuenta con una distribución en forma de cuadrados, cuantos más ocupe una estructura, más cuadrados ocupará, por lo que su extensión es finita, aunque lo suficientemente grande para poder hacer una distribución eficiente y a nuestro gusto. No pueden faltar aquellos de entrenamiento de las diferentes habilidades, ya sea de inteligencia, fuerza, precisión o velocidad, así como los de salud y defensa, esenciales para el óptimo funcionamiento del campamento.

En el panel de soldados podemos ver a todas las personas integrantes del campamento y ver su estado

En esta distribución debemos tener en cuenta factores como el ruido generado, que puede afectar a los edificios residenciales, lo cual repercute en el descanso, la falta de energía en aquellas estructuras más alejadas, así como una correcta distribución de los y las soldados dentro de las demandas de cada edificio para que funcionen correctamente.

Para un correcto funcionamiento de todo el campamento, hay que contratar personal de mantenimiento, para los diferentes edificios relacionados con la medicina, personal de seguridad, cocineros y cocineras, que serán quienes surtan a todas las personas de todo lo necesario para sobrevivir.

Cuanto más nos acerquemos a nuestros enemigos, mayor será la probabilidad de recibir ataques de drones, los cuales pueden presentar escudos, o tecnología de invisibilidad, así que es importante surtir a la base de buenas defensas, cada una de ellas especializadas en bloquear un tipo de dron.

Los ataques de drones son más frecuentes bajo determinadas condiciones

Los puntos de investigación adquiridos durante el transcurso de la partida, se pueden invertir en nuevos avances y edificios dentro del Árbol de Tecnología, una pestaña que nos permitirá ir mejorando las construcciones, así como adquirir los planos de nuevas edificaciones que favorezcan el avance de la campaña y añadan nuevas especializaciones con las que completar las misiones.

Los edificios de entretenimiento son de vital importancia, ya que ayudan a mejorar la moral del personal, así como los diferentes añadidos estéticos que hagan de nuestro campamento un lugar más agradable, o más serio dependiendo de nuestros gustos. La construcción de caminos es igual de importante que una buena iluminación, y hay que saber llegar al punto óptimo con las distancias a los edificios asignados para que las personas no se cansen más de lo debido.

La importancia del reclutamiento

Saber gestionar a todas aquellas personas que pasen a formar parte de la base militar es otra de las claves del buen avance de la campaña, desde la oficina de reclutamiento iremos asignando a todas aquellas que quieran enrolarse a sus respectivas tareas en función de las habilidades, y los rasgos.

En el panel de reclutamiento podemos especializar a los y las reclutas en diferentes orientaciones laborales según nos convengan para el campamento

Las habilidades son las capacidades básicas, las cuales se pueden entrenar, y por otro lado, los rasgos son talentos especiales asociados a esa persona en concreto, por ejemplo, nos podemos topar con personas que son buenas cocineras, lo cual sube un 25% más rápido la experiencia como cocinero, conocimientos de defensa, búho nocturno, donde su energía desciende un 10% más despacio durante la noche, y así entre otras tantas.

Pero también existen rasgos negativos que juegan en detrimento de la persona, como aquellas que se cansan más rápido, que consumen más comida, o que tienden más a enfermedades o lesiones, más tendencia a enfermar, entre otras, ya está en nuestras manos cómo queremos distribuir al personal. Podemos monitorizar a reclutas específicos para ver su evolución, y mandar a cada uno y cada una a descansar si así se requiera, o a trabajar más para llegar a ciertos objetivos antes de tiempo, pero todo ello repercute en su salud, de forma positiva y negativa respectivamente, en el equilibrio está la clave de la gestión.

Cada recluta puede mejorar sus habilidades en los edificios de entrenamiento militar, para mejorar su inteligencia, fuerza, precisión y velocidad, marcando unos objetivos concretos dependiendo de la especialización elegida. Esta especialización es importante de cara a aquellas más avanzadas, ya que algunas de ellas requieren de más de una habilidad, por ejemplo, para ser espía es  un requisito tener una buena velocidad e inteligencia, o para manejar tanques ser diestro o diestra en fuerza y precisión.

Disponemos de opciones rápidas para ver el estado general de los edificios, los que están en rojo necesitan reparación más urgentemente

Aunque su apariencia viene predeterminada, podemos modificar el aspecto de los y las reclutas, además de su clase si decidimos reorganizar a parte del personal para la realización de otras tareas. Es importante cuidar el estado de salud de cada integrante del campamento, así como su moral, la energía, y la comida, todo ello dependiente de una buena distribución de los recursos de la base, y con una buena gestión económica, ya que cada soldado recibe un sueldo determinado en función de su rango y sus labores.

Cada recluta trabaja en un horario determinado, ya que One Military Camp cuenta con ciclos de día y noche, de esta forma el campamento se mantiene siempre activo, ya que, por ejemplo, es importante que siempre haya cocineros y cocineras en la cantina, para que puedan servir comida en los dos turnos, pero estos a su vez necesitan un horario de descanso, por lo que habrá que contratar a la gente suficiente como para que puedan turnarse, y así con casi todas las labores.

A lo largo de todo el mapamundi se distribuyen varios edificios o asentamientos, en los bancos podemos pedir préstamos si vamos mal de dinero, pero deberemos pagar a diario con intereses, poblaciones que pagan impuestos a la base, pero que mandan un tipo específico de recluta, o diferentes proveedores de munición, medicinas, combustible, y comida, los cuatro principales recursos de los que se nutre la base principal.

Siempre es bueno tirar de mercenarios si es necesario

Acercando la vista

Estamos ante un título que no se anda por las ramas a nivel gráfico, cumple bien con lo esperado en videojuegos de este tipo, pero se permite detalles muy valorados, entre ellos, que, al acercar la vista a los edificios, podemos ver el día a día de las personitas que habitan nuestro campamento, cada edificio cuenta con sus propias animaciones y es de agradecer.

Sumado a esto último, si un recluta se siente dolorido o desanimado, se notará en su avatar, por lo que el nivel de inmersión conseguido es muy elevado, aunque a nivel gráfico no sea un portento, pero eso no empaña para nada el disfrute de este juego.

A nivel sonoro está repleto de canciones de inspiración militar, así que el sonido de las trompetas está a la orden del día, pero sabe conjurar temas de calma y sosiego para que la gestión del campamento sea una actividad placentera y relajada en varias ocasiones. Como curiosidad, podemos personalizar nuestra bandera, el himno del campamento, así como diferentes carteles a lo largo y ancho de la base.

Al acercar la vista dentro de los edificios veremos su interior, y a quien esté dentro

Abylight Barcelona está realizando un gran trabajo de mejora y optimización dentro del juego, además de escuchar el feedback continuo de la comunidad, un hecho que se valora en gran medida. La carga de texturas, la distancia de dibujado, y los efectos de iluminación están bien trabajados, además del gran despliegue de edificios, los cuales se diferencian perfectamente entre sí. Cuenta con verificación para Steamdeck, así que, si estas pensando en jugar en portátil, estas de suerte.

Conclusiones

One Military Camp es, sin duda, un buen come horas en todo lo relacionado con la gestión del campamento, y el cumplimiento de objetivos, la reconquista de territorios es muy placentera de experimentar, y siempre nos aporta nuevas opciones, ya sea en cuanto a proveedores, mercenarios, o poblaciones.

Se echa en falta mayor profundidad en la narrativa de la campaña, aunque se trata de un lanzamiento orientado a todo tipo de público, pero, de cara a una segunda parte o a futuras campañas (qué bonito es soñar), siempre se pueden introducir más giros narrativos o misiones secundarias referidas a los héroes o heroínas que profundicen más en la historia y sus personajes.

Los héroes y heroínas son figuras importantes dentro de la trama

Pienso que le habría sentado de maravilla algún tipo de sistema de batallas durante las misiones de conquista de territorios, al menos una por cada uno de ellos, donde poder combatir por turnos o en tiempo real en escenarios acotados. Aunque está es una cuestión que pienso en alto, puesto que el juego se orienta a la gestión, cosa que realiza y plantea de maravilla.

La curva de dificultad puede ser algo elevada al principio si no nos centramos en los cometidos más apremiantes, por lo que debemos atender las gestiones con paciencia y no correr, ya que el dinero es finito y se nos puede acabar enseguida si hay que pagar muchos sueldos o a muchos proveedores, la distribución de la economía es de vital importancia y el resultado de no hacerlo correctamente es perder la partida estrepitosamente, por lo que hay que vigilar siempre las arcas.

El buen humor que transmite el juego durante toda la campaña siempre es un punto positivo, ya que durante las misiones nos saltarán pasos de cada una de ellas correctamente realizados, pero aquellos que no se han conseguido casi siempre tienen una nota de humor, por ello, y por su jugabilidad, se trata de un título centrado en la diversión, y que nos mantendrá entretenidos o entretenidas durante horas.

Un edificio destruido es inservible, además de que puede provocar accidentes, pero se pueden reparar desde cero

Los paneles de información son muy accesibles y entendibles, por lo que tendremos buenos datos en todo momento en cualquier tipo de gestión, tanto de edificios como de soldados, además de contar con alertas que nos permiten ir directamente a aquellas tareas más apremiantes, ya sea por el estado de salud de algún edifico, la condición de alguno o alguna de nuestras soldados, si falta personal, energía en algún punto, entre otras.

Si estas dentro de la vorágine de juegos de gestión es una gran opción dentro del panorama actual, ya que actualmente podemos gestionar Zoos, hospitales, parques jurásicos, atracciones, y muchas más temáticas, pero One Military Camp se muestra como un ejemplo en su campo, siempre hay gestión, siempre hay cuestiones a solucionar, sobre todo para salvar al mundo.

Reseña
Nota final
8.2
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analisis-one-military-camp-donde-gestion-y-diversion-se-alistan-juntosVas a invertir muchas horas en One Military Camp, el cual nos trae modo campaña y modo sandbox para mantener nuestra atención en la gestión del campamento militar, tanto a nivel de recursos, mantenimiento de edificios, como en la especialización de todas las personas reclutadas. El modo historia no es profundo, y podría aportar más a la propuesta, así como su apartado gráfico, que cumple con lo esperado, pero no destaca. Si te gusta gestionar, esta es una gran opción para ello.