El día de hoy os traemos el análisis de Nobody Nowhere, la aventura narrativa de Tag:hadal que está recibiendo críticas muy positivas en PC.
De momento el juego se encuentra disponible sólo para PC (Steam) y cuenta con una demo gratuita si quieres darle un tiento antes de su compra.
Un futuro extraño
En el año 2079, la humanidad ha conseguido crear vida artificial conocida como "Replicants". Cada uno de ellos es todo un hito de la ciencia debido a lo difícil que es crearlos y hacer que se desarrollen adecuadamente.
Esta historia comienza cuando uno de estos Replicants despierta en un laboratorio en mitad de una situación de vida o muerte.
En su intento por escapar de lo que le espera conocerá a White Dove, una agencia dispuesta a prestarle su ayuda, pero las cosas quizá no vayan según lo planeado. Cada quién oculta sus intenciones y el proyecto Replicants oculta turbios secretos.
Siéntate y lee, que está interesante
Aunque no se define como tal, Nobody Nowhere se siente como una novela visual interactiva. Los diálogos tienen un gran peso durante la aventura, siendo la narrativa el gran fuerte del juego y contando con secuencias de acción bastante limitadas.
¿Es esto malo? No necesariamente y quizá depende de lo que esperabas del juego. Personalmente, me gusta que el juego se centre tanto en la narrativa, pues la historia de nuestro protagonista y los Replicants es muy interesante y consigue engancharte muy rápido.
Los personajes de la historia son pocos, lo cual les da oportunidad para brillar y ser carismáticos en lo relativamente poco que dura la historia. Todos los protagonistas tienen algo particular, un diálogo o una historia que te hacen que sepas que están ahí o que fueron parte importante de toda esta trama de engaños, arrepentimientos y abusos en nombre de la ciencia.
Los segmentos de jugabilidad están limitados a las partes en las que tendremos que hackear las IA de las instalaciones para poder acceder a contraseñas o desbloquear algo necesario para continuar avanzando en la historia.
Se dan en forma de minijuegos con naves o puzles, y la forma de jugarse tiene ciertas variaciones según el momento y dispositivo a hackear, por lo que no se sienten repetitivas ni pesadas.
También hay otros momentos, bastante contados, en los que interactuamos con los entornos en primera persona. Son usados puramente como parte de la narrativa sin que su aporte vaya más de allí.
Como veis, la parte RPG está muy limitada y podríamos decir que prácticamente inexistente. Es comprensible, pero si el juego no se vendía como una novela visual esperaba algo más de interacción y acción.
Verse bien siempre es importante
En cuanto al apartado visual, Nobody Nowhere ofrece un estilo pixel art bastante bonito, con escenarios que muchas veces son simples, pero siempre detallados en todo lo que pueden aportar a la historia.
Una vez los ves bien, encuentras referencias o cosas que encajan perfectamente con la personalidad de los personajes. Incluso tenemos escenas cinemáticas en este estilo, lo cual habla bastante sobre el cariño del autor hacia el juego.
El juego no cuenta con voces, pero lo compensa con una buena banda sonora (y siendo sinceros, no le puedo pedir voces a un juego desarrollado por una persona). Eso sí, sólo está en inglés, lo que aunque comprensible al ser un juego con un presupuesto modesto, no deja de ser un impedimento para disfrutarlo. Especialmente cuando su gran peso está dentro de la historia.
El rendimiento es bastante bueno, funcionando bien en toda clase de equipos e incluso siendo compatible con la Steam Deck (aunque no se marque como oficialmente verificado). Eso sí, pese a tener la sincronización de guardado activada, no he conseguido tener mi progreso guardado en ella.
Si quitamos esto, la experiencia general es bastante agradable sin necesidad de hacer cambios en la configuración por defecto ni toquetear los controles (es compatible con mando en PC).
Sin grandes pretensiones, pero una joya
Nobody Nowhere es una sorpresa bastante grata. No es un juego que dure demasiado, pero en esas dos o tres horas que dura, la historia consigue engancharte y cautivarte.
Ha sido desarrollado por una única persona, lo cual le da incluso más merito a que se encuentre bastante pulido. Lo de no poder trasladar mi partida del PC a Steam Deck normalmente sería un punto en contra, pero teniendo en cuenta que no existe soporte oficial, seguramente sea algo que ni el desarrollador anticipase.
Ya lo tenéis disponible en Steam a un precio bastante accesible (poco menos de 10 euros) pero si aún así no lo tenéis muy claro, os vuelvo a recordar que tiene una demo disponible en la plataforma de Valve.
