El estudio londinense Untold Games nos trae su primera apuesta para la realidad virtual de Sony con una historia de ciencia ficción futurista y profunda que no te dejará indiferente, Loading Human: Chapter 1.

Nos pareció a primera vista uno de los juegos más prometedores para la realidad virtual tal y como la concebimos ahora mismo, pues combina varios elementos que casan bien con la tecnología del futuro que todos estamos deseando ver en acción. Aún así, hemos encontrado serios problemas con la experiencia a la hora de jugar a este título.

La trama principal es llamativa, y la forma de plantearla nos ha parecido muy acertada. Acompáñanos en este análisis para saber algo más sobre el juego, la historia y los entresijos detrás de esta obra que está muy lejos de ser maestra.

Historia principal

En un ambiente futurista y donde la inteligencia artificial está a la orden del día, Loading Human: Chapter 1 nos presenta una trama compleja y profunda, cargada de sentimientos y que te enganchará sin duda desde el principio.

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Comprenderemos el entramado inicial de la historia gracias a las reconstrucciones de recuerdos de una época pasada de nuestro personaje Prometheus, en la que su padre, un prestigioso científico te hará desplazarte hasta la misma Antártida para que te encomiende una misión: está agonizando, y tu deber será encontrar la "Quintaesencia", una fuente de energía suprema que podrá utilizar para revertir los efectos del tiempo, y así escapar de las garras de la muerte que están terminando por rodearle.

Además, experimentaremos relaciones personales, sobre todo con Alice, la ayudante de tu padre, una chica por la que estaremos perdidamente enamorados. Durante la trama debemos tomar decisiones que, si bien no afectan drásticamente al transcurso de la historia, nos harán experimentar distintas visiones dentro de la trama principal.

El juego está presentado como una aventura gráfica de las de antaño: calmada, tranquila, en la que te tienes que tomar tu tiempo para hacer las cosas y en la que, sobre todo, no encontrarás ni una pizca de acción.

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Además, encontraremos una suerte de experiencias para que experimentes con la realidad virtual de una forma más activa, y se agradecen, porque hacen que el transcurso de la historia sea algo más ameno. Aún así, no es nada sorprendente y podrían haber ahondado algo más en este aspecto.

Al final la historia te termina enganchando, y es algo importante, dado la naturaleza del videojuego, que como indica su propio título es el primero de una trilogía. No obstante hablaremos de ello más adelante.

Jugabilidad

En este apartado, el título empieza a decepcionar. Contamos con una historia interesante y miles de objetos con los que interactuar para tener una inmersión en el mundo virtual casi absoluta, pero a la vez varios fallos que no tienen cabida en un título de estas características. Empezamos el juego con un tutorial sobre cómo movernos, y con él empiezan los problemas.

Cabe destacar que en Sonyers comenzamos el juego con dos PlayStation Move, siguiendo el consejo del juego, pues te recomienda encarecidamente que así lo hagas para tener una experiencia completa de inmersión.

En este tutorial te enseñan a moverte. Si quieres ir hacia delante, apunta con el mando hacia delante y deja pulsado el botón central. Si quieres ir hacia atrás, más de lo mismo pero apuntando hacia esa dirección. También puedes agacharte y levantarte pulsando dicho botón mientras apuntas hacia abajo y hacia arriba respectivamente.

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Hasta aquí todo parece intuitivo, y así es. El problema es que no funciona bien. Si quieres girar, solo tendrás que apuntar hacia el lado donde quieres hacerlo y pulsar el botón. En ese momento la pantalla producirá un pantallazo negro y girarás de forma discontinua y repentina. Es verdaderamente incómodo. ¿De verdad no se podía haber hecho de otra manera? Es cierto que es uno de los pocos juegos de PS VR en los que te puedes mover por todo el escenario pero, para ser sinceros, cualquier otro método hubiera sido mejor que este.

Todo esto provocó que nos decidiéramos finalmente a utilizar el Dualshock 4 con la esperanza de que la cosa mejorase, pero el movimiento tiene los mismos efectos desconcertantes y poco precisos, sólo que pulsando las palancas del mando. Nos pareció mucho más cómodo, pero seguimos teniendo el mismo problema: una jugabilidad horrible.

Para ahondar algo más en este apartado, en casi todo el juego deberemos buscar objetos para interaccionar con ellos. Sin embargo a veces no hemos sabido demasiado bien cómo actuar y hacia dónde dirigirnos. Tendremos a nuestra disposición un botón de pistas que te ayudarán a proseguir, pero a veces te harán referencia a un lugar u objeto que no queda nada claro dónde está. Esto provocará que estés dando vueltas por los escenarios y, por supuesto, si el movimiento del personaje fuera cómodo no nos importaría...pero en este caso, terminas muy cansado de la torpeza que sientes al moverte.

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Es una lástima, pero esperamos que con los próximos capítulos, o tal vez con algún tipo de actualización se termine corrigiendo o depurando el control para alcanzar una experiencia más satisfactoria.

Apartado técnico

De la música y efectos sonoros no tenemos mucho que decir, nos parecen correctos y bien conseguidos, y este es un aspecto muy importante para la inmersión. El problema radica en el apartado visual. Es muy pobre, y no podemos entender por qué no han aprovechado más el potencial del dispositivo.

Entendemos que es una tecnología que todavía tiene pendiente demostrar hasta dónde puede llegar, pero los gráficos son demasiado malos, las texturas muy poco conseguidas y los efectos especiales (como el fuego) dejan mucho que desear.

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Los gráficos, a nuestro parecer, estarían entre las PS2 y la PS3, y esto no está justificado de ninguna manera, sobre todo atendiendo al precio que tiene el título. Pero de este tema también hablaremos más adelante.

Calidad de la inmersión

A pesar del apartado gráfico que tiene, que puede llevar a pensar que arruinaría totalmente la experiencia de la realidad virtual, puedes darle una oportunidad al juego, pues la historia es tan llamativa como para que lo puedas pasar por alto, y la cosa se pone interesante relativamente pronto (a pesar de que el transcurso de los acontecimientos es algo lento).

El verdadero problema es, sin duda, su jugabilidad. Como hemos destacado, los controles son tan imprecisos que a nosotros en ciertas ocasiones nos han llegado a desesperar. Desde nuestro punto de vista, el tema visual lo podríamos dejar pasar por la naturaleza del estudio que desarrolló el juego, pero no la pésima calidad de los controles.

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No obstante, nos gustaría remarcar en este punto que no deja de ser una experiencia negativa propia que hemos sufrido nosotros. Es posible que tú te hagas mejor a los controles tal y como están planteados en el juego y no creas que son tan ineficaces como los describimos nosotros.

Sensación de mareo y molestias

El juego no nos ha presentado ningún problema relacionado con mareos o náuseas, a excepción de los momentos donde empezamos a dar vueltas buscando algún objeto.

Estos momentos son desesperantes, y desde nuestra humilde opinión, se podría haber hecho un trabajo muchísimo mejor. Esa sensación de agobio que te provoca el hecho de que el personaje no responda como tu quieres de manera precisa es algo que en un juego de realidad virtual pase desapercibido, y a veces notas cómo tu vista se va cansando de tantos pantallazos provocando a menudo cierto cansancio.

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Conclusión

El juego se presentaba como una idea muy original, podría haber sido un gran título de realidad virtual y sin embargo, han dejado muchas cosas buenas por el camino.

La mala calidad en el apartado gráfico y la pobre jugabilidad que han implementado es sin duda el gran motivo de que sea un juego bastante prescindible. Esperamos que se tomen otras alternativas a este movimiento en futuros títulos pues, a pesar de ser uno de los pocos juegos de PS VR en los que tenemos libertad para movernos por todo el escenario, no está nada bien logrado.

Además, el juego está dividido (según está previsto) en tres capítulos, y parece factible suponer que cada uno de ellos tendrá un precio de 39.99 € en la PS Store, algo que vemos desorbitado de una forma abrumadora (estamos hablando de que el conjunto costará unos 120 €, aunque no hay nada confirmado todavía). Teniendo en cuenta que el primero dura unas 3 ó 4 horas, si hacemos cálculos estimados nos parece una auténtica barbaridad, pues ponemos en duda que los otros dos capítulos restantes sean mucho más largos.

Definitivamente, tendremos que seguir esperando un juego que de verdad nos proporcione una experiencia satisfactoria, que merezca la pena, que tenga un precio justo y que no sintamos decepción al jugarlo. Desde luego que por este juego no pasa lo que esperamos del nuevo dispositivo de Sony, y estamos convencidos de que hay auténticas maravillas aún por llegar. La pregunta clave es, ¿se harán mucho de rogar?