Este análisis ha sido realizado con una copia facilitada por Meridiem Games Juego disponible en Nintendo Switch, PC, PlayStation 4 (versión analizada) y Nintendo Switch.
RecoTecnologhy ha vuelto, y por todo lo alto. Los madrileños creadores de títulos tan polémicos como Toro llevaban sin deleitarnos sin alguna de sus obras desde el juego de estrategia por turnos (TBS) Numantia.
Ahora con varios años más de experiencia a la espalda nos traen 1971 Project Helios, tratándose de un nuevo e innovador juego de estrategia por turnos, haciendo hincapié en la combinación de tácticas militares de guerra moderna y un clásico combate cuerpo a cuerpo.
Y es que los juegos de estrategia tienen marca española, y si algunos estudios como Pyros ya nos sorprendió en su época con la saga Comandos, podemos decir tranquilamente que 1971 Project Helios no tiene nada que envidiar.
La guerra fría era fría de verdad
En este título, los recursos escasean, como las armas de fuego y los vehículos militares, en su contra, los conflictos y las hostilidades son casi infinitas. Por último, añade un último componente a esta bomba de relojería, el terrible frío helado, que aniquila tanto a tus amigos como a tus enemigos.
La narrativa de esta historia lleva a ocho protagonistas a unir fuerzas por una causa común, haciendo girar la historia en torno a un científico importante al que el enemigo tiene secuestrado por una estratocracia masiva.
En el camino que los lleva a él, nuestros héroes deberán de hacer frente común para evitar los ataques de los asaltantes, investigar el cuartel general militar e infiltrarse en el territorio de una peligrosa secta religiosa dónde impera el credo a la antitecnología.
Así pues, con todo en su contra, los protagonistas salen en busca de la salvación para la humanidad, siendo esta científica su posible última esperanza, en un mundo postapocalíptico.
Dónde, como ya hemos visto en entregas de caracteres muy similares, como Commandos o Shadow Tactics, los protagonistas se irán conociendo con forme avanza la historia, dándonos tiempo a familiarizarnos con sus habilidades, tanto genéricas como específicas para cada personaje.
Estratégica táctica y a luchar
Pese a la inmersión en una historia que nos sumerge en sus profundidades desde el minuto uno, deberemos de pasar la mayor parte del tiempo lidiando con un juego que no deja de ser táctico: Calculando nuestras jugadas a base de porcentualidad, conteo de casillas y muchas barras de vida. Lo ya visto en Warhammer es posiblemente, el mayor referente en cuanto a su jugabilidad.
No obstante, quizás es aquí donde reside la innovación, y es que en este título los combates por turnos son más directos, quizás sencillos y accesibles, siendo así una buena apuesta para introducirse en este género. No veremos una gran cantidad de enemigos en pantalla a la vez, y antes de aceptar el ataque que realizaremos el juego deja bastante claro la cantidad de vida que quitaremos.
Como ya hemos visto en los títulos ya nombrados como Commandos, nuestros protagonistas apenas rozan el encontrarse todos en el mismo nivel, y es que está pensado para desplegar estrategias distintas acorde a los héroes que podremos usar en cada fase.
Desde habilidades únicas como enviar un perro a morder al enemigo, a un francotirador, con un gran alcance o un curandero para reponer nuestras unidades cuando más debilitadas estén.
En cuanto al entorno que nos rodea, cada nivel cuenta con escenarios muy distintos, pero echamos de menos que sea más interactivo. Y es que las barricadas con las que contamos en el escenario son irrompibles, lo que nos da cierta ventaja (al igual que al enemigo), y no hay ningún elemento con el que interactuar en cada uno de los niveles.
De hecho, aquí es donde más diferencias hemos encontrado con otros juegos de géneros similares, en el no poder ejecutar acciones que vayan más allá de los combates tácticos a los que nos enfrentamos.
Contamos con una habilidad especial llamada “Overwatch”, que permite a la unidad a la que se la asignemos atacar automáticamente al enemigo, (nuevamente, el enemigo cuenta con la misma habilidad), y aquí llega la propuesta más original del juego, el elemento Fulgor, una materia muy codiciada en el universo de este juego.
Esta hace la vez de multiusos, con ella podremos recargar más rápidamente las habilidades ya usadas (algunas tienen un tiempo de enfriamiento), revivir a los compañeros caídos, y, además, curar la enfermedad del frío, un estado perjudicial para cualquiera al que se le atribuya.
Y es que este será un elemento muy a tener en cuenta, ya que, el resultado de la batalla puede cambiar si tenemos este elemento en consideración, como ya hemos mencionado, afecta tanto a amigos como a enemigos, y estará presente en casi todos los escenarios del juego.
Su funcionamiento es muy sencillo, tras cada turno, la barra de vida de las unidades se irá congelando lentamente, llegando en el peor de los casos a morir congelados, pero seguirá presente en el nivel, y podremos seguir restándole vida a partir de la barra congelada.
Y por último y para añadir más facilidad a las cortas batallas a las que tendremos que hacer frente, si una jugada nos sale mal, o no es el resultado esperado, podremos rehacer esa jugada y repensar nuestra estrategia.
Esto puede parecer desde un principio que rebaja mucho la dificultad del juego, pero nada más lejos de la realidad, ya que, en más de una ocasión, hemos agradecido poder hacer uso de ella.
En cuanto a la cámara que manejaremos, no me queda más remedio que hacer una nueva mención al juego de estrategia Commandos, donde como en esta entrega la cámara se rotara en secciones, con la diferencia, que juega en su contra de que, esta vez no podremos alejarla o acercarla.
Prepara bien tus habilidades, te serán vitales
Pese a la rareza de ver en este tipo de juegos la aparición de elementos coleccionables, en esta entrega será un elemento a tener en cuenta. Si bien es cierto que los distintos caminos que podremos tomar en el juego no son muy variados entre sí, si dependerá nuestra decisión en nuestra selección para poder recogerlos. Y es que obtenerlos todos puede ser importante si queremos obtener más información sobre este mundo postapocalíptico.
No, en este título no contaremos con un aumento progresivo del nivel de nuestros protagonistas, algo a lo que ya estamos acostumbrados en este género. Pero al menos contamos con un árbol de habilidades que nos permitirá mejorar a nuestros héroes, desde aumentar la capacidad de Fulgor que podremos soportar en un nivel a distintos ítems y mejoras para nuestras habilidades, que nos ayudarán en nuestras batallas, y que pueden ser cruciales para obtener la victoria en ellas.
Los enemigos a su vez se dividen en varias facciones, y será vital para ganar que seamos capaces de reconocerlas, ya que de esto depende que podamos leer sus movimientos y anticiparnos a sus jugadas, siendo crucial es un juego de estas características.
Por último, hay que hacer mayor alusión a las conversaciones entre los distintos personajes que pueden ser de lo más dinámicas, lo que igual nos anima a querer rejugar las distintas fases que componen el juego, en busca de extraer todo el contexto posible de él.
Y es que, las decisiones que tomemos pueden tornar el resultado del arco argumental, ya que el juego cuenta con hasta 3 finales distintos, que dependerán de nuestras decisiones tomadas.
En definitiva, nos encanta que a través de las batallas podamos profundizar en la trama de los personajes, así como que esto afecte al desarrollo de la historia, algo poco común en el género.
Una producción de película en su apartado técnico
Contamos con un arco argumental digno de las mejores películas que tratan sobre guerras bélicas. Desde el punto de vista de este humilde servidor, os aseguro que la historia engancha desde el minuto uno del juego, que es acompañado por una fantástica obra musical, creada por Xabi San Martin (del popular grupo musical español La Oreja de Van Gogh) y que además de quedar bien como acto promocional aporta un excelente trabajo al apartado sonoro.
Preciosos paisajes de estilo dibujo que destacarán por su belleza y singularidad en cada uno de los distintos niveles. El juego, no se hace en ningún momento repetitivo, y aseguramos que mantiene el nivel de dificultad progresiva con forme avanzamos por las distintas fases, dejándonos completamente sumergidos en nuestras propias batallas.
Conclusiones
1971 Project Helios sabe tocar varios palos con grandes aciertos -jugabilidad, estrategia, trama, banda sonora- cargado además de una gran rejugabilidad. Eso sí, no sin tocar también algunos defectos, como su cámara algo incorregible.
Y es que hacía ya tiempo también que un juego de nuestra tierra no nos entusiasmaba tanto, sin llegar a ser ningún portento para el género o el motor gráfico, consigue hacernos disfrutar de su acción y encima lo hace a un precio bastante asequible.
Ya he hecho mención a esto anteriormente en este mismo análisis, por lo que recomiendo altamente el título, tanto para los fans del género como para los que quieras empezar en él, los juegos de estrategia están en buenas manos en este estudio.
Donde comprarlo
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